escena no solo quienes pertenecen a murgas “no oficiales” sinotambién <strong>de</strong>legados <strong>de</strong> <strong>la</strong> Comisión <strong>de</strong> Carnaval- se ausenta elhecho mismo <strong>de</strong> que ellos aportaron en <strong>la</strong> redacción <strong>de</strong> <strong>la</strong>or<strong>de</strong>nanza y con ello contribuyeron en <strong>la</strong> transmisión <strong>de</strong>l género“tradicional” <strong>de</strong>finido como tal por quienes producen <strong>la</strong>sexpresiones- <strong>de</strong>limitando <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí qué entra y qué no en elfestejo carnavalesco.Si un edificio histórico, una ruina o un monumento se vuelvenincuestionables una vez <strong>de</strong>c<strong>la</strong>rados patrimonio, <strong>la</strong>s activida<strong>de</strong>scarnavalescas al menos en el caso <strong>de</strong> Buenos Aires- continúanproduciéndose entre <strong>la</strong> legitimidad y <strong>la</strong> ilegitimidad,probablemente porque en el seno <strong>de</strong> expresiones ligadas al<strong>de</strong>nominado patrimonio inmaterial, los sujetos y grupos socialesson visibles y locuaces en sus prácticas y discursos, <strong>de</strong>jando a <strong>la</strong>vista estigmatizaciones y jerarquías sociales probablementeinvisibilizadas cuando <strong>la</strong> manifestación cultural no erapatrimonio, cuestión <strong>de</strong>sproblematizable en los casos <strong>de</strong> bienesmateriales, en los que <strong>la</strong> gente se niega y sale <strong>de</strong> <strong>la</strong> escena <strong>de</strong>lcontexto patrimonial.Así, aunque <strong>la</strong> normativa que permitió legitimar -mediante supatrimonialización- <strong>la</strong>s activida<strong>de</strong>s y agrupaciones carnavalescas,ha sido bienvenida y hasta firmemente apoyada por quienes<strong>de</strong>tentan saberes y prácticas re<strong>la</strong>cionadas, por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong> mismanormativa conflictiviza el escenario <strong>de</strong>l carnaval.2. ¿Qué es el Carnaval Porteño?: dimensiones etnográficas <strong>de</strong>lfestejoEl carnaval <strong>de</strong> Buenos Aires es una fiesta pública integrada alcalendario litúrgico <strong>de</strong> <strong>la</strong> iglesia católica, no obstante ello,originada en una mezc<strong>la</strong> que supo combinar elementos afro yeuropeos en diferentes épocas. La calle, el barrio, su carácterpopu<strong>la</strong>r y hasta arrabalero, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> gratuito, su espontaneida<strong>de</strong> improvisación, son aspectos cruciales para quienes participan,organizan, vivencian y <strong>de</strong>ben <strong>de</strong>finir <strong>la</strong> i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong>l carnavalporteño. También son estos aspectos los que operan a manera <strong>de</strong>“lugares comunes” o <strong>de</strong> preconceptos acerca <strong>de</strong> loscondicionantes esenciales para que el carnaval porteño no <strong>de</strong>je <strong>de</strong>serlo y conserve su idiosincrasia y tradicionalidad. Son estascaracterísticas <strong>la</strong>s que efectivamente conjuran contra unavaloración económica <strong>de</strong>l mismo por parte <strong>de</strong> sus protagonistas,quienes permanentemente son ambivalentes en su parecerrespecto <strong>de</strong> los beneficios económicos que pue<strong>de</strong> otorgarles <strong>la</strong>ejecución <strong>de</strong> <strong>la</strong> fiesta, remarcando constantemente <strong>la</strong> relevancialúdica, como un juego realizado para sí mismos y el entorno máspróximo (familiares, vecinos y amigos). “En <strong>la</strong> murga porteña nohay exigencias: entra todo aquel que tenga ganas” se resalta enuna nota periodística, diferenciando esta murga <strong>de</strong> <strong>la</strong> uruguaya <strong>de</strong><strong>la</strong> que <strong>de</strong>staca su especialización y profesionalización.La murga y el murguero “auténticos” son elementos distintivos<strong>de</strong>l carnaval riop<strong>la</strong>tense, por