Vivelight 102 / Cynthia Wright

deporte
y vida
La magia
de las montañas
Voy a ser sincera: siempre he
sido más un alma de mar que
de montaña. Si de pequeña
me hacían escoger entre ir a
la playa o a la montaña, escogía
sin pensarlo el mar. Creo
que la primera vez que subí
a una montaña fue a los 19 al
“Guagua Pichincha” y recuerdo
haber sentido un gran orgullo
cuando llegamos a las antenas.
Me gustó mucho, sin embargo,
no enganché. En noviembre
del año 2012 decidí que quería
llegar a la cima del Cotopaxi.
Percibo que es un objetivo que
tenemos varios ecuatorianos,
más aún si eres deportista. Me
contacté con Mauricio Álvarez,
(quien fue mi entrenador y lamentablemente
falleció hace
algunos meses embestido por
un bus) y dijo que podía acompañarme.
Así empezó mi travesía
hacia las montañas…un
viaje de amor-odio, de miedo y
deseo. Subí dos veces este maravilloso
volcán y hoy quiero
compartir mis dos experiencias
para que sepas que es un
desafío muy grande que todos
podemos lograr.
El inicio
Recuerdo que estaba muy bien
entrenada físicamente, sin
embargo había dos pruebas a
superar. Para subir montañas
debes tener mucha fuerza en
las piernas y además aguantar
la altura. Los quiteños tenemos
una ventaja sobre eso: vivimos
a 2800 metros. Por supuesto no
es lo mismo 2800 que 5800 metros,
pero es una ayuda vivir a
buena altura.
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