REVISTA CICPC

Todos debemos trabajar en materia de prevención
Es necesario luchar para mantener
en todo lo alto al CICPC y al BAE
Por. Nelson Contreras
El comisario general,
Hebert González, ha
dedicado su vida a la policía
científica a la que venera
todos los días. Considera
necesario mantener la
disciplina, el orden, y
la honestidad entre los
funcionarios para evitar la
destrucción de todo lo que
han construído con el paso
de los años
“La Brigada de Acciones Especiales
es una escuela, una academia que forma
líderes que más adelante van a ser
probos para la institución”, aseguró el
comisario general, Hebert González,
quien, no obstante, cree que se debe
mantener la disciplina, el respeto, el
orden, y la honestidad entre los funcionarios
para evitar la destrucción
de todo lo que han construído con el
paso de los años.
González tiene 28 años de trabajo en
el Cuerpo de Investigaciones Científicas
Penales y Criminalísticas (Cicpc),
y se siente altamente satisfecho por
pertenecer a una institución que vuelca
todo su esfuerzo en beneficio de la
población venezolana.
Comisario con toda esa experiencia
que tienes en el BAE
¿cómo tú ves el futuro de la
Brigada?
“Bueno el BAE tiene un futuro muy
provisorio o no muy bueno, todo dependerá
sólo si, la generación que
está dentro de la Brigada de Acciones
Especiales sigue haciendo las cosas
bien”.
“Porque no es mentira que muchos
están detrás del BAE buscando que
desaparezca, al igual que el Cicpc”,
afirma en forma categórica.
“Yo creo que la nueva generación
efervescente que está surgiendo
debe hacer las cosas bien para que el
Cicpc, se mantenga en el tiempo. Si
esto no pasa el Cicpc tiende a desaparecer,
porqué, por las acciones de
los propios funcionarios. Por eso es
la preocupación de los gerentes que
estamos aquí: tratar de involucrar las
enseñanzas que aprendimos nosotros
de nuestros antiguos jefes que eran
ortodoxas, pero nosotros queremos
ser más flexibles.
“No, tenemos que ser duros dentro
en la formación de nuestros funcionarios,
y cuando hablo de duros no quiero
decir que debemos caerles a golpes,
a los nuevos, nada de eso, sino
de impartir una formación dura. Yo es-
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