en<strong>de</strong> <strong>de</strong> Buenos Aires. No obstanteello, <strong>la</strong> pa<strong>la</strong>bra murga parece querer englobar y unificar distintostipos <strong>de</strong> agrupaciones, <strong>de</strong> <strong>la</strong>s cuales el centro-murga es el quemás ha resurgido en los últimos 10 años. Se <strong>de</strong>fine a éste como <strong>la</strong>agrupación con estilo <strong>de</strong> murga porteña tradicional. Conformadapor hombres, mujeres y niños realizan <strong>de</strong>sfiles <strong>de</strong> entrada ysalida con una estructura que porta el estandarte, y en <strong>la</strong> que losmurgueros van disfrazados, con <strong>la</strong>s <strong>de</strong>nominadas fantasías, tocaninstrumentos <strong>de</strong> percusión y portan ban<strong>de</strong>ras, cabezudos,sombril<strong>la</strong>s que ubican en diferentes lugares <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sfile. El6instrumento característico que compone el 70% <strong>de</strong>l total <strong>de</strong>percusión, es el bombo con p<strong>la</strong>tillo, al que se agrega a<strong>de</strong>más, elsilbato. La agrupación murguera es simi<strong>la</strong>r al centro-murga (suestilo se basa en <strong>la</strong> murga porteña) pero pue<strong>de</strong> presentarmodificaciones en cuanto a sus integrantes, por ejemplo nosiempre presenta mascotas, los hombres y mujeres pue<strong>de</strong>n irmezc<strong>la</strong>dos, aunque el 70% <strong>de</strong> los instrumentos tienen que serbombos con p<strong>la</strong>tillos, también pue<strong>de</strong>n tocar instrumentosmelódicos, y los arreglos musicales no pue<strong>de</strong>n remitir a estilosque no sean representativos <strong>de</strong> estilos porteños. La agrupaciónhumorística musical, hoy poco común, en sus orígenes seformaba en el barrio <strong>de</strong> La Boca, teniendo por peculiaridad quesus personajes retrataban a los inmigrantes. Sus integrantesvarían entre 40 y 100 personas, se disfrazan <strong>de</strong> distintospersonajes y hacen parodias en su recorrido por <strong>la</strong>s calles.Generalmente cantan todos mientras realizan dicho trayecto. Esnecesario acotar que los géneros mencionados son los <strong>de</strong>c<strong>la</strong>radospor <strong>la</strong> or<strong>de</strong>nanza como “originarios y tradicionales” <strong>de</strong>l CarnavalPorteño asunto que remite a <strong>la</strong> construcción <strong>de</strong> una matrizprescriptiva acerca <strong>de</strong> cuáles son los géneros autorizados en <strong>la</strong>fiesta local-. Y si bien <strong>la</strong> or<strong>de</strong>nanza contemp<strong>la</strong> otros géneros losconsi<strong>de</strong>rados “no originarios”, tales como <strong>la</strong>s expresiones <strong>de</strong>lcarnaval boliviano, que sólo ingresan en el cupo <strong>de</strong>l 7%admisibles en cada festejo, sobre el total <strong>de</strong> <strong>la</strong>s tradicionales- y <strong>la</strong>comparsa, género “tradicional” <strong>de</strong> gran trascen<strong>de</strong>ncia en <strong>la</strong>sprimeras expresiones carnavalescas <strong>de</strong> Buenos Aires, cuando losnegros candomberos eran parte <strong>de</strong> <strong>la</strong> fiesta, luego adaptadas aestilos europeizantes cuando <strong>la</strong>s elites <strong>de</strong> negros se separan <strong>de</strong>lestilo candombero; al mismo tiempo invisibiliza <strong>de</strong> <strong>la</strong> matrizoriginaria los estilos y agrupaciones con escasa presencia en elespacio público <strong>de</strong>l carnaval contemporáneo esta exclusión nosolo es efecto <strong>de</strong> <strong>la</strong> patrimonialización, sino más bien <strong>de</strong> <strong>la</strong> toma<strong>de</strong> <strong>de</strong>cisiones <strong>de</strong> diferentes actores ligados al carnaval porteño,entre ellos también <strong>de</strong> los mismos murgueros. De hecho, en <strong>la</strong>actualidad en términos porcentuales <strong>la</strong>sasociaciones/agrupaciones están divididas según los siguientesgéneros <strong>de</strong> carnaval:Una estética y estilo