TRAUMAS EMOCIONALES
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Espíritu Santo, viv~réis en paz y armonía don tOd~od;<br />
Lo que dice es: «SI es posIble, en cuanto epen (R<br />
vosotros estad en paz con todos los hombres» o.<br />
12.18) Él problema puede hallarse en la otra persona·.<br />
Pablo no añadió (al revés del super-yo): «Sí, ~ est~<br />
problema es también un problema causado'por tI y tI<br />
eres quien tiene que resolver~o en conformIdad con e<br />
otro.» Hay un versito que dIce:<br />
Vivir arriba con los santos en el cielo,<br />
Esto será la gloria;<br />
Pero el vivir aquí con los santos en la tierra,<br />
Esto ya es otra historia.<br />
El yo verdadero se enfrenta con difere~cias,reales,<br />
conflictos reales y ama y tiene bastante, ~nteres para<br />
confrontar a las otras personas en un espIntu de amor.<br />
Pero el yo verdadero sabe también que a veces la mejor<br />
solución y la única solución -para usar la gran<br />
frase de Stanley Jones- es «ponerse de acuerdo en<br />
seguir en desacuerdo de modo que no sea desagradable».<br />
El super-yo Y la felicidad<br />
El super-yo cree en el mito: «Sie~pre ~engo que<br />
ser superfeliz.» Pero ¿eres siempre felIz? ¿SIempre estás<br />
contento? ¿Nunca estás deprimido? ¿Rebosando con<br />
la expresión: «¡Alabado sea el Señor!»? ¿No hay nunca<br />
horas de lucha? ¿Nunca ves los cielos e~capota?os<br />
cuando haces las cosas por mero deber, sm sentIrse<br />
alegre y jubiloso? - d· .<br />
En el Huerto de Getsemaní, nuestro Senor IJO a<br />
sus discípulos: "Mi alma está turbada hasta la muerte.»<br />
Estaba en plena agonía, echado en el ~uelo; sudaba<br />
copiosamente Y había una lucha ~ernble e~tre<br />
sus emociones y su voluntad. Sus emOCIOnes dectan:<br />
«Padre, Tú lo puedes hacer todo; quita de ~~ esta copa,<br />
si es posible.» Pero su voluntad e.staba. ,fIJa como el<br />
imán al polo Norte, y dijo a contmuaCIOn: «Pero no<br />
132<br />
mi voluntad, sino la tuya.» Y algunas veces esta clase<br />
de lucha hace que nuestra propia alma esté en extremo<br />
turbada.<br />
La palabra felicidad y lo que nos sucede está íntimamente<br />
mezclado. La felicidad depende de lo que nos<br />
sucede, cosas externas que se hallan fuera de nuestro<br />
control. El gozo es la palabra apropiada para lo que<br />
deben esperar los cristianos. Porque el gozo es una<br />
palabra interna que tiene que ver con relaciones, no<br />
con sucesos o circunstancias. El gozo es la calma interior,<br />
el ojo de la tormenta; los sentimientos pueden<br />
ser tempestuosos, pero puede también haber un sentimiento<br />
interno de adecuación a la voluntad de Dios.<br />
Pero esto no significa que tengamos que ir de un sitio<br />
a otro con la careta del super-yo puesta, con labios<br />
sonrientes, caras resplandecientes y repitiendo «¡Alabado<br />
sea el Señor!»<br />
Realismo del verdadero yo<br />
Como cristiano has de ser realista. Esto significa<br />
que no debes temer hacer frente a lo peor, lo más<br />
feo, lo más penoso. No tienes por qué temer el expresar<br />
tus sentimientos de pena, dolor, soledad, lucha e<br />
incluso depresión. Algunas veces puedes incluso experimentar<br />
sentimientos depresivos, como Elías después<br />
de su mayor momento de triunfo: «Oh Señor, ya<br />
basta. Déjame morir.»<br />
Hay una sinceridad brusca revelada en la vida de<br />
Jesús: en los Evangelios vemos testimonio de toda<br />
clase de emoción, expresada de modo franco, sin el<br />
menor sentido de vergüenza, de culpa o de imperfección.<br />
Sigue la pauta de Jesús, no de algún mítico super-yo.<br />
No tienes que temer nunca el expresar tus sentimientos<br />
reales y ser tu verdadero yo en Jesucristo.<br />
Cuando pierdes tiempo y energía tratando de ser<br />
un super-yo, te privas del crecimiento y la amistad de<br />
Dios. Y no dejas que Dios acepte y ame el verdadero<br />
yo por el cual Cristo murió. Éste es el único yo que<br />
Dios desea realmente conocer y ver. El super-yo es una<br />
133