142< LUCAS M. GÓMEZ TONSICHGESTIÓN DE LA CRISIS: EL PLAN JEFES Y JEFAS DE HOGAR DESOCUPADOS>143Recibido: 16/02/2013Aceptado: 13/05/2013RESUMENl presente trabajo analizará la génesis e implementación <strong>de</strong> las políticas públicasen contextos <strong>de</strong> crisis a partir <strong>de</strong>l Programa Jefes y Jefas <strong>de</strong> Hogar Desocupadoscreado en 2002.En una primera instancia se <strong>de</strong>scribirá el contexto socio–económico <strong>de</strong> crisis que<strong>de</strong>sembocó en la salida <strong>de</strong>l régimen <strong>de</strong> convertibilidad y que posibilitó la adopción <strong>de</strong>l mencionadoPrograma a la vez que actuó como un condicionante para su ejecución.Posteriormente se discutirá el rol jugado por el Estado en la gestión <strong>de</strong> la crisis y se apelaráa la noción <strong>de</strong> ciclo <strong>de</strong> políticas públicas para enten<strong>de</strong>r la génesis <strong>de</strong>l Programa haciendoespecial hincapié en la construcción <strong>de</strong>l árbol <strong>de</strong> problemas.Finalmente se abordarán los problemas que el diseño <strong>de</strong>l Programa y su ejecución <strong>de</strong>bieronafrontar.Palabras Claves: Planes Sociales – Crisis 2001 – Políticas Públicas.ABSTRACTThis paper will analyze the genesis and implementation of public policies in crisis contextsfrom the Program Heads of Household Unemployed created in 2002.In the first instance will be <strong>de</strong>scribed the socio-economic crisis that led to the end of theconvertibility regime and facilitated the adoption of that Program while acting as a constraintfor its execution.Later we will discuss the role played by the State in managing the crisis and will appealto the notion of public policy cycle to un<strong>de</strong>rstand the genesis of the Program with specialemphasis on the construction of the problem tree.Finally address the problems that the <strong>de</strong>sign and implementation of the Program had to face.Keywords: Social Plans – 2001 Crisis – Public Policy.una crisis genera las condiciones por las cuales lo politicamente imposible se convierta enpoliticamente inevitable (Friedman, 1966).Este <strong>de</strong>bate pue<strong>de</strong> inscribirse en la discusión más general acerca <strong>de</strong> las fuentes explicativas<strong>de</strong> las políticas públicas. Mientras que para el enfoque convencional <strong>de</strong> las <strong>ciencias</strong>sociales 1 el Estado es concebido como esencialmente neutro a la hora <strong>de</strong> <strong>de</strong>finir su accionar, yasea por tratarse <strong>de</strong> un “comité <strong>de</strong> negocios <strong>de</strong> la burguesía” –en su vertiente marxista (Engels& Marx, 2004)–, o <strong>de</strong> una arena <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cual los actores sociales dirimen sus conflictos <strong>de</strong>intereses y cuya resultante son esas políticas públicas –en su vertiente norteamericana (Lowi,2003)–. En cualquiera <strong>de</strong> los casos la mirada sobre el Estado en sí se torna irrelevante a la hora<strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r e interpretar la génesis <strong>de</strong> las políticas públicas.Enfrentados a esta postura se sitúan aquellos que reconocen la autonomía estatal, en elsentido <strong>de</strong> que los funcionarios son capaces <strong>de</strong> formular sus propios objetivos y <strong>de</strong> implementarlas políticas que <strong>de</strong> ellos <strong>de</strong>rivan, aun contra la oposición <strong>de</strong> intereses sociales contrapuestosa las mismas (Przeworski, 1990) 2 . Dicha autonomía supone pensar al Estado en tres nivelesdistintos pero complementarios: 1) Como actor social significa que