11.05.2013 Views

Tamalameque Historia y leyenda

Tamalameque Historia y leyenda

Tamalameque Historia y leyenda

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Tamalameque</strong> <strong>Historia</strong> y <strong>leyenda</strong> Diógenes Armando Pino Ávila<br />

retiraban de los estudios por sinvergüenzas y los pobres por física hambre.<br />

Los colegios en boga de esa época, a los cuales iban a parar los afortunados<br />

<strong>Tamalameque</strong>ros que tenían por ventura la oportunidad de salir a estudiar, eran:<br />

El Colegio Pinillos de Mompox, El Liceo Celedón De Santa Marta, y<br />

últimamente El Colegio Nacional Loperena De Valledupar.<br />

De los pocos bachilleres que lograron graduarse, algunos siguieron carreras<br />

profesionales, entre ellos podemos mencionar al doctor Manuel Mejia, primer<br />

abogado natural de <strong>Tamalameque</strong>, mucho tiempo después el doctor Alonso<br />

Beleño Robles, médico. Luego, andando el tiempo, al comienzo de la década de<br />

los sesenta, comenzaron a titularse una serie de profesionales muy destacados<br />

marcando una era de progreso intelectual.<br />

De esta gama de profesionales, sin demeritar a ninguno, pues todos merecen mi<br />

respeto y consideración, hubo dos, quienes por sus dotes intelectuales y por su<br />

extracción popular ganaron un reconocido respeto y admiración de los<br />

ciudadanos. Son ellos Bienvenido Gómez Pava Y Luís Eduardo Vides Gómez,<br />

de quienes todavía encontramos personas de su generación que siguen<br />

admirando y considerando a éstos ilustres <strong>Tamalameque</strong>ros como ejemplo de<br />

superación y paradigma de inteligencia. La verdad, son dos profesionales con<br />

calidades y cualidades muy distinguidas.<br />

A partir de ellos, ha salido una larga lista de profesionales ya graduados y otros a<br />

punto de graduarse que enaltecen la sociedad <strong>Tamalameque</strong>ra, pero sería largo y<br />

dispendioso mencionarlos a todos; solo tomamos los cuatro anteriores por sus<br />

rasgos singulares, ya que marcaron hechos de connotaciones histórico -sociales<br />

en mi pueblo.<br />

Como se ha podido observar, al joven <strong>Tamalameque</strong>ro, por la falta de medios para<br />

estudiar el bachillerato en su propia tierra, veía trunco el camino del progreso<br />

intelectual ya que si bien es cierto, algunos podían estudiar por fuera, la gran<br />

mayoría se tenía que conformar con quedarse en el pueblo a engrosar la fila de<br />

desocupados locales. Creándose con ello la necesidad de abrir un espacio donde<br />

se aprendiera un oficio, y comenzaron los padres de familia a entregar sus hijos a<br />

Elí Garrido para que les enseñara la mecánica.<br />

Después Eufrasia Mejía De Duncan abrió su escuela de mecanografía y<br />

Herminio Noriega. Enrique Duran Y Miguel Restrepo, cada uno por su lado,<br />

comenzaron a enseñar el oficio de telegrafista, con sus escuelas donde los<br />

jóvenes iban a aprender el sistema Morse de comunicación.<br />

Todas estas escuelas de oficios, por falta de demanda de mano de obra, fueron<br />

abandonadas.<br />

Por esas fechas comenzaron a llegar noticias de los cursos que dictaba el SENA<br />

en Santa Marta y de lo cómodo del sistema, ya que eran internados donde con<br />

una cuota mínima pagada por un hacendado patrocinador, se podía asegurar la<br />

pensión, comida y estudio. Entonces el grueso de jóvenes de la localidad, se fue a<br />

Santa Marta a aprender el oficio de obreros calificados como Reparadores de<br />

Maquinarias Agrícolas, tractorismo y ganadería entre otros.<br />

79

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!