VOCES DE SAN LUIS.pdf - Gobierno de San Luis

Dignos domÌnicos: esta mesa de blanco mantel que corazones
agradecidos y generosos y manos amigas han tendido en vuestro honor, es
modesta en ornatos y manjares, pero rica en entusiasmo y nobles intenciones.
Y no puede ser de otro modo porque, como maestros del perdÛn, de la
obediencia y del optimismo, habÈis dado al pueblo de San Luis, con hermosa
abnegaciÛn y valentÌa, el fruto de preclara inteligencia, que no es fuego fatuo el
sacrificio del bienestar, el ejemplo de vuestra noble filosofÌa del vivir, volcando
fe y amor en los corazones para enseÒarnos a perdonar; por todo esto y mucho
m·s que mi palabra no acierta a decir, all· van, dignos heraldos de MarÌa,
nuestras manos en amistosa despedida y los emocionados corazones que,
cual copa rebosante vuelcan su sincera y pura gratitud; all· van tambiÈn
afectos, saludos, enhorabuenaÖy un montÛn de rosas en cuyos pÈtalos est·
escrito: °gratitud! Para los peregrinos de la obediencia y del deber.
LUISA AMANDA QUIROGA DE LUCERO
San Luis, noviembre de 1930.
Por rara dotaciÛn natural, aun·ronse en su intelecto la aptitud
matem·tica y el vuelo lÌrico de la fantasÌa creadora, en la ensoÒaciÛn
sentimental y poÈtica, y de este singular consorcio floreciÛ su extraÒa
individualidad.
Exactitud, mensura, equidad, justeza; bondad, ternura, generosidad,
renunciamiento y fe amalgamaron la contextura de su temperamento
equilibrado.
Ama la belleza con exaltaciÛn en mil diversas formas, admira al sabio y
al estudioso, al escritor y al poeta, a la mujer fuerte, al hombre idealista y
magn·nimo; al hÈroe que realiza hazaÒas estupendasÖa la anÛnima
hermanita de la caridad que en acciÛn de autÈntico cristianismo ofenda su vida
y felicidad.
Una flor que se abre ufana en el pÈnsil le inspira un madrigal; el p·jaro
que en raudo vuelo recorta el espacio, sugiÈrele bellos pensamientos; las
nubes que all· en el horizonte tÌÒense de rosa y violeta, ponen en sus palabras
melancÛlicas met·foras.
Pasa un niÒo frente a su ventana, tembloroso, hollando la nieve con los
pies semidesnudo y el drama de la vida reflejado en el semblante,
conmuÈvanse sus reconditeces maternales y humanas y estampa el cuadro
doloroso en p·gina que es alegato, un llamado a la protecciÛn de la infancia
desvalida, que ella misma concretara en la Sociedad Pro Menores y Protectora
de la Infancia.
Tales los motivos de sus letras, humano, sinceros, espont·neos, sin
que les sean extraÒas la biografÌa y la historia, los problemas educacionales,
sociales y morales.