23.03.2015 Views

0AnxFa

0AnxFa

0AnxFa

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

profundamente involucrado, debido a que nosotros promovimos la negociación del Protocolo de<br />

Río y somos todavía responsables de hacerlo cumplir -junto con los otros poderes garantes:<br />

Brasil, Chile y Argentina.<br />

Mientras que el Perú es la gran realidad internacional para el Ecuador, su realidad nacional<br />

dominante es la división del país entre Sierra y Costa. Aunque los Andes dividen al país por la<br />

mitad, la región oriental es en su mayor parte selva tropical surcada por los tributarios del<br />

Amazonas.<br />

Hace algunos años se realizaron exploraciones en busca de petróleo pero el costo de un<br />

oleoducto a través de los Andes no se justificaba por los descubrimientos hechos. El Oriente<br />

por lo tanto, con su escasa población (que incluye a indios reductores de cabezas) cuenta muy<br />

poco en la vida nacional. Las otras dos regiones, los Altiplanos andinos y la Costa del Pacífico<br />

están divididos equitativamente en área y población y sus intereses (los de cada región) están<br />

tradicionalmente en conflicto,<br />

La revolución liberal fue realizada en Ecuador en 1895 y la víctima principal fue la Iglesia,<br />

desde el momento en que las fuerzas dominantes en la Costa, detrás de la revolución, tomaron<br />

las riendas de la política nacional quitando el poder a los terratenientes tradicionales de la<br />

Sierra. Iglesia y Estado fueron separados, se estableció la educación fiscal, se instituyeron el<br />

divorcio y el matrimonio civil y grandes propiedades de la Iglesia fueron confiscadas.<br />

Después de la revolución liberal de 1895 el Partido Liberal dominó la política ecuatoriana a<br />

través de una alianza con los conservadores que permitió a los primeros integrarse a la<br />

aristocracia terrateniente mientras que las condiciones de vida cambiaron muy poco para la<br />

abrumadora mayoría de la población, la que quedó marginada de la estructura del poder. Aun<br />

así, la política ecuatoriana del siglo XX no es simplemente la historia de luchas violentas entre<br />

conservadores y liberales -es en efecto eso- pero también mucho más. Ecuador cuenta con<br />

uno de los más increíbles políticos latinoamericanos del siglo: José María Velasco Ibarra, quien<br />

ha sido elegido presidente nuevamente hace sólo dos meses. Esta es la cuarta vez que resulta<br />

elegido y ninguno de sus períodos presidenciales ha sido consecutivo. De las tres ocasiones<br />

anteriores en que ha sido presidente, dos terminaron antes de completado el período<br />

constitucional, debido a golpes militares contra él.<br />

Velasco es un tempestuoso petrel de la política ecuatoriana, un hechizador cíe las masas, cuyo<br />

poder de palabra es irresistible para el pueblo. Es también un ser autoritario para quien resulta<br />

muy difícil compartir el poder con el Congreso. Su política es tan impredecible corno su<br />

temperamento ardiente y ha tomado posiciones conflictivas frente a muchos asuntos políticos,<br />

consiguiendo de esta manera el apoyo de todos los partidos políticos establecidos, en algún<br />

momento 1.1 otro. Triunfó en las elecciones de junio con el margen más grande jamás obtenido<br />

por un candidato presidencial ecuatoriano y lo logró con su típica manera ingeniosa. Pasando<br />

como independiente se alió con las masas empobrecidas por medio de violentos ataques<br />

verbales contra las oligarquías gobernantes, las que según él apoyaban las candidaturas de los<br />

partidos Liberal y Conservador. Prometió cambios sociales y económicos fundamentales, un fin<br />

al gobierno de las oligarquías y capataces políticos y una mejor distribución del ingreso<br />

nacional. En base de este lenguaje populista Velasco obtuvo casi 400 mil votos, una victoria

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!