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MARTÍN NOTA DE POCHAT TAPA
TIEMPOS
CONVULSIO-
NADOS
La empresa de lácteos El Amanecer se originó
en 1939 bajo el ala de los hermanos De Vega.
—Fueron años dorados de expansión y crecimiento.
En los años 90 le vendieron la fábrica al
empresario Florencio Aldrey Iglesias y luego
pasó a manos del grupo Santa Bárbara.
La situación de la !rma comenzó a empeorar a
partir de las crisis económicas del país y tuvo
dos quiebres, en 2010 y luego a !nes de 2012. “En
la primera sentimos mucha impotencia, bronca,
furia, era la pelea entre el gremio y el patrón. Yo
estaba en el gremio y trajimos a un montón de
empresarios y funcionarios para que siguiera
funcionando”, recuerda Pandiani.
“El patrón decía que los números no le daban,
que esto, que aquello, y uno no se podía meter
ahí. De una producción de 150 mil litros de leche
por día lo bajaron a 70 mil y cuando llegamos a
30 mil dijimos: ‘En cualquier momento esto se
pone mucho peor’. Hablamos con los camioneros
para que nos avisaran cuándo no entregaban
más leche. Y nos llamó uno para decirnos que le
habían secuestrado el camión adentro del
campo del tambero porque la empresa no les
pagaba. Ya eso era no tener leche. A nivel
gremial uno podía tomar la fábrica porque no se
entregaba leche y no nos pagaban los sueldos”,
explica.
Ese fue el día que decidieron no moverse de la
fábrica, permanecer allí hasta tener una respuesta,
una solución, un horizonte. “No quiso entrar
nadie, ni los patrones. Empezamos a hacer
guardias, gra!tis en las paredes, conseguimos un
apoyo contundente del sindicato. Se hizo una
movilización de más de 3 mil a!liados en todo el
país y en Mar del Plata fue algo inédito, no solo
por la cantidad de gente sino por la organización
y la cantidad de marplatenses que se sumaron”,
resalta.
CENTRAL