cómo aprender telegrafía en 20 minutos
cómo aprender telegrafía en 20 minutos
cómo aprender telegrafía en 20 minutos
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
58<br />
Durante la noche los pies de Bride estaban helados por el frío y aplastados por la masa de<br />
hombres apiñados sobre el bote. Aún con el int<strong>en</strong>so dolor él no podía correr a los hombres de<br />
sobre sus pies porque el más pequeño movimi<strong>en</strong>to podía hacerlo caer <strong>en</strong> las frías aguas. Al<br />
amanecer fueron rescatados por el Carpathia, y luego de que transportaron a Bride a la<br />
cubierta perdió el conocimi<strong>en</strong>to.<br />
Lo sigui<strong>en</strong>te que Harold Bride vio fue una mujer apoyada sobre él <strong>en</strong> una cabina, cepillando<br />
su pelo y frotándose la cara. Él fue llevado al barco hospital, donde le v<strong>en</strong>daron los pies<br />
permaneci<strong>en</strong>do allí hasta la noche. En ese <strong>en</strong>tonces Harold Cottam, el radio operador del<br />
Carpathia, había trabajado por casi 36 horas y estaba exhausto. Asi que Bride fue invitado a<br />
ayudar allí y él aceptó. Con sus pies v<strong>en</strong>dados fue llevado a la sala de comunicaciones, donde<br />
permaneció hasta que el Carpathia llegó a Nueva York.<br />
Bride y Cottam nunca dejaron de <strong>en</strong>viar tráfico de salud. Los diarios y los oficiales del<br />
gobierno se <strong>en</strong>furecieron cuando el Carpathia no pudo responder a muchas de sus preguntas.<br />
Bride justificó sus acciones dici<strong>en</strong>do que el s<strong>en</strong>tía que los m<strong>en</strong>sajes personales de los<br />
sobrevivi<strong>en</strong>tes t<strong>en</strong>ían prioridad. Cuando se le preguntó por qué no respondió al U.S.S.<br />
Chester, un buque de guerra <strong>en</strong>viado por el presid<strong>en</strong>te Taft a contactar al Carpathia, Bride<br />
dijo que él había respondido la pregunta del operador del Chester, pero que ese operador<br />
estuvo cegado por su insufrible incompet<strong>en</strong>cia. Bride dijo que fue “insufriblem<strong>en</strong>te l<strong>en</strong>to,<br />
conocía el Morse Americano pero no el Morse Contin<strong>en</strong>tal”, y llevó su paci<strong>en</strong>cia al límite.<br />
Bride dijo, “el operador del Chester p<strong>en</strong>saba que lo conocía, pero era tan l<strong>en</strong>to como esperar<br />
la navidad!”<br />
El Carpathia ya había atracado <strong>en</strong> Nueva York y Bride estaba todavía pasando tráficos. Él no<br />
se percató de que un hombre <strong>en</strong>tró <strong>en</strong> la habitación y permaneció callado hasta que Bride<br />
terminó de transmitir el m<strong>en</strong>saje que estaba <strong>en</strong>viando. Cuando Bride se dio vuelta, débil y<br />
exhausto, estaba cara a cara con el mismo Guglielmo Marconi.<br />
Después de una <strong>en</strong>trevista del New York Times fue sacado del Carpathia y hacia la historia.<br />
Cuando volvió a Inglaterra aunque las fotografías no parecían mostrarlo, un jov<strong>en</strong> vecino le<br />
remarcó que su cabello se había vuelto blanco! Por pedido británico Bride continuó <strong>en</strong> el<br />
servicio marino y sirvió <strong>en</strong> los barcos de la Armada Real durante la Primera Guerra Mundial.<br />
Luego de eso se perdió de vista.<br />
En una cálida noche de Agosto de 1985, fui invitado a c<strong>en</strong>ar con Walter Lord, autor de “A<br />
Night to Remember” y la más reci<strong>en</strong>te “The Night Lives On”. Él estaba si<strong>en</strong>do <strong>en</strong>trevistado<br />
por Ed Hayman de “The Detroit News”, qui<strong>en</strong> me había invitado. Hayman sabía que yo era<br />
un Titanic Buff y miembro de The Titanic Historical Society. Lord y yo tuvimos una noche<br />
maravillosa conversando acerca de la inolvidable noche de 73 años antes. Como<br />
radioaficionado, le pregunté a Lord qué había sido de Harold Bride. Lord dijo que mucha<br />
g<strong>en</strong>te lo había buscado a través de los años pero sin éxito, y su paradero era un misterio.<br />
Como yo soy detective privado, Lord me lanzó una mirada por sobre sus anteojos y dijo, “tú<br />
eres el detective, David. Tú t<strong>en</strong>drías que ser qui<strong>en</strong> <strong>en</strong>contrara a Harold Bride.”<br />
Cuando me fui de la reunión esa noche, leí el nuevo libro de Lord, y resolví que trataría de<br />
ll<strong>en</strong>ar los años perdidos. Luego de casi un año y medio de investigación, obstáculos, rumores,<br />
y correspond<strong>en</strong>cia nacional e internacional, finalm<strong>en</strong>te “<strong>en</strong>contré” a Harold Bride. Él se<br />
convirtió <strong>en</strong> Sil<strong>en</strong>t Key el 29 de Abril de 1956 <strong>en</strong> Glasgow, Escocia. En realidad no p<strong>en</strong>saba<br />
<strong>en</strong>contrarlo vivo, pero debo admitir que me <strong>en</strong>tristeció saber que se había roto otro eslabón de<br />
la fatal noche.<br />
Un breve obituario <strong>en</strong> el Glasgow Herald del 1 de mayo de 1956 dice: