2017-12-01 Muy Interesante Extra Historia
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
MUY ESPECIAL<br />
II GUERRA MUNDIAL: EPISODIOS OSCUROS<br />
se –apoyado por tanques– para vencerlos después de <strong>12</strong><br />
horas de combate. En cambio, los trabajadores forzosos<br />
soviéticos no participaban de aquel afán por volver a su<br />
patria. Temiendo lo que allí pudiera sucederles, estaban<br />
dispuestos a hacer lo indecible y a esperar lo que fuera<br />
para ser deportados a América o Australia.<br />
Ruina física,<br />
mental y moral. La<br />
ciudad de Dessau, joya<br />
de Alemania que fue<br />
sede de la Bauhaus,<br />
quedó destruida por<br />
completo por los<br />
bombardeos aliados el<br />
7 de marzo de 1945,<br />
dejando imágenes<br />
terribles como esta en<br />
la que una mujer llora<br />
recostada sobre los<br />
escombros de su casa.<br />
Unos más<br />
culpables que<br />
otros. Los tribunales<br />
de ocupación debieron<br />
establecer el grado<br />
de implicación en el<br />
nazismo de millones<br />
de personas. Abajo,<br />
Mathilde Ludendorff, la<br />
esposa del general Erich<br />
Ludendorff, durante su<br />
juicio (1949).<br />
pulsera de buena calidad y en funcionamiento por<br />
dos kilos de mantequilla, una camisa de hombre usada<br />
por dos litros de aguardiente y un cerdo por 200<br />
litros de vino. Los engaños estaban a la orden del día:<br />
se vendían latas de conservas llenas de serrín, jabones<br />
con centro de madera y diamantes hechos con<br />
trozos de cristal de Bohemia.<br />
La precariedad aguzó el ingenio. Un modelo de calzado<br />
que se hizo común consistía en una tablilla recortada<br />
con el perfil del pie y sujeta a la planta por medio de vendas,<br />
lo cual produjo numerosas amputaciones porque<br />
no servía para la nieve. Cuando el frío arreció, mucha<br />
gente se instaló bajo las ruinas o cavó un agujero en el<br />
suelo o en un terraplén y se trasladó allí con su estufita<br />
y cualquier cosa que se pudiera quemar. Los trabajadores<br />
forzosos extranjeros, que habían sido trasladados<br />
por los nazis a sus ahora arrasadas o desmanteladas<br />
fábricas, trataban de salir de Alemania por todos los<br />
medios; algunos terminaron organizándose en bandas<br />
de salteadores que mataban por un abrigo o por una bicicleta,<br />
porque lo único que abundaba eran las armas de<br />
fuego. Una de aquellas bandas llegó a ser tan poderosa<br />
que hasta se hizo de un territorio propio en la región<br />
de Fulda. Tuvo que intervenir el ejército estadouniden-<br />
La compleja desnazificación<br />
En aquellos años se puso a prueba la tosquedad del<br />
juicio humano, que hace tabla rasa de la inmensa variedad<br />
entre las personas y las condena por igual sin<br />
aceptar que, en todas partes y en todos los tiempos,<br />
ha habido personas decentes. El problema de la culpa<br />
colectiva se planteó con crudeza cuando se puso en<br />
marcha el programa aliado de desnazificación. Era preciso<br />
diferenciar a los nazis fanáticos de los conversos,<br />
y entre estos a los que se habían inscrito en el partido<br />
por circunstancias de lo más variadas, pero sin convicción,<br />
de los que habían sido coaccionados de una<br />
u otra manera y, en fin, reconocer a los que sin haber<br />
aceptado aquellas ideas se las habían arreglado para<br />
capear el temporal. Lo difícil era distinguirlos cuando<br />
los documentos habían ardido, que era casi siempre.<br />
Nadie se declaraba nazi ante un tribunal de ocupación,<br />
aunque hubo alguno que otro que lo proclamó con orgullo.<br />
Por otro lado, resultaba difícil encontrar a alguien<br />
completamente exento de compromiso con el régimen<br />
anterior: Patton afirmó que había dejado en su puesto a<br />
los nazis que estaban a cargo de los servicios esenciales<br />
porque no encontró a nadie capaz de reemplazarlos,<br />
y Eisenhower lo relevó del mando unos días después.<br />
Los resultados finales de la desnazificación en las tres<br />
zonas occidentales de ocupación arrojaron un balance<br />
total de 800 penas de muerte, de las que se ejecutó algo<br />
más de la mitad: lo que hubiera costado tomar una cota<br />
fortificada apenas un año antes.<br />
Cerebros enemigos en venta<br />
Las cifras del sector soviético no se conocen, pero sí se<br />
sabe que hasta 1947 solo se había liberado al <strong>12</strong>% de los<br />
prisioneros. En aquella zona, los juicios no empezaron<br />
hasta cuatro años después de la guerra, y la pena estándar<br />
después de un cuarto de hora de audiencia eran<br />
20 años de trabajos forzados. Los polacos y los yugoslavos<br />
también fueron muy duros con sus prisioneros de<br />
guerra, aunque las cifras oficiales que trascendieron<br />
son ridículamente bajas. Los yugoslavos admitieron<br />
6.000 prisioneros muertos, pero los cálculos posteriores<br />
suben la cifra hasta 80.000.<br />
La cosa era muy diferente cuando el prisionero tenía<br />
algo verdaderamente interesante que aportar a los<br />
vencedores. Los adelantos científicos alemanes que la<br />
guerra había impulsado en materia civil y, sobre todo,<br />
militar fueron absorbidos ávidamente por las potencias<br />
ocupantes. Matemáticos, físicos, químicos e ingenieros<br />
que habían trabajado activamente para los nazis<br />
recibieron interesantes propuestas para trabajar con<br />
los aliados. Los estadounidenses desarrollaron su ya<br />
FOTOS: GETTY IMAGES<br />
74 muyinteresante.com.mx