las reparticiones que locomponen se comportan como agentes u organizaciones que tienen i<strong>de</strong>as e intereses específicos,y que interactúan con otras organizaciones <strong>de</strong>l sector privado o <strong>de</strong>l sector sin fines <strong>de</strong> lucro(Viguera, 1998); 2) Como or<strong>de</strong>n legal tiene –o <strong>de</strong>bería tener– alcance universal, en la medidaen que establece <strong>de</strong>rechos y obligaciones que están por encima <strong>de</strong> la voluntad <strong>de</strong> los ciudadanosy asegura –al menos normativamente– <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> ciudadanía para todos los habitantes(O’Donnell, 1993); 3) Como marco institucional representa dimensiones estructurales queinci<strong>de</strong>n en los comportamientos humanos; los orientan, establecen incentivos para la acción,o los <strong>de</strong>terminan directamente. Las instituciones serían la contracara <strong>de</strong>l libre albedrío <strong>de</strong> laspersonas; implican restricciones, sean éstas externas o <strong>de</strong> carácter más interno –internalización<strong>de</strong> prácticas y socialización– (Spiller & Tommasi, 2000).Esta presentación <strong>de</strong> la temática, aunque sucinta y esquemática, <strong>de</strong>be sin embargo sermatizada. La autonomía estatal convendría ser entendida no como una categoría absoluta ototalizadora, sino más bien como relativa y sujeta a modificaciones.En efecto numerosos trabajos señalan la existencia <strong>de</strong> distintos grados <strong>de</strong> autogobierno<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l aparato estatal don<strong>de</strong> coexisten agencias tecnocráticas “aisladas” <strong>de</strong> las presionesIntroducciónEl abordaje <strong>de</strong>l accionar estatal en contextos críticos tiene una larga tradición en el análisis<strong>de</strong> las políticas públicas; <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las interpretaciones marxistas más radicalizadas para lascuales la hiperinflación –o cualquier otro tipo <strong>de</strong> infortunio económico–, al <strong>de</strong>struir el valor<strong>de</strong>l dinero, acerca a las masas un paso más hacia la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong>l propio sistema capitalista(Bujarin & Preobrazhenski, 1977); hasta las concepciones neoliberales según las cuales sólo1Dependiendo <strong>de</strong> la corriente a la que pertenezca, este enfoque i<strong>de</strong>ntifica un tipo particular <strong>de</strong> actor social o societal <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>la génesis <strong>de</strong> las políticas públicas. Se trató <strong>de</strong>l enfoque predominante en ell momento constitutivo <strong>de</strong> las <strong>ciencias</strong> sociales enla segunda mitad <strong>de</strong>l Siglo XIX. En virtud <strong>de</strong>l proyecto antiautoritario y antiabsolutista <strong>de</strong> la mo<strong>de</strong>rnidad -especialmente <strong>de</strong> lasociología-, el énfasis <strong>de</strong> innovación y dinamismo no era asignado al Estado -<strong>de</strong> carácter autoritario-, sino a las fuerzas sociales -cualquiera fuera su tipo- y por lo tanto en ellas reposaban las esperanzas <strong>de</strong> cambio social (Viguera, 1998).2Skocpol señala que las razones por las cuales un Estado pue<strong>de</strong> ser autónomo son: 1) Posee márgenes <strong>de</strong> autonomía en relación aotros Estados en el marco <strong>de</strong> un sistema mundial <strong>de</strong> relaciones; 2) El mantenimiento <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n interno le otorga al Estado capacidady legitimidad para intervenir (y por en<strong>de</strong>, autonomía), ya que ningún otro actor (empresas, iglesias, partidos políticos, etc.) tiene entresus objetivos mantener el or<strong>de</strong>n y la paz internas; 3) Está conformado por ‘colectivos <strong>de</strong> funcionarios’, es <strong>de</strong>cir, por conjuntos <strong>de</strong>agentes con una visión acerca <strong>de</strong> cuáles son los problemas en una sociedad, y cuáles son las formas <strong>de</strong> abordarlos (Skocpol, 1985).