el camino del rosario - FUNDACIÓN OBRA CULTURAL Roger de
el camino del rosario - FUNDACIÓN OBRA CULTURAL Roger de
el camino del rosario - FUNDACIÓN OBRA CULTURAL Roger de
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
cada uno a nuestra manera, quizá no vivimos en este estado <strong>de</strong> oración en <strong>el</strong> que necesitamos<br />
entrar. Y por eso tampoco vivimos con habitual frecuencia la oración «<strong>de</strong> impulso <strong>de</strong> corazón» <strong>de</strong><br />
que habla Teresa. De hecho, como aspiramos a tener esa oración tan pura y perfecta acabamos<br />
no rezando casi nunca. Con un poco <strong>de</strong> mejor orientación y ayuda, con una mejor dirección<br />
espiritual personal y <strong>de</strong> comunidad, Teresita habría podido vivir su experiencia d<strong>el</strong> <strong>rosario</strong> <strong>de</strong> una<br />
forma mucho más f<strong>el</strong>iz y dilatadora.<br />
«Algo sobrenatural que me dilata <strong>el</strong> alma», dice Teresita. Justamente ésa fue la<br />
experiencia que tuvieron Domingo <strong>el</strong> cartujo, Margarita <strong>de</strong> Baviera y Adolfo <strong>de</strong> Essen. El<br />
problema es que muchos cristianos ven muy claro que necesitan rezar más y mejor. Desechan<br />
con frecuencia <strong>el</strong> <strong>rosario</strong> como rutinario y monótono (sobre todo porque nunca lo han aprendido a<br />
rezar bien) y luego... se quedan sin casi nada. Esa oración «espontánea» <strong>de</strong> Teresita exige<br />
muchísimas horas previas <strong>de</strong> vu<strong>el</strong>o para ser vivida <strong>de</strong> un modo habitual y no tan sólo alguna que<br />
otra vez, como quizá nos pueda pasar. A muchos cristianos que ven que no rezan habrías que<br />
<strong>de</strong>cirles: ¡ahí tienes <strong>el</strong> <strong>rosario</strong>! Consigue que te lo enseñen a rezar bien. Ensaya <strong>el</strong> recitarlo<br />
diariamente hasta que se convierta poco a poco en troqu<strong>el</strong> que vaya conformando tu alma.<br />
Al cabo d<strong>el</strong> tiempo, con paciencia y con generosidad, y sobre todo <strong>de</strong>jándote llevar por <strong>el</strong><br />
Espíritu Santo empezarás a rezar espontáneamente, <strong>de</strong> modo que tu corazón haya empezado a<br />
apegarse al hábito <strong>de</strong> la oración continua. Nunca <strong>de</strong>jes la oración «sin fórmulas», <strong>de</strong> «impulso <strong>de</strong><br />
corazón», <strong>de</strong> «simple mirada», <strong>de</strong> «grito <strong>de</strong> gratitud» <strong>de</strong> la que habla Teresa.<br />
20.- VALE LA PENA REZAR EL ROSARIO (o a lo menos,<br />
intentarlo)<br />
(Texto <strong>de</strong> Antonio Arias S. J.)<br />
Hay tesoros escondidos que <strong>el</strong> mundo actual, tan ad<strong>el</strong>antado en otras cosas, no ve ni<br />
quiere ver. Engañado, <strong>el</strong> hombre mo<strong>de</strong>rno estima sólo <strong>el</strong> progreso material, anda sin rumbo fijo,<br />
es incrédulo y no reza. Quiere ser f<strong>el</strong>iz, prescindiendo <strong>de</strong> Dios, a quien muchos niegan. La aguja<br />
imanada está inquieta, mientras no mira al Norte. Dios es <strong>el</strong> Norte d<strong>el</strong> alma. La oración no<br />
encuentra lugar en los corazones <strong>de</strong> muchos humanos. He ahí lo que procura remediar la<br />
Santísima Virgen, invitando a los hombres <strong>de</strong> nuestra edad a rezar.<br />
El Rosario es fácil, por su sencillez, a las personas que no tienen estudios; a los que<br />
están cansados, no les causa molestia; y a los sabios les da materia profunda <strong>de</strong> meditación en<br />
los misterios, y los ejercita en la humildad. Si no os hacéis como niños, dice Jesucristo, no entráis<br />
en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o. Con <strong>el</strong> Rosario, <strong>el</strong> Espíritu Santo <strong>de</strong>rrama espíritu <strong>de</strong> oración sobre la tierra; <strong>de</strong><br />
oración mental y vocal, fácil y eficaz; porque recuerda los misterios <strong>de</strong> la re<strong>de</strong>nción, y las<br />
oraciones <strong>de</strong> que consta, no pue<strong>de</strong>n tener mejor origen.<br />
33