Mujeres reconstruyendo mujeres. La utopía en el barrio, capítulo 7

200 Mario Ortega
hicimos sus cuays, cuays; se nos abrieron las puertas y nos
dieron un albergue. Jackson se portó de maravilla.
Al irse consolidando el proceso, Campamentos unidos adquirió
su propio perfil compuesto por tres estrategias:
a) la primera , de autoayuda , necesaria para contar con
plustrabajo doméstico;
b) la segunda , de concertación , para no enfrentarse con las
autoridades; y
c) la tercera , de autocentramiento , como respuesta a lo
limitado de los financiamientos otorgados.
La estrategia de autoayuda seguida por Campamentos unidos,
partió de la solidaridad desplegada en las labores de rescate en
1985:
El sismo nos abrió los ojos, nos hizo entender muchas
cosas. Nos hizo salir de rutinas en que estábamos metidos;
había gente que no nos conocía y ahora nos ha abierto la
puerta ; aprendimos a dar solidaridad a los demás , cosa que
anteriormente habíamos olvidado , nos habíamos olvidado
de lo que era la ayuda mutua. Aprendimos que cuando uno
tiene ganas de trabajar y de salir adelante en busca de un
ideal, lo puede lograr, pero solamente a base de su esfuerzo.
La participación fue el motor fundamental de Campamentos
unidos:
La ayuda mutua no es una fórmula mágica, es sólo la
confianza en la fuerza de la gente ; toda organización que
desee avanzar, lo primero que debe hacer es fijarse metas
pequeñas que vayan demostrando a la gente que tiene
logros; que ella misma vaya asumiendo confianza en sí
misma.
Ese es el primer reto: romper con la desconfianza que el
sistema nos ha infundido para hacernos sentir que somos
incapaces de hacer las cosas; tener confianza en nosotros
mismos, en una organización que vemos crecer. Nosotros
somos testigos de que es posible hacerlo, se necesita un
grupo de gente decidida a trabajar y a tomar la dirección;
mientras no haya un grupo consciente y decidido a llevar
el trabajo, es muy difícil que se dé la autoconstrucción.