ENCUENTRO CON ERICO VERIS S IMOJoao Alves das NevesErico Veríssimo murió el día 28 <strong>de</strong> noviembre último en Porto Alegre (Brasil),ciudad don<strong>de</strong> vivió <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el inicio <strong>de</strong> su carrera literaria y que, por consiguiente,está muy presente en muchos <strong>de</strong> sus libros. También están presentes enla vasta bibliografía <strong>de</strong>l escritor sureño, las personas y los paisajes <strong>de</strong>l "RíoGran<strong>de</strong> do Sul", colindante <strong>de</strong>l Uruguay y <strong>de</strong> la Argentina. Y, sin embargo, no sepue<strong>de</strong> afirmar que Veríssimo haya sido un escritor regional; al contrario, fueal partir <strong>de</strong> las fronteras <strong>de</strong>l estado natal, que puso en evi<strong>de</strong>ncia la realidadsureña, injertándola en el contexto brasileño e impregnándole las relacionesuniversalistas que terminaron por imponer su obra, <strong>de</strong>ntro y fuera <strong>de</strong>l Brasil.Habiendo nacido en la pequeña ciudad <strong>de</strong> Cruz Alta (Río Gran<strong>de</strong> do Sul)el 17 <strong>de</strong> diciembre <strong>de</strong> 1905, Erico Veríssimo se trasladó, todavía muy joven, paraPorto Alegre, don<strong>de</strong> empezó a ganarse la vida como dibujante, antes <strong>de</strong> llegar aser periodista poco <strong>de</strong>spués, escritor, que fue su verda<strong>de</strong>ra vocación. Ya se lehabían publicado obras <strong>de</strong> relativo éxito (<strong>de</strong> público y <strong>de</strong> crítica) cuando, en 1941,fue solicitado para enseñar literatura brasileña en la Universidad <strong>de</strong> Berkeley (California);<strong>de</strong>spués, pronunció in<strong>num</strong>erables conferencias en los Estados Unidos,don<strong>de</strong> su hija contrajo matrimonio (tenía a<strong>de</strong>más un hijo). Más tar<strong>de</strong>, entre 1953y 1956, se dirigió al Departamento <strong>de</strong> Asuntos Culturales <strong>de</strong> la Unión Pan<strong>americana</strong>,y <strong>de</strong> esta larga estancia en los Estados Unidos y <strong>de</strong> los <strong>num</strong>erosos viajesque hizo por toda la América Latina, al servicio <strong>de</strong> ta UPA, resultó su llamadociclo latinoamericano, sobresaliendo en los libros México (1957) y El señor embajador,el primero con impresiones <strong>de</strong> viaje, en tanto el segundo, es una novelaen la cual se vislumbran algunas <strong>de</strong> las figuras <strong>de</strong> los acontecimientos <strong>de</strong> Cuba.Su último gran éxito literario fue una novela Inci<strong>de</strong>nte en Antares pero elúltimo libro que publicó fue Solo <strong>de</strong> Clarinete, primer volumen <strong>de</strong> "memorias"<strong>de</strong>l escritor; el segundo, que se publicará próximamente, . no está completo, porqueVeríssimo fue sorprendido por la muerte cuando rememoraba su vida y a laspersonas y tierras que conoció a lo largo <strong>de</strong> casi setenta años <strong>de</strong> existencia.En diversas oportunida<strong>de</strong>s y circunstancias, Erico Veríssimo asumió posicionesinconformistas, lo que llevó a ciertos calumniadores a acusarlo <strong>de</strong> comunista.Pero, en la realidad, tal cual se <strong>de</strong>duce <strong>de</strong> las propias <strong>de</strong>claraciones que noshizo, Erico Veríssimo fue, <strong>de</strong> hecho, un inconformista, <strong>de</strong> aquella rara índole queestá <strong>de</strong>sapareciendo: era un liberal, Contrario, por lo tanto, a todas las formastotalitarias, fuesen <strong>de</strong> izquierda o <strong>de</strong> <strong>de</strong>recha.