<strong>Revista</strong> <strong>de</strong> la Facultad <strong>de</strong> Ciencias Económicas - UNNE, Número 9, Septiembre <strong>2012</strong>, ISSN 1668-6365<strong>Revista</strong> <strong>de</strong> la Facultad <strong>de</strong> Ciencias Económicas - UNNE, Número 9, Septiembre <strong>2012</strong>, ISSN 1668-6365
144< LUCAS M. GÓMEZ TONSICHGESTIÓN DE LA CRISIS: EL PLAN JEFES Y JEFAS DE HOGAR DESOCUPADOS>145políticas <strong>de</strong> turno junto con una burocracia altamente sensible a dichos cambios (Sikkink,1993). A su vez existen momentos en los que el Estado se <strong>de</strong>senvuelve con mayor autonomíay momentos en los que los actores sociales o económicos inci<strong>de</strong>n fuertemente en el tipo <strong>de</strong>política pública que se implementa. De manera tal que el propósito <strong>de</strong> las secciones que siguenserá analizar en <strong>de</strong>talle la trama <strong>de</strong> intereses y circunstancias que dieron origen al Programa<strong>de</strong> Jefes y Jefas <strong>de</strong> Hogar Desocupados para lo cual se iniciará con una <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong> la situaciónsocioeconómica <strong>de</strong> la Argentina hacia fines <strong>de</strong>l año 2001.LA SITUACIÓN ARGENTINA HACIAEL FINAL DE LA CONVERTIBILIDADEl régimen <strong>de</strong> convertibilidad <strong>de</strong> la moneda local con el dólar estadouni<strong>de</strong>nse se instauróen la Argentina a partir <strong>de</strong> 1991 como un intento <strong>de</strong> abandonar las fallidas estrategias <strong>de</strong> ajusterecesivo que habían caracterizado a la década <strong>de</strong> 1980. En su lugar se optó por una política <strong>de</strong>ajuste expansivo que privilegiaba la obtención <strong>de</strong> un superávit fiscal por sobre el resultado <strong>de</strong>lintercambio comercial acentuando la <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> los tributos indirectos (Rofman, 2000).Cuadro 1: Indicadores Económicos Seleccionados1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002PIB (%)*9,13 7,94 8,21 5,84 2,85 5,53 8,11 3,85 -3,39 -0,79 -4,41 -10,9Actividad (PP)** 0,45 0,50 1,30 -0,30 1,00 -0,50 0,70 0,10 0,50 -0,20 -0,10 -0,15Empleo (PP)** 0,90 0,30 0,00 -1,00 -1,60 -0,40 1,60 1,00 -0,20 -0,50 -1,00 -1,15Desocupación (PP)** -0,95 0,50 2,60 1,90 6,00 -0,30 -2,30 -2,10 1,40 0,90 2,30 2,25Fuente: Encuesta Permanente <strong>de</strong> Hogares. INDEC.* Variación porcentual <strong>de</strong>l Producto Bruto Interno a precios <strong>de</strong> 1993. ** Variación en puntos porcentualesrespecto al promedio anterior.Al éxito <strong>de</strong> los primeros años, con fuertes tasas <strong>de</strong> crecimiento que vinieron a revertir lacaída previa asociada a la crisis hiperinflacionaria, le sucedieron años marcados por shocksexternos sucesivos –México, Malasia, Rusia, Brasil, etc.