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Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

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66 <strong>Testimonios</strong> <strong>para</strong> <strong>los</strong> <strong>Ministros</strong><br />

cuando <strong>los</strong> reyes y presidentes beben de este vino del furor de su<br />

fornicación, son incitados a airarse contra aquel<strong>los</strong> que no quieran<br />

estar en armonía con las herejías falsas y satánicas que exaltan el<br />

falso día de reposo, e inducen a <strong>los</strong> hombres a pisotear el monumento<br />

conmemorativo de Dios.<br />

“Los ángeles caídos que están sobre la tierra forman confederaciones<br />

con <strong>los</strong> hombres ma<strong>los</strong> En esta época aparecerá el anticristo<br />

como si fuera el Cristo verdadero, y entonces la ley de Dios será<br />

completamente invalidada en las naciones de nuestro mundo. La<br />

rebelión contra la santa ley de Dios habrá llegado a su completa maduración.<br />

Pero el verdadero director de toda esta rebelión es Satanás<br />

vestido como un ángel de luz. Los hombres serán engañados y lo<br />

exaltarán al lugar de Dios, y lo deificarán. Pero la Omnipotencia se<br />

interpondrá contra las iglesias apóstatas que se unan <strong>para</strong> exaltar a<br />

Satanás y se pronunciará la sentencia: ‘Por lo cual en un solo día<br />

vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con<br />

fuego; porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga’”. *<br />

El objeto de la predicación no es solamente transmitir información,<br />

no meramente convencer el intelecto. La predicación de la<br />

palabra debe dirigirse al intelecto, e impartir conocimiento, pero debe<br />

hacer más que esto. Las palabras del ministro deben alcanzar <strong>los</strong><br />

corazones de <strong>los</strong> oyentes.—The Review and Herald, 22 de diciembre<br />

de 1904.<br />

* [Estudio adicional: Primeros Escritos, 278, 279; Joyas de <strong>los</strong> <strong>Testimonios</strong> 1:440,<br />

441; Joyas de <strong>los</strong> <strong>Testimonios</strong> 2:15-18; Testimonies for the Church 5:81-84, 202, 203.]

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