10.05.2013 Views

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

[156]<br />

[157]<br />

140 <strong>Testimonios</strong> <strong>para</strong> <strong>los</strong> <strong>Ministros</strong><br />

tenían nombre que vivían aunque estaban muertos. Sí, hay muchas<br />

personas tales entre nuestro pueblo, muchos que pretenden estar<br />

vivos, y sin embargo están muertos. Hermanos míos, a menos que el<br />

Espíritu Santo, como principio vital, os esté inspirando a obedecer<br />

sus impulsos y a depender de su influencia, trabajando con la fuerza<br />

divina, mi mensaje de parte de Dios <strong>para</strong> vosotros es: “Estáis bajo un<br />

engaño que resultará fatal <strong>para</strong> vuestras almas. Debéis convertiros.<br />

Debéis recibir luz antes de dar luz. Colocaos bajo <strong>los</strong> brillantes rayos<br />

del Sol de justicia”. Entonces podréis decir con Isaías: “Levántate,<br />

resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido<br />

sobre ti”. Debéis cultivar la fe y el amor. “No se ha acortado la<br />

mano de Jehová <strong>para</strong> salvar, ni se ha agravado su oído <strong>para</strong> no<br />

oír”. Buscad al Señor. No descanséis antes que sepáis que Cristo es<br />

vuestro Salvador.<br />

Hermanos míos, deseo que recordéis que la religión de la Biblia<br />

nunca destruye la simpatía humana. La verdadera cortesía cristiana<br />

necesita ser enseñada y practicada, <strong>para</strong> ser aplicada en todo el trato<br />

que tengáis con vuestros hermanos y con <strong>los</strong> mundanos. Se necesita<br />

mucho más amor y cortesía en nuestras familias de lo que ahora se<br />

manifiesta. Cuando nuestros hermanos ministros beban del Espíritu<br />

de Cristo diariamente, serán verdaderamente corteses, y no considerarán<br />

que es una debilidad ser tiernos de corazón y piadosos, porque<br />

éste es uno de <strong>los</strong> principios del Evangelio de Cristo. Las enseñanzas<br />

de Cristo enternecían y suavizaban el alma. La verdad recibida en<br />

el corazón obrará una renovación en el alma. Los que aman a Jesús<br />

amarán a las almas por las cuales él murió. La verdad implantada<br />

en el corazón revelará el amor de Jesús y su poder transformador.<br />

Toda rudeza, acritud, crítica y todo espíritu tiránico no son de Cristo,<br />

sino que proceden de Satanás. La frialdad, la falta de compasión, la<br />

carencia de tierna simpatía, están leudando el campamento de Israel.<br />

Si se permite que estos males se fortalezcan, como ha ocurrido en <strong>los</strong><br />

últimos años, nuestras iglesias se verán en una condición deplorable.<br />

Todo maestro de la verdad necesita el principio de la semejanza a<br />

Cristo en su carácter. No habrá enojos, regaños y expresiones de des-<br />

precio de parte de aquél que esté cultivando las virtudes cristianas.<br />

El siente que debe participar de la naturaleza divina, y debe reabastecerse<br />

en la fuente inagotable de la gracia celestial, de otra manera<br />

eliminará de su alma la gracia de la bondad humana. Debemos amar

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!