caracterizó al espacio carnavalesco hastamediados <strong>de</strong>l siglo XX. Estética que en buena medida se hacontinuado en el tiempo hasta <strong>la</strong> actualidad. La agrupación <strong>de</strong>bediferenciarse e i<strong>de</strong>ntificarse al mismo tiempo por uno o máscolores. La cuestión <strong>de</strong> los colores i<strong>de</strong>ntificatorios es <strong>de</strong> taltrascen<strong>de</strong>ncia que entre los requisitos para el registro aparece <strong>la</strong>mención <strong>de</strong> esa característica, entre otras cuestiones porque loscolores pue<strong>de</strong>n ser fuente <strong>de</strong> conflictos entre murgas: rivalida<strong>de</strong>sfrecuentemente asociadas a los equipos <strong>de</strong> fútbol. La estética secompleta con un tipo <strong>de</strong> vestimenta asociada a <strong>la</strong> levita, pantalóno falda, <strong>de</strong> colores bril<strong>la</strong>ntes los <strong>de</strong> <strong>la</strong> murga- en te<strong>la</strong> <strong>de</strong> raso osatén, con apliques bordados en lentejue<strong>la</strong>s o simi<strong>la</strong>res. Pue<strong>de</strong>agregársele galera, sombrero y guantes. Aunque no es algo usadomayoritariamente, algunas murgas agregan fantasías ban<strong>de</strong>ras,cabezudos, etc.- y disfraces. El instrumento básico que <strong>la</strong> murgaadoptó <strong>de</strong> los inmigrantes españoles también se dice que fueescogido como típico en <strong>la</strong>s barriadas popu<strong>la</strong>res en <strong>la</strong> década <strong>de</strong>los ´40- es el bombo con p<strong>la</strong>tillo <strong>de</strong> bronce.El espectáculo se compone <strong>de</strong>: Glosa <strong>de</strong> Presentación, Canción
<strong>de</strong> Presentación, Canción <strong>de</strong> Crítica; Glosa <strong>de</strong> Retirada, Canción<strong>de</strong> Retirada. Las canciones son popu<strong>la</strong>res o propias, cantadas porun solista <strong>la</strong>s estrofas- y un coro el estribillo-. La crítica al po<strong>de</strong>ry <strong>la</strong> ironía o mensajes con doble sentido constituyen un aspectocaracterístico <strong>de</strong> <strong>la</strong>s mismas. El <strong>de</strong>sfile es importante para <strong>la</strong>sagrupaciones <strong>de</strong> muchos integrantes (no hay que olvidar estedato, ya que como veremos inci<strong>de</strong> en <strong>la</strong> cuestión económica,pues hay murgas con 15 integrantes y otras con hasta 200 y más).El baile es c<strong>la</strong>ve entre quienes se i<strong>de</strong>ntifican como murguerosauténticos: algunos llegan a <strong>de</strong>cir que solo van para bai<strong>la</strong>r y lospasos y ritmos se presume es una mixtura que proviene <strong>de</strong> suscomienzos entre géneros afro, como el candombe, y los pasos <strong>de</strong><strong>de</strong>sfile-.Estas son algunas <strong>de</strong> <strong>la</strong>s características en torno <strong>de</strong> <strong>la</strong>s cuales seconstituye <strong>la</strong> “murga <strong>de</strong> calle”. Es el espacio público el escenariopor excelencia en que se <strong>de</strong>sarrol<strong>la</strong> el carnaval <strong>de</strong> <strong>la</strong> ciudad:<strong>de</strong>s<strong>de</strong> los ensayos hasta <strong>la</strong> “actuación” en el corso lugar solo <strong>de</strong>murgas, organizado y <strong>de</strong>limitado a lo <strong>la</strong>rgo <strong>de</strong> una o más cuadrasen los diferentes barrios <strong>de</strong> <strong>la</strong> ciudad, don<strong>de</strong> se coloca elescenario, se ubican varios puestos <strong>de</strong> venta ambu<strong>la</strong>nte, para darlugar al <strong>de</strong>sfile y actuación <strong>de</strong> diversas murgas que proce<strong>de</strong>n <strong>de</strong>distintos espacios <strong>de</strong> <strong>la</strong> ciudad y al juego <strong>de</strong> espuma queentremezc<strong>la</strong>do con <strong>la</strong> performance, enfrenta en un juego sin fin achicos, aunque también a gran<strong>de</strong>s-; todo tiene lugar en el barrio,<strong>la</strong> p<strong>la</strong>za y <strong>la</strong> calle. Y más atrás en el tiempo, los juegos <strong>de</strong> agua,los <strong>de</strong>sfiles <strong>de</strong> carrozas, hasta los disfraces que los niños llevabanal corso y los bailes <strong>de</strong> carnaval en los clubes <strong>de</strong> los barrios,también se constituyeron en el ámbito <strong>de</strong>l espacio público. Eseste aspecto el que al <strong>de</strong>cir <strong>de</strong> muchos murgueros ha asimi<strong>la</strong>do <strong>la</strong>murga <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su origen en el barrio, con <strong>la</strong> cancha <strong>de</strong> fútbol perotambién con el peronismo, <strong>de</strong>bido a su carácter popu<strong>la</strong>r. Y es estaanalogía, murga/barrio, <strong>la</strong> que otorga a <strong>la</strong> expresión un sentido <strong>de</strong>espontaneidad e improvisación que se profundiza <strong>de</strong>s<strong>de</strong> losorígenes <strong>de</strong> <strong>la</strong> “murga-taller” (surgida en los ´90). Es también elbarrio el que <strong>la</strong> aproxima a cierta transgresión y <strong>la</strong> aleja <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>ny prolijidad que se atribuye a <strong>la</strong> expresión aprendida en el taller.La vincu<strong>la</strong>ción con el barrio fue y es el eje <strong>de</strong> <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> <strong>la</strong>murga, el que <strong>la</strong> adscribió a su costado marginal: “antes <strong>de</strong> <strong>la</strong>or<strong>de</strong>nanza ninguno se consi<strong>de</strong>raba parte <strong>de</strong> ningún tipo <strong>de</strong>cultura…no se vivía como algo cultural”, resaltaba un murguerodando cuenta <strong>de</strong>l antagonismo producido y reproducido hacia elinterior <strong>de</strong> <strong>la</strong> murga, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí hacia <strong>la</strong> fiesta, en consecuencia entanto oposición <strong>de</strong> <strong>la</strong>s expresiones que, previamente a <strong>la</strong>patrimonialización, tuvieron lugar en los ámbitos cerrados einstitucionales que originaron los circuitos <strong>de</strong>l aprendizaje en eltaller.El punto <strong>de</strong> inflexión que <strong>la</strong> mayoría ve en <strong>la</strong> or<strong>de</strong>nanza esaltamente visible en <strong>la</strong> antigüedad <strong>de</strong> conformación <strong>de</strong> <strong>la</strong>smurgas que existen en <strong>la</strong> actualidad. En un corte temporal que va<strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1950 hasta el año 2004, encontramos que el incrementofundamental se dio en <strong>la</strong> década correspondiente a los años ´90 ymás especialmente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l 2000:3. El Carnaval <strong>de</strong> Buenos Aires entre lo económico y lo políticosocialLa invisibilización <strong>de</strong> <strong>la</strong>s dimensiones económicas atribuibles alcarnaval porteño, no sólo se re<strong>la</strong>ciona con <strong>la</strong> escasez <strong>de</strong> datosinstitucionales, sino también con el papel que los protagonistas leasignan a este aspecto. Hab<strong>la</strong>r sobre el campo económico quero<strong>de</strong>a y en torno <strong>de</strong>l cual se constituye el carnaval local pareceser uno <strong>de</strong> esos temas que los protagonistas perciben yexperimentan como tabú. No se trata <strong>de</strong> un secreto bien guardadotal como ha p<strong>la</strong>nteado Barrientos para el caso <strong>de</strong>l Carnaval <strong>de</strong>Oruro (2007)-, pues los actores involucrados en <strong>la</strong> organización y<strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l carnaval <strong>de</strong> Buenos Aires conocen y reconocenque el or<strong>de</strong>n económico subyace al ámbito <strong>de</strong> <strong>la</strong> fiesta, sinembargo, simultáneamente refuerzan una lógica peculiar yesencial a este carnaval. Como ha seña<strong>la</strong>do Ferreiros (2001:21),“…si bien efectivamente hay dinero en juego, lo que