El cos: objecte i subjecte de les ciències humanes i socials El ...

“el cuerpo es la representación del cuerpo”. Sin embargo, parece que el cuerpo/la corporeidad
opone resistencia, por ejemplo, ante situaciones extremas como el dolor físico o la tortura. Es
decir, hay un momento en que el cuerpo no puede decirse. Algunas novelas como la de Christa
Wolf, En carne propia, de Patricia de Soúza, El último cuerpo de Úrsula, y relatos como los de
Luisa Valenzuela, Cambio de armas y Simetrías intentan, precisamente, representar en el
cuerpo textual el dolor del cuerpo (sexuado en femenino), poner palabras donde hay un cuerpo
herido. Mi propuesta es hacer un recorrido a lo largo de estas novelas y estudiar, desde la
perspectiva postestructuralista, las representaciones textuales de estos cuerpos.
IV. Aula A RESIDÈNCIA CSIC:
El cuerpo del soldado como discurso político:
El caso del ejército americano en la Segunda Guerra con Irak
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Diego Zavala Scherer
La nueva incursión de los Estados Unidos en una guerra, donde ha hecho un gran despliegue
de tropas en tierra, es el marco socio-histórico para repensar cómo el cuerpo del soldado se
constituye como uno de los discursos más importantes para la reproducción de una cultura
(Schulte-Sasse).
Este retorno de las acciones militares en tierra, con un gran despliegue de efectivos, cuestiona
seriamente la crisis del concepto de la guerra que Baudrillard atribuía a partir de lo que él
denominaba “la virtualización de la guerra”; y que argumentaba a partir de las características
de la intervención americana en el primer conflicto armado con Irak.
Las distintas representaciones documentales sobre la segunda guerra con Irak, a pesar de
participar de los mecanismos del simulacro explicados por Baudrillard, se han aproximado a
volver a mostrar el sufrimiento y el dolor del soldado como valores bélicos. Por lo mismo, la
imagen de vigilancia desde el cazabombardero, o las noticias sobre intercambio de rehenes
(tan comunes en la primera guerra del Golfo), han sido sustituidas por las cámaras de los
reporteros que acompañan a los soldados americanos en las patrullas por las ciudades
iraquíes, intentando pacificar el país, intentando contener una nueva guerra de guerrillas que
se asemeja a la vivida en Vietnam.
Las representaciones de estos soldados ya no intentan movilizar a la población, ya no interesa
lograr la implicación de la sociedad civil; a pesar de ello, siguen cumpliendo funciones
terapéuticas, tanto para los participantes como para los espectadores del conflicto armado. Las
historias de estos combatientes sirven para conjurar el dolor y el trauma de la guerra. Incluso,
en su forma más extrema: a través de los memoriales por los caídos en combate, se logra
establecer esta pérdida como un sacrificio en aras de la libertad y los valores democráticos
americanos. El cuerpo del soldado, igual que el cadáver han recuperado una función discursiva
en la política exterior estadounidense que es necesario analizar.
El daño como reclamo: linchados, macheteados y otros cuerpos heridos.
¿Cicatrices o heridas abiertas de la Guatemala actual?
Lorenzo Mariano Juárez
Universidad de Castilla La Mancha
En Junio de 2007, durante mi trabajo de campo en las comunidades de un municipio de la
región C'horti' del oriente de Guatemala, se produjo la desaparición de una niña ladina de la
localidad. Su cadáver apareció casi un día después, una escena corporal difícil de asumir: con
el tórax abierto, le faltaban algunos órganos vitales, una de sus extremidades y la totalidad del