Nueve años <strong>de</strong>spués, vuelvo a encontrar aErico Veríssimo, ahora en Porto Alegre, en supropia casa. Antes -9 años- lo había ent<strong>revista</strong>doen Sao Paulo, cuando fue a autografiarO senhor Embaixador. Y en la actual vez <strong>de</strong>seabaun. encuentro diferente, menos periodísticoy más íntimo. Y así fue. Entré y reconocíinmediatamente a Mafalda, que es, sin quitar niponer nada, la señora que "vi" en O Escritordiante do Espelho y en Solo <strong>de</strong> Clarineta: conlos cabellos ya encanecidos, un rostro suave yuna mirada seria y confiada. Me invitó a sentarme:-Erico viene en seguida -(creo que medijo)-.No tardó en aparecer el esperado, y volvimosa presentarnos, por mi parte con el embarazonatural <strong>de</strong> quien va a tener que iniciar unalarga conversación. Y sólo yo conocía bien aErico Veríssimo; él <strong>de</strong>bía tener <strong>de</strong> mí, apenas,un ligero recuerdo <strong>de</strong>l periodista que lo entrevistóen 1965. Pero no hay duda <strong>de</strong> que yo sílo conozco. ¿Des<strong>de</strong> cuándo? Des<strong>de</strong> hace seguramentetreinta años, a partir <strong>de</strong> Música ao Longe,<strong>de</strong> los Caminhos Cruzados y <strong>de</strong> los librosque aparecieron <strong>de</strong>spués, hasta O Senhor Embaixador,cuando tuvo lugar nuestro primerdiálogo.Escucho; pero no acompaño. Por supuesto,me i<strong>de</strong>ntificó por el "acento" y comenzó a hablardé Portugal. De Lisboa, <strong>de</strong> Coimbra, <strong>de</strong>Oporto, <strong>de</strong> todas las partes que recorrió. De laamistad que lo ligó a Ferreira <strong>de</strong> Castro. Citóa Fernando Namora y volvimos a encontrarnosmejor. Del pueblo lusitano. Va recordando ypreguntando. En el segundo volumen <strong>de</strong>l Solo<strong>de</strong> Clarineta, que está escribiendo, expresa susimpresiones sobre Portugal. ¿Cómo van las cosaspor allá?Llevaba un cuestionario (hombre prevenidovale por dos). Erico lo leyó e hizo comentariossobre las preguntas, en tanto que yo confundíae i<strong>de</strong>ntificaba al escritor con sus personajes y,sobre todo, con el Río Gran<strong>de</strong> do Sul. Inmediatamente,<strong>de</strong>scubro que es eso mismo: Erico esel símbolo <strong>de</strong> esta tierra sureña y tan bradileña,tan esforzada, orgullosa, acogedora y bonita.El escritor sigue leyendo y comentando,mientras que yo paso <strong>de</strong> los héroes <strong>de</strong> la ficcióna los dos libros autografiados: ahora loscomprendo mejor y los consi<strong>de</strong>ro todavía másverda<strong>de</strong>ros, porque completan y esclarecen nuevosángulos <strong>de</strong> la obra literaria <strong>de</strong>l autor. Comprendoexactamente las novelas y los libros <strong>de</strong>viajes, veo con mayor niti<strong>de</strong>z las figuras <strong>de</strong>O Tempo e o Vento, tan reales y auténticasen el pasado y el presente como es verda<strong>de</strong>rosu creador. Lo relaciono más que nunca con larealidad brasileña <strong>de</strong> Río Gran<strong>de</strong> do Sul, lagente, las pampas y los animales.Con esta tierra gaucha que conocía tan bien,incluso antes <strong>de</strong> llegar a ella, y que hace muchosaños comenzó a revelármela el autor <strong>de</strong>Inci<strong>de</strong>nte em Antares ... ¿Divagó? Es posible.Entonces, pregunto:-Hay quienes preten<strong>de</strong>n que su obra se divi<strong>de</strong>en tres ciclos principales. Según esos críticosla primera fase se inició en 1932 con losFantoches y concluyó en 1940, con Saga ; en esteciclo, el escritor parece que resaltó, al mismotiempo, la crónica <strong>de</strong> las costumbres gauchasy ciertos sentimientos íntimos. El segundo ciclosería la trilogía O tempo e o Vento (<strong>de</strong> 1949 a1962), don<strong>de</strong> <strong>de</strong>stacan inequívocamente ciertasconnotaciones históricas y sociales <strong>de</strong> Río Gran<strong>de</strong>do Sul y el Brasil. En el tercer ciclo, pareceque se <strong>de</strong>stacan sus preocupaciones sociopolíticas,implícitas en O Senhor Embaixador (1965).O Prisioneiro (1967) e Inci<strong>de</strong>nte em Antares(1971). ¿Qué piensa el autor sobre esa preten.dida evolución, <strong>de</strong>limitada o continuada durantetres ciclos sucesivos? Y, si los admite, ¿cuáles el lugar que pue<strong>de</strong>n tener efectivamente enel conjunto <strong>de</strong> su obra? Sobre el último ciclo,¿se cerró durante cierto tiempo o proseguirá todavía?-De manera general, estoy <strong>de</strong> acuerdo conla división <strong>de</strong> mi obra <strong>de</strong> ficción en esos tresciclos -admite Erico Veríssimo-. Mientrastanto, <strong>de</strong>bo aclarar que no hubo por mi parteningún plan preconcebido, por lo menos cons-NORTE/71
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