PRIMERA PARTE

eve historia de las ideas económicas
mundo”. Ante todo, ya no es necesario tomar como
punto de apoyo la aprobación de un poder religioso,
y juzga todo influjo perceptible sobre la vida
económica de las normas eclesiásticas o del Estado,
como un impedimento. La “concepción del
mundo” marcha determinada por la suerte de los
intereses político-comerciales y sociales……. Y de
igual modo como pudo romper las cadenas que lo
sujetaban a las viejas formas de la constitución
económica del medioevo, apoyado en el poder
incipiente del Estado moderno, así pudo haber
ocurrido (diremos de paso) en sus relaciones con
los poderes eclesiásticos………….
En este caso habría sido del todo imposible una
doctrina “ética”, como la de Benjamín Franklin. Los
capitalistas leales a la tradición eclesiástica eran en
su actividad un tanto in diferentes a la ética en el
mejor de los casos, un tanto aceptables, si bien
arriesgaban, de manera concluyente, el logro de la
bienaventuranza, ya que podía inducir, de un
momento a otro, al conflicto con el veto eclesiástico
del préstamo a interés: como queda comprobado,
por fuentes fidedignas, que cuantiosas sumas eran
transferidas, a la muerte de las personas ricas
(como “dinero de conciencia”), a la instituciones
eclesiásticas, salvo determinados casos en que
pasaban a los antiguos deudores en calidad de
“usura” injustamente ejercida con ellos.
La ruptura de la ética medieval que condenaba la
acumulación de riquezas como móvil de la existencia no era
suficiente para las nuevas clases entronizadas en el control
social.
La historia de la organización social humana nos
muestra que cuando un nuevo grupo social se encarama en
su cúspide dos son los mandatos esenciales que debe
guillermo luis luciano
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