Lexus desafía a BMW

Suecia
5 con...
minutos
…Andreas Mikkelsen
neumáticos además de Michelin y
DMack, en Suecia volvió a surgir Pirelli,
que desde 2010 no estaba presente
en el certamen. El único WRC
equipado con la marca italiana fue
el de Henning Solberg, y por sus cronos,
ciertamente debieron rendir
muy bien.
También dentro de lo que serán las
diferentes citas mundialistas, nos
llegaron rumores de que tanto José
Antonio Suárez como Yeray Lemes
podrían participar en la Challenge
DMack, que se correrá con la estructura
que M-Sport mantenía con
los Fiesta R2 en lo que fue la Academy
y la Júnior WRC. Ello nos parecería
una elección muy acertada,
ya que el coste de la nueva Júnior
que tiene previsto correrse con
el DS3 R3T de Citroën es un tanto
desorbitado.
De Mikko Hirvonen se esperaba mucho en esta cita,
pero a duras penas consiguió el cuarto puesto.
A este respecto, la Challenge de M-
Sport con el Fiesta R2 sitúa el coste
en 120.000 euros, todo incluido,
mientras que para arrancar en la
nueva Júnior hay que partir del coste
de adquisición del DS3, que está en
100.000 euros, al que hay que añadir
el equipo personal de asistencia,
etcétera, que no es monogestión.
Ello supondría un mínimo de unos
15.000 euros a añadir por rallye. Lo
mejor son los premios para el vencedor:
seis rallyes del Mundial con
el DS3 R5 en el caso de la Júnior con
Citroën, y siete en la Challenge M-
Sport-DMack con el Fiesta R5.
Benito Guerra y Borja Rozada participarán
en el Rallye Guanajuato
México (6 al 9 de marzo) con un Ford
Fiesta RS WRC de M-Sport, vehículo
que ya probó en Cumbria (Gran Bretaña)
el mes pasado.
A sus 24 años y tras toda una temporada
2013 con el Polo R WRC en
la que no se le vio un resultado llamativo,
Andreas lograba, con su
segundo puesto en Suecia, hacerse
notar en el presente Mundial,
algo que relanza su carrera.
¿Esperabas este resultado?
Sabía que estar delante no iba ser
fácil, y menos todavía rodar de tú a
tú con mis compañeros de equipo,
pero quería intentarlo a toda costa.
Estoy muy cerca de mi país y,
sinceramente, eso quizá me motivaba
más que en otros rallyes.
¿Es este tu terreno preferido?
Sin lugar a dudas, aunque el de
Finlandia también
es de los
que prefiero. Me
gusta porque
son tramos rápidos,
en los que
hay que conducir
con mucha
decisión, pero
también con
mucho tacto. En
Suecia conseguí
un quinto puesto
en 2008, y sabía
que en esta edición
lo podía hacer bien.
Estar tan cerca de Ogier y
Latvala, ¿no era previsible?
Los dos tienen más experiencia
que yo y el campeonato gira en
torno a ellos. Pero me di cuenta,
sobre todo después del sexto tramo,
en el que recuperé el liderato,
que podía medirme con ellos, y
ello me dio mucha confianza. A veces
tenía la sensación de que incluso
ni yo me lo creía.
“Cuando terminó
la segunda
etapa estaba a
3,6 segundos de
Latvala, y con esa
diferencia podía
pasar cualquier
cosa, como pasó”
¿La salida de Ogier fue un
respiro?
En ese trío éramos uno menos. Lo
sentí por él, pero son errores que
cuestan una victoria y a Ogier no
es la primera vez que le pasa. De
todas formas, su ausencia no impidió
que Jari y yo siguiéramos peleando
por el triunfo. Cuando terminó
el segundo día estaba a 3,6
segundos de él, y con esa diferencia
podía pasar cualquier cosa,
como pasó.
¿Esperabas una orden de
Capito?
De haber seguido con esas mínimas
diferencias, probablemente
hubiera llegado, pero yo creo que
nos dejó hacer.
Quizá el que hubiera
llegado a
la última asistencia
líder hubiera
tenido preferencia,
pero
para entonces
yo ya había cometido
un error,
distanciándome
de Latvala, con
lo cual ya todo
estaba claro.
Tu compatriota Ostberg atacó
mucho al final…
La verdad es que sí, apretó mucho,
y como iba restando unos segundos
en cada tramo, lo intentó
hasta el final, y eso le llevó a ganar
también el Power Stage. Tuve que
ir muy fino y no perder el control.
En estas circunstancias, una frenada
que se alarga más de lo previsto
puede ser definitiva para perder
un puesto, o más, pero bueno,
todo pasó bien.
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