En PortadaPor Enrique Torres RojasResponde su solidezKenworth Mexicana es laempresa líder en la ventade tractocamiones en elpaís desde siempre.Según sus cifras, tienen 55% departicipación en el mercado.En los primeros 10 mesesde 2009, a causa de los factoreseconómicos conocidos, registrabauna baja del 73% en sus ventas decamiones en el país, en comparaciónal mismo periodo de 2008,con una caída en la exportación del41% y en la producción del 62%.Aún así, Samuel Means ve el futurocon optimismo.En entrevista, destaca elhecho de que la empresa a principiosde noviembre ya fabrica 29camiones al mes, cuando dosmeses atrás producían 27 unidadesen su planta de Mexicali, en la fronterade Baja California con EstadosUnidos. “Cerraremos el año con 30camiones y para 2010 esperamosmejorar entre un 15 y 20% más alprimer semestre del año”, dice.Esa confianza en la empresala confirma la calificadora StandardSamuel MeansChatos y construcciónPara el 2010 mantendrá la prioridad en la venta de sus tradicionales tractocamionese incentivará su oferta en el segmento de cab overs para elreparto urbano, donde ya tienen cuatros diferentes modelos. Mejorará suparticipación en nichos de mercado como el de la construcción con sumodelo T460 que recientemente fue presentado en el país.Con sus modelos KW 45 y 55 busca participación en el segmento urbano& Poors, al otorgar una calificaciónMxAAA estable a septiembre pasado,“nuestra expectativa de que laempresa logrará mantener su rentabilidady generación de flujo a travésdel ciclo, así como el hecho deque sus operaciones de manufacturase mantendrían libres dedeuda”, justifica.Means explica que para elloha jugado un papel importante susolidez financiera en el apoyo alcliente, que este año fue impactadopor la devaluación del peso frenteal dólar y la afectación en el preciode sus camiones.Para atenuar el negro panoramafinanciero, ajustaron con susclientes sus programas de financiamiento,y el monto de losenganches y ampliaron el plazo de3 a 5 años para ayudar en la compra,lo mismo de camiones nuevoscomo usados.“El gobierno debe apoyarpara flexibilizar las opciones decrédito al transportista, porqueactualmente mucho del que seotorga para la compra de camionesse hace a través de las financierasde las armadoras y por elloel valor de riesgo del crédito esalto”, comenta.Para el directivo, la formulaque requiere el país para tener untransporte competitivo es implementaruna ley que obligue a sacarde la circulación camiones con másde 20 años de antigüedad, quesegún la Secretaría deComunicaciones y Transportes sonmás de 110 mil.“Ya hay varias normas, queno son perfectas, pero si se aplicaránayudarían por mucho a lasituación actual del transporte parala modernización y competitividadde la flota. También existe el programade chatarrización, pero esmuy pobre, ya que el estímulo fiscalal transportista por destruir suunidad, cuando se implementó,andaba en un 15% del valor delcamión, pero ahora con la devaluaciónel monto será de acaso el10%. En España se han implementadoestas medidas y ahora laedad promedio de su flota vehiculares de 3.6 años, mientras lanuestra es de 17”.Para Means, “si el gobiernoapoya el plan de modernizacion,los transportistas competirían encondiciones similares, se rejuveneceríala flota y con ello se tendríanmejores costos de operación y seincentivarían las ventas de camiones,porque México tiene a lafecha los niveles más bajos enventas de camiones de los paísesindustrializados”.20 I <strong>T21</strong> <strong>Diciembre</strong> 2009
En PortadaPor Enrique Torres RojasEntre el peso, el dólar y el yenComo si les cayera unluchador de sumo, así fueel impacto que sufrió elprecio de los camionesprocedentes de Japón a México,durante los primeros meses de la crisisfinanciera mundial.Nuobo Izumina, presidente deIsuzu Motors de México, refiere que ladebacle financiera mundial impactó elprecio de sus camiones en el país, alpadecer la paridad peso – dólar, quedevaluó a la moneda azteca en un30%, además del 15% de la depreciacióndel yen frente al dólar, “estollevó a un impacto del 40% en el preciode los camiones”, dice.La situación de la economíacontrajo la disponibilidad de crédito, loque repercutió en la caída de ventasde vehículos, ya que según datos de laempresa, 80% de las ventas decamiones en el país se hacen pormedio del financiamiento..La opción para paliar la situación,comenta, fue incentivar la compracon un precio fijo al camión antelos vaivenes del tipo de cambio; ademásde mantener sus planes de entrara nuevos nichos de mercado con unnuevo modelo de camión, el cual involucróla puesta en marcha de su plantade ensamble.Esto porque el acuerdocomercial que mantiene México conJapón sólo les permite comercializarunidades con un Peso Vehicular Bruto(PBV) de máximo 7.1 toneladas,Midibus y camión Clase 6La firma de capital japonés dará a conocer en los primeros meses de2010 un midibus para el transporte de pasajeros, el cual tendrá capacidadpara 30 personas. Isuzu hará el tren motriz y la carrocería la fabricaránuna o varias empresas mexicanas, las cuales aún se están evaluando.Asimismo, en el transcurso del año planean introducir en el país unmodelo para la Clase 6 (PBV mayor a 8,845 hasta 11,793 kg) queserá ensamblado en su planta en el Estado de México.Amplía su gama con el ELF-600Nuobo Izuminamientras que la opción de mercadoque vieron fue de un modelo con másde ocho toneladas de PBV, para locual invirtieron 28 millones de pesosen la planta, y así ensamblar enMéxico el camión, para evitar unincremento en precio por arancel encaso de tener que importarlo.Nobuo Izumina explica que elsegmento de camiones ligeros fue elmenos afectado de todos los demásmodelos con una caída del 40%, yque su estrategia les llevó a superarsus expectativas de venta, ya que conformea su plan de negocios, esperabanunas dos mil 500 unidades al cierrede 2009, sin embargo, aguardancerrar con dos mil 800 unidades.“Nos ayudó también la negociaciónpara ampliar el cupo de importaciónde camiones, donde tuvimos laoportunidad de traer 600 unidadeslibres de arancel, porque algunas delas empresas japonesas establecidasen el país por la misma situación financierano ocuparon su cupo de importacióny lo transfirieron a las empresasque teníamos demanda”, dice.Izumina ha trabajado en 60países distintos para el negocio deIsuzu y en el poco tiempo que lleva enel país dice que se ha percatado devarias oportunidades para mejorar eltransporte en México y con ello incentivarla venta de camiones en el país.“El gobierno debe generarincentivos para renovar el parquevehicular y entre otros, cambiar lalegislación, sobre todo ambiental,que obligue al cambio de unidades,porque no es posible que circulencamiones con más de 20 años deantigüedad”Agrega que en México se tieneplaneado el cambio de nomenclaturaambiental para motores a diesel para2011, aún cuando acaba de cambiarel año pasado. Sin embargo, otrasnaciones, como Estados Unidos, parael 2010 estarán dos nomenclaturaspor delante, “en el país no se cuentacon el combustible que requieren esasnuevas tecnologías, por ello creo queen 2011 no habrá la aplicación a lanorma ambiental planeada, ahí esdonde debe trabajar el gobierno”.Agrega que también se debemejorar la infraestructura y sobre todola capacitación de los operadores, porqueen el país se venden vehículos contecnología de punta, pero los maloscaminos y la falta de destreza paramanejarlos, inhiben la inversión en flotillaspor parte de las empresas.<strong>T21</strong> <strong>Diciembre</strong> 2009 I 21