12.05.2013 Views

Al Hilo de la Conversación

Al Hilo de la Conversación

Al Hilo de la Conversación

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

AL HILO DE LA CONVERSACIÓN<br />

322<br />

poniendo más abue<strong>la</strong>. Yo creo que con lo buena que yo he sío con<br />

ellos no me van a <strong>de</strong>jar so<strong>la</strong>. Ahora mis hijas me arreg<strong>la</strong>n <strong>la</strong> casa, me<br />

<strong>la</strong>van <strong>la</strong>s cortinas y hacen <strong>la</strong>s cosas mías antes que <strong>la</strong>s suyas. La vida<br />

ha cambiao mucho, hay cosas que no me han gustao <strong>de</strong> los cambios,<br />

pero me acostumbro. ¿Qué voy a hacer? Ya no es como antes. Mi<br />

hijo mayor se ha separao <strong>de</strong> <strong>la</strong> mujer, ha tenío ma<strong>la</strong> suerte y ahora<br />

vive aquí conmigo…” (Encarna B.).<br />

Cuqui vive con su marido y a veces se p<strong>la</strong>ntean el futuro. Confiesa sentir<br />

cierto miedo a <strong>la</strong> llegada <strong>de</strong> esa vejez que aún queda lejana. Es comprensible,<br />

porque, con sus sesenta y siete años, tiene un aspecto <strong>de</strong> mujer<br />

madura, pero bien cuidada y muy autónoma: conduce su propio vehículo<br />

y es tesorera <strong>de</strong> una asociación <strong>de</strong> mujeres. No obstante reconoce sus limitaciones,<br />

esas pequeñas cosas que le hacen sentir menos capaz y fantasea<br />

con <strong>la</strong> i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que tener una hija siempre es mejor.<br />

“Dicen que soy una buena administradora en <strong>la</strong> asociación, que<br />

lo llevo mu bien y no quieren que me vaya… Cuando sea vieja no<br />

espero nada. Yo le temo a ese momento, cuando ya no me pueda valer,<br />

porque hay días que me doy cuenta que no puedo hacer to lo que<br />

antes hacía. Yo digo que me voy a un asilo. Pero mi marío dice que<br />

estamos en condiciones <strong>de</strong> estar en <strong>la</strong> casa y pagar a una mujer. Mi<br />

hijo no creo que se vaya a ocupar <strong>de</strong> nosotros. El<strong>la</strong>, <strong>la</strong> muchacha es<br />

buena, pero tiene <strong>la</strong> i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> irse al <strong>la</strong>o <strong>de</strong> su madre, es normal, ¿no? A<br />

mi me hubiera gustao que se quedaran aquí y que esta casa fuera <strong>de</strong><br />

él, pero… Yo creo que si tuviera una hija sería diferente…, hay más<br />

cariño…, más ayuda, pero vaya, ahora <strong>la</strong>s madres ayudan más a <strong>la</strong>s<br />

hijas que al contrario: mi hermana le hecha una mano a su hija y <strong>la</strong><br />

madre <strong>de</strong> mi nuera le ayuda más que el<strong>la</strong> a su madre, así que nunca<br />

se sabe” (Cuqui).<br />

En este momento <strong>de</strong> su vida, cuando ya ha cumplido setenta y cinco<br />

años, Encarnación se siente orgullosa <strong>de</strong> sus logros como mujer, que el<strong>la</strong><br />

atribuye en gran parte a <strong>la</strong>s enseñanzas <strong>de</strong> su madre. En sus pa<strong>la</strong>bras está<br />

c<strong>la</strong>ro el valor que da al sacrificio y a saber mantener <strong>la</strong> familia unida, aunque<br />

se tenga que pagar un precio.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!