Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Excepto unos pocos, prácticamente la mayoría de<br />
participantes llegaron en el tiempo límite establecido<br />
(unas 18 horas, un margen muy asequible si<br />
no te despistas). Y entre todos los finishers se sortearon<br />
1000€ de premio en productos de 2TMoto.<br />
¡Lástima que yo no podía participar!<br />
Si tú que estás leyendo este artículo has llegado<br />
hasta aquí, es que ya te has infectado del virus del<br />
roadbook.<br />
que recogía su trayecto y lo plasmaba en un mapa<br />
que se podía consultar online, para tranquilidad de<br />
familiares y organizadores).<br />
De allí nos daríamos una vuelta por los pueblos<br />
negros de Guadalajara (en Tamajón estaba el segundo<br />
control de paso), luego Atienza, Sigüenza<br />
y Molina de Aragón (tercer control de paso), para<br />
recorrer preciosas carreteras del Alto Tajo y volver<br />
a Guadalajara hasta Brihuega (cuarto control),<br />
volver a los pueblos negros (en Tamajón seguía<br />
el avituallamiento para los primeros riders), recorrer<br />
la Muralla China de Guadalajara y seguir hasta<br />
Segovia donde en su famoso acueducto teníamos<br />
el último control de paso.<br />
Desde allí, vuelta a Yuncos por una suerte de rotondas<br />
(prácticamente no se tomaron más de 15<br />
kilómetros de autovía en toda la ruta) que sobre el<br />
papel me parecieron divertidas (una gran cantidad<br />
de instrucciones cuando ya llevabas más de 900<br />
kilómetros a tus espaldas) pero que luego, sufrida<br />
en carnes propias fue todo un suplicio.<br />
Y llegó el gran día, 30 de abril. Las inscripciones<br />
se habían cerrado hacía meses con un total de treinta<br />
inscritos (los organizadores para esta primera<br />
edición quisieron poca gente e inscripción solamente<br />
con invitación).<br />
El primer participante abría la ruta a las 6 de la<br />
mañana y se fue dando la salida cada 5 minutos,<br />
para no tener referencias visuales que pudieran<br />
favorecer la conducción. Yo salía el último, a<br />
eso de las 8 de la mañana, para poder ayudar, en<br />
caso de requerirlo, a algún participante perdido. El<br />
día era algo frío y desapacible, y nos fue cayendo<br />
agua, a veces en cantidades importantes, y arreciando<br />
el viento.<br />
Eso incrementó en muchos puntos la dureza de la<br />
ya de por sí complicada prueba. Asfalto más que<br />
precario en algunos tramos, pero belleza paisajística<br />
asegurada.<br />
Fue a mi entender todo un éxito. Se alabó el recorrido<br />
y la meticulosidad del roadbook (excepto por<br />
una rotondilla de nada en Galapagar...), cosa que<br />
me llenó de orgullo y satisfacción.<br />
Pero mi mayor recompensa fue ver cómo la gente<br />
disfrutó de la prueba (sí, los moteros tenemos ese<br />
masoquismo interno que nos hace disfrutar sufriendo)<br />
y del roadbook, para muchos desconocido<br />
hasta esa fecha.<br />
Si no lo has hecho aún, no tardes en apuntarte a<br />
alguna de las muchas pruebas que ya proliferan<br />
en España que lo usan. Seguro que lo disfrutarás.<br />
Yo me quedo de momento con haber organizado<br />
la prueba más larga con Roadbook que -de momento-<br />
se ha organizado en este país. Y eso, para<br />
mí, es una gran medalla que tengo que agradecer<br />
a 2TMoto.<br />
Fotografias : 2TMoto y Sergio Morchon.<br />
Textos : Sergio Morchon “Dr. Jaus”