relato

destrucción del aparato. En esos segundos, recuerdo que en la reunión
de antecedentes habían comentado que ese alumno sufría de brotes
psicóticos, con alto grado de violencia. Esos brotes siempre se han
manifestado contra los objetos o sobre sí mismo, pero no contra terceros.
Recordé que una de las recomendaciones de la adscrita fue no intervenir
directamente, llamar a alguien más que no haya presenciado el acto.
Rápidamente me desplazo hacia la adscripción y la adscrita sin muchas
palabras entendió qué estaba pasando. Me acompaña al salón y le pide
amablemente al alumno que lo acompañe.
Ahora me pregunto: ¿Qué hubiera pasado si intentaba intervenir
para que se calmara? En caso de haberlo hecho, creo que hubiera sido
contraproducente ya que el alumno era la segunda vez que me veía, no
podía sentir ningún tipo de confianza en que podía ayudarlo en su
situación y tal vez hubiera cargado su bronca sobre mí.
Luego del suceso, el alumno llegó a la clase y me pidió perdón. Me
explicó que estaba indignado que a la mayoría le hayan dado una
Tablet nueva y él siguiera con una computadora que no funcionaba
bien. Le dije que lo entendía pero que de igual manera la forma de
manifestar su enojo no iba a cambiar en nada. Hoy este alumno es uno
de los que se porta mejor en clase y es muy esforzado por superarse.