– que complicaron el panorama económico<strong>de</strong>l país. Es así que a comienzos <strong>de</strong>l nuevo siglo la Argentina pa<strong>de</strong>ció una <strong>de</strong> las peorescrisis social y política <strong>de</strong> su historia contemporánea. Entre 1998 y 2002 el PBI argentino acumulóuna contracción <strong>de</strong>l 19,49%.Consecuentemente la tasa <strong>de</strong> <strong>de</strong>socupación se ubicó en 21,5% en áreas urbanas en Mayo<strong>de</strong> 2002, con índices muy elevados <strong>de</strong> empleo no registrado. La espiral <strong>de</strong>flacionaria en laeconomía provocó un <strong>de</strong>splome <strong>de</strong> casi 7 puntos porcentuales en el empleo urbano <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1998<strong>de</strong>scendiendo al 33% en Mayo <strong>de</strong> 2002; al tiempo que la <strong>de</strong>socupación creció casi 7 puntos enel mismo período alcanzando el 22% en Octubre <strong>de</strong> 2002.Esta situación afectó en distinta medida a los distintos colectivos <strong>de</strong> trabajadores.A modo <strong>de</strong> ejemplo, en los jefes <strong>de</strong> hogar el <strong>de</strong>sempleo se situó en el 12% mientras que aprincipios <strong>de</strong> la década <strong>de</strong> 1990 alcanzaba a alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> un 3% (Lin<strong>de</strong>nboim & Serino, 2000).Cuadro 2: Personas y Hogares bajo la Línea <strong>de</strong> Pobreza. Aglomerado GBA. Mayo y Octubre (%).PersonasHogares1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O292222 1916 1518 1814 1417 1613 1219 2214 1625 2718 2028 2620 1926 2419 1826 2718 1927 3019 2129 3321 2435 5026 385442Fuente: Encuesta Permanente <strong>de</strong> Hogares. INDEC.En términos sociales dicha <strong>de</strong>bacle se tradujo en los peores indicadores <strong>de</strong> marginalidad <strong>de</strong>los que se tenga registro en época reciente. Sólo para citar los dos más importantes: la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>la pobreza en el Gran Buenos Aires, que tendió a la baja hasta la Crisis <strong>de</strong>l Tequila, superó la marcaprevia <strong>de</strong>l 29% hacia Mayo <strong>de</strong>l año 2000 y llegó al 54% <strong>de</strong> la población para Octubre <strong>de</strong> 2002.Cuadro 3: Personas y Hogares bajo la Línea <strong>de</strong> Indigencia. Aglomerado GBA. Mayo y Octubre (%).PersonasHogares1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O M O5 3 3 3 4 4 3 4 6 6 7 8 6 6 5 7 8 7 8 8 10 12 23 254 2 2 3 3 3 3 3 4 4 5 6 4 5 4 5 5 5 5 6 7 8 16 17Fuente: Encuesta Permanente <strong>de</strong> Hogares. INDEC.Por su parte la indigencia, esto es la incapacidad para cubrir a<strong>de</strong>cuadamente las necesida<strong>de</strong>snutricionales a su costo mínimo, superó su marca previa <strong>de</strong> 5% <strong>de</strong> la población <strong>de</strong>l GranBuenos Aires ya hacia 1995 manteniéndose sistemáticamente por encima, llegando a duplicardicha cifra en Mayo <strong>de</strong> 2001 y quintuplicarla en Octubre <strong>de</strong> 2002.El cuadro <strong>de</strong> situación <strong>de</strong>scripto hasta aquí, aunque acuciante por sí mismo, <strong>de</strong>be sermatizado con en análisis <strong>de</strong> otros indicadores <strong>de</strong> carácter más estructural. Si nos <strong>de</strong>tenemosa estudiar los aspectos más fundamentales <strong>de</strong> la pobreza, esto es aquellas carencias críticasque condicionan la realidad <strong>de</strong> los pobres <strong>de</strong> manera más apremiante, entonces el escenariobosquejado resulta menos dramático sin por ello <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> ser terrible.Cuadro 4: Necesida<strong>de</strong>s Básicas InsatisfechasPoblación con NBI (%)Hogares con NBI (%)1980 1991 200127,7 19,9 17,722,3 16,5 14,3Fuente: Encuesta Permanente <strong>de</strong> Hogares. INDEC.<strong>Revista</strong> <strong>de</strong> la Facultad <strong>de</strong> Ciencias Económicas - UNNE, Número 9, Septiembre <strong>2012</strong>, ISSN 1668-6365<strong>Revista</strong> <strong>de</strong> la Facultad <strong>de</strong> Ciencias Económicas - UNNE, Número 9, Septiembre <strong>2012</strong>, ISSN 1668-6365