circu<strong>la</strong>primordialmente es el conocimiento, <strong>la</strong> habilidad y el prestigio”que se adquiere en <strong>la</strong> calle. Como en el sistema <strong>de</strong>l don<strong>de</strong>sarrol<strong>la</strong>do teórica y empíricamente por Mauss en <strong>la</strong>ssocieda<strong>de</strong>s indígenas, <strong>la</strong>s murgas se revalúan a partir <strong>de</strong> sistemas<strong>de</strong> transacción, intercambio y circu<strong>la</strong>ción don<strong>de</strong> <strong>la</strong>s cosasadquieren fuerza simbólica. A través <strong>de</strong> esta circu<strong>la</strong>ción queindica prestigio y or<strong>de</strong>n simbólico, los grupos murgueros seponen en movimiento estableciendo jerarquías, otorgando po<strong>de</strong>rsobre todo cuando esta dinámica se construye en torno <strong>de</strong> loslí<strong>de</strong>res y/o directores <strong>de</strong> <strong>la</strong>s murgas- pero también con el objetivo<strong>de</strong> integración, reproducción <strong>de</strong>l espacio y gestación <strong>de</strong> unai<strong>de</strong>ntidad colectiva <strong>de</strong> pertenencia como nos testimoniaba unmurguero “darle <strong>la</strong> te<strong>la</strong> [al que ingresa para hacerse el traje] escomo darle <strong>la</strong> bienvenida” o como <strong>de</strong>cirle “sos uno <strong>de</strong> losnuestros”-Las cosas se mezc<strong>la</strong>n entre <strong>la</strong>s personas y el mismodinero que también al <strong>de</strong>cir <strong>de</strong> los protagonistas, circu<strong>la</strong> en igualnivel que los objetos lo que se cobra en un evento privado ocomo pago por <strong>la</strong>s actuaciones durante el período <strong>de</strong> carnaval,vuelve a <strong>la</strong> murga tanto sea para reiniciar el ciclo <strong>de</strong> preparacióny organización para el siguiente festejo, tanto sea para <strong>la</strong>realización <strong>de</strong> otro tipo <strong>de</strong> eventos vincu<strong>la</strong>dos al barrio, a <strong>la</strong>spob<strong>la</strong>ciones necesitadas-. Aunque en forma voluntaria y disparsegún cada murga-, sin embargo, al mismo tiempo casiobligatoria porque es parte <strong>de</strong>l “ser murguero”-, lo que circu<strong>la</strong> esun sistema <strong>de</strong> signos, valores y creencias asociados a <strong>la</strong> murga ylos murgueros, sistema que permite eludir directamente <strong>la</strong>cuestión económica y magnificar <strong>la</strong> expresión <strong>de</strong> que el carnaval“no es negocio” al menos para aquellos que vuelcan los magrosingresos obtenidos, nuevamente en <strong>la</strong> murga y que perciben eldinero, el negocio y lo económico como <strong>la</strong> vía directa hacia <strong>la</strong>pérdida <strong>de</strong>l sentido <strong>de</strong>l carnaval asociado a <strong>la</strong> “cultura <strong>de</strong>barrio”-.En coinci<strong>de</strong>ncia con lo mencionado, el director <strong>de</strong> Los Duen<strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>la</strong> Cortada, citado por Ferreiros (2001:25), seña<strong>la</strong>: “<strong>la</strong>murga…no fue constituida para ganar p<strong>la</strong>ta…no es el motor eltema <strong>de</strong>l dinero. La murga se hace para salir <strong>de</strong> lo establecido,que es tener que trabajar, pagar y pagar. Nadie vive <strong>de</strong> <strong>la</strong>murga…”. En este sentido, es que subyace otra representaciónsobre lo que significa el trabajo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> <strong>la</strong> murga: en suma, setrata <strong>de</strong> trabajar para <strong>la</strong> fiesta, pero sin que ello signifique unaconcepción mo<strong>de</strong>rna e industrial <strong>de</strong>l trabajo. Aunado a ello,<strong>de</strong>bemos contemp<strong>la</strong>r el valor dado a lo gratuito: el mismodirector dice que con <strong>la</strong> murga “se pue<strong>de</strong>n hacer muchas cosasgratis, a diferencia <strong>de</strong>l actor que cobra por actuar. El 95% <strong>de</strong> <strong>la</strong>s7
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