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REVISTA CICPC

EDICION Nº 46

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venganza o ajuste de cuentas por deuda

de drogas. Se empezó a buscar a

Alí porque podría ser la última persona

que vio a la víctima. Este vivió en

el apartamento de André, sabía cuáles

eran sus pertenencias y bienes más

valiosos; las circunstancias apuntaban

a que no era un simple robo de residencia

al azar. ¿Había un estudio previo?,

¿cómo obtuvieron las llaves del

apartamento?; pudieron haber matado

André para quitarle las llaves e ingresar

al apartamento a perpetrar el robo.

Ante el cúmulo de preguntas e hipótesis

posibles se conformó un equipo

multidisciplinario de la División de Investigaciones

de Víctimas Especiales

y la Delegación Municipal Simón Rodríguez.

LA TELEFONÍA HABLÓ

El jueves 30 de abril los estudios de

telefonía arrojaron como resultado

que para la fecha y hora del robo en

el inmueble de André, se evidenciaron

varias comunicaciones bidireccionales

con un abonado de telefonía móvil, registrado

a nombre de Yuneida Ramos,

con una dirección ambigua en Simón

Rodríguez. El experto comenzó a valorar

las comunicaciones frecuentes de

ese abonado, obteniendo otro nombre

Lisbeth Márquez, también con dirección

en Simón Rodríguez, esta vez

mucho más precisa; se realizó su ubicación

y traslado al despacho, donde

dijo que no conoce ni a la víctima ni a

los sospechosos, así mismo que su teléfono

lo usa su hija Oriana, de 18 años

de edad. Esta indicó que el número de

teléfono pertenece a su exnovio de

nombre Carlos Garcés, quien era taxista;

la esposa de éste se llama Yuneida;

la joven describe a su ex pareja como

una persona habilidosa, había estado

preso por robo, fue funcionario de la

extinta Policía Metropolitana, de donde

fue egresado por problemas de conducta;

así mismo, menciona que siempre

estaba con un amigo de nombre Alí

Rodríguez.

El aparato de Garcés había tenido

contacto telefónico con el móvil y el

teléfono fijo de la víctima el día 12 de

abril, cuando se lleva a cabo el robo

de residencia y éste era amigo de Alí,

quien ya había sido mencionado como

la persona con quien se vería André el

día de su desaparición. De las pesqui-

APLICACIÓN DE ENSAYO DE LUMINOL

Lugar donde le dan muerte al ciudadano de origen español andré castro, en el mismo

fue realizado el ensayo de luminol. San bernardino, paseo anauco, vía pública, parroquia,

San Bernardino, municipio bolivariano Libertador, Caracas, Distrito Capital

sas surgió otro nombre Carmen, quien

también tenía amoríos con André. Fue

ubicada y al ser entrevistada señaló

que también compartía con la víctima

la adicción a las drogas, consumían

juntos, siempre en compañía de un

amigo de nombre Alí. El día de la desaparición

ellos se verían para consumir

como de costumbre, los investigadores

entendieron la conexión, el denominador

común era la droga. Carmen indicó

que Alí “en las noches se le ve con su

amigo Carlos, salen con chaquetas y

lentes oscuros y guantes negros”. Dijo

que le tenía idea a Sofía, la llamó arpía

y mencionó que siempre amenazaba a

André con quitarle todo.

La presión para los investigadores

aumentó cuando se recibió una comunicación

del Consulado de España en

Venezuela, ya que la familia de André

Castro, en el país europeo, acudió a la

Policía Nacional de España e interpusieron

denuncia por su desaparición y

notificaron a la oficina de Interpol de

ese país.

APARECIÓ ALÍ

El lunes 11 de mayo, con la comisario

Nery Ortega al frente, una comisión

fue a la casa de Garcés en el sector

Pedro Camejo. Al tocar la puerta salió

una mujer de mediana edad, llamada

Yuneida, quien era la mujer de Garcés.

Se escucharon voces masculinas

y ruido en el interior de la vivienda, la

comisión penetró y observaron que un

sujeto procuraba huir por una ventana

de la vivienda con otro hombre joven,

quienes al ser detenidos fueron identificados

como Carlos Julio Garcés

Pérez, de 48 años de edad y Alí José

Rodríguez Isturriaga, de 29 años de

edad, ambos de profesión indefinida.

Entre las vestimentas de Alí se hallaban

los documentos de los vehículos

propiedad de André y en la vivienda se

estaban gran parte de los artefactos,

enseres y bienes que fueron robados

del apartamento de André. Los técnicos

realizaron el trabajo de Criminalística

de Campo: Inspección Técnica y

Fotografía Policial, luego se les realizaría

Reconocimiento Técnico y Avalúo

Real.

En el despacho, Garcés fue interrogado

y junto a Yuneida, contó que Alí

les regaló esos enseres, así mismo

que lo habían visto llevar unos equipos

de computación hasta la casa de un

señor de nombre Francisco, para que

se los desbloqueara. Los equipos fueron

ubicados y recuperados en el taller

del Sr. Francisco, quien es técnico

informático y efectivamente manifestó

que se los llevó Alí.

Por su parte Alí, indicó que vio a Garcés

en compañía de dos “piedreros”

trasladando esos enseres en su moto,

marca Empire TX, hasta su residencia

y un depósito que tiene adyacente a la

misma, indicando que se los habían

robado a un ciudadano en La Candelaria.

Al notar que no convencía con su

narrativa a los pesquisas, se mostraba

bastante alterado, empezó con ambivalencias,

experimentaba incertidumbre

e indecisión, no lograba aportar

información precisa ni coherente en

relación al caso y lo poco que aportaba

no concordaba con lo contenido

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