VE-15 JULIO/AGOSTO 2015
Recopilación de relatos y poesía de un grupo de aficionados a la escritura.
Recopilación de relatos y poesía de un grupo de aficionados a la escritura.
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Cada vez que podía me llegaba sólo para contemplarte, una vez<br />
pasaste a mi lado y pude ver tus ojos claros, al cruzarnos me miraste,<br />
sentí galopar mi corazón en el pecho, me volví para ver cómo te<br />
alejabas, hubiera querido decirte, no sé, «Hola», pero no pude,<br />
boquiabierto me quedé hasta que te perdiste al doblar la esquina.<br />
Las tardes de un pueblo no tienen muchas opciones, pero en<br />
aquel entonces en una esquina recuerdo una calesita, las risas de los<br />
niños y el llanto del que no quería bajarse, ese girar multicolor frente<br />
a mí, con la música de aquellos años. Un santiagueño que le cantaba a<br />
su tierra, o a esa mujer, diciéndole; «Jamás podré olvidar, la noche<br />
que te besé», otro decía: «Fuiste mía un verano». El grupo de<br />
muchachos, bochincheros, nos reuníamos allí, presumiendo a las<br />
chicas, vos también estabas, te miraba deseoso de que lo hicieras<br />
también, pero no, solo reías con tu grupo de amigas, suspirando al<br />
escuchar tu tema favorito, un día escuché tu nombre; «Paula», y<br />
desde entonces mi almohada guardó el secreto, lo repetía hasta en<br />
mis sueños.<br />
Crecimos, los bailes comenzaron a ser el punto de reunión,<br />
había que ir de traje, zapatos muy bien lustrados, y tener que ser<br />
catalogados por las madres (allí presentes), si ellas te desaprobaban,<br />
ya no tenias opción.<br />
Había que arriesgarse a ser rechazado para salir a bailar,<br />
estabas sentada en una mesa con tus amigas y sus madres, te pedía<br />
en silencio que por favor me miraras, no me atrevía a arrimarme a tu<br />
mesa, tu belleza me cohibía, así que junté valor y me dije a mi mismo,<br />
«¡Vamos!», pero él se me adelantó, lo vi arrimarse, te habló, le<br />
sonreíste y salieron a bailar, así fue toda la noche, cundió mi desazón,<br />
tuve que contener mi bronca, mis amigos me decían:<br />
— ¿Viste? ¿qué te dije?, encárala —Mi respuesta solo fue una<br />
mentira.<br />
24