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un sector social que ha quedado sin expresión política, sin expresión estratégica,
todo un sector social que tal vez antes estaba incluido dentro de todo un proyecto
de país, un proyecto de vida (Abdala, 1985: 61-62).
Consecuentemente, no resulta extraño que en la reunión de Burzaco de 1991 haya
quedado plasmada la voluntad de “propiciar la apertura del sindicato a otras
organizaciones sociales” ; y, que en el Art.2 del Estatuto elaborado en noviembre de 1992
se establezca que pueden afiliarse a la nueva central: a) los trabajadores activos; b) los
trabajadores sin trabajo, los trabajadores beneficiarios de alguna de las prestaciones del
régimen previsional público o privado, nacional, provincial o municipal; y c) los
trabajadores autónomos y cuentapropistas en tanto no tengan trabajadores bajo su
dependencia 33 .
La participación de la CTA, y de ATE, en las protestas encabezadas por los
trabajadores estatales en diferentes puntos del país —y que en algunos casos llevaron a ese
sindicato a confluir con otros gremios, como lo evidencia la participación de ATE en el
Frente de Gremios Estatales que tenía como principal referente a Carlos “Perro”
Santillán—, fue acompañada, casi paralelamente, por diferentes intentos de conformación
de comisiones de trabajadores desocupados en lugares como Rosario, en la Provincia de
Santa Fe; o en la Provincia del Neuquén. 34
Como se recordará, es justamente esta última provincia la que se convirtió en cuna
del término “piquete” como consecuencia de la pueblada de 1996 en las localidades
petroleras de Cutral- Co y Plaza Huincul, y que se tornó símbolo del reclamo de fuentes
trabajo. Ese episodio, además, fue percibido como punto de inflexión en el ciclo de la
protesta social, y como el comienzo de la generalización de sucesos similares que se
inscribirían bajo la categoría de acción piquetera, como ocurrió con los acontecimientos
que posteriormente se produjeron en General Mosconi y Tartagal 35
Sin embargo, esta provincia tiene un interés particular para la CTA y para el análisis
D’Elía. 28-07-03.
33 Estatuto del CTA, 14 de noviembre de 1992.
34 En el caso de la Provincia del Neuquén, algunos testimonios recogidos por medio de entrevistas dan cuenta
de la existencia de comisiones de desocupados —que estaban incorporados en algún programa de empleo de
carácter provincial o nacional— ya en el año 1993.
35 Las experiencias de Plaza Huincul y Cutral Co en 1996 y 1997, así como las de General Mosconi y
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