2do Informe - Instituto de Geografía - Universidad Nacional ...

agostoA r t í c u l oRecorren CU estudiantesdestacados de SinaloaViajaron a la Ciudad de México, algunos para evaluarcuál podría ser su futuro académicoPaseo por el Centro Cultural Universitario. Fotos: Francisco Cruz.OMAR PÁRAMOAunque son 26 alumnos de primaria ysecundaria, entre todos han ganado más de 80premios y reconocimientos académicos tan sóloeste año. Se trata de los niños ASES, los infantesmás sobresalientes de Sinaloa, quienes viajarondesde su estado natal hasta la Ciudad de México,algunos para evaluar dónde continuar sus estudiosy otros para contemplar monumentos y paisajes queúnicamente habían visto en recortes de revistas; sinembargo, los más espontáneos confiesan que estánaquí para echar relajo, conocer y divertirse.“Somos chicos normales”, afirma Raúl Padilla,lo cual resulta cierto para quien considere que esnormal que un adolescente, a los 12 ó 14 años, seinterese por la química nuclear, proponga sistemasde purificación de agua contaminada, combata labacteria Escherichia coli o toque el violonchelo ypiano con virtuosismo.“En realidad son jóvenes de excepción que, sinduda, serán los líderes del mañana”, comenta RocíoLabastida, subsecretaria de Desarrollo Educativo yVinculación Social de la Secretaría de EducaciónPública y Cultura del Estado de Sinaloa y, en estaocasión, compañera de los niños ASES (siglas deApoyo a Sobresalientes en el Estado de Sinaloa),en su aventura por el Distrito Federal.La travesía capitalina de los niños los llevó aCiudad Universitaria, donde visitaron el CentroCultural, diversos institutos como los de CienciasNucleares y Geografía, y el Centro de Ciencias dela Atmósfera.En un lugar de la mancha… urbanaSiempre juntos, con sus cámaras colgadas al cuelloy armando el típico bullicio adolescente, los niñosASES empezaron su recorrido por el Distrito Federalen el Centro Histórico.De la Catedral al Templo Mayor, los muchachosobservaron cómo los dos rostros de la esenciamexicana, española e indígena, se miran casi defrente en el primer cuadro, y se dieron cuenta de queen esta ciudad basta con caminar pocos metros paraabarcar cientos de años de historia.“De ahí fuimos a la Cámara de Senadores, dondeme llamó la atención que sólo dos instituciones tuvieransu nombre inscrito en letras de oro: el IPN y la UNAM,y me dije, ¡debo conocer esos lugares!”, comentaMarco Polo, quien haciéndole honor a su nombre yaestá ansioso por emprender un largo viaje: en tresmeses irá a Salamanca, España, a representar aMéxico en su papel de joven investigador.Marco Polo no tardaría en ver realizado sudeseo, porque Octavio Paredes –integrante de ElColegio de Sinaloa, miembro de la Junta de Gobiernode la UNAM e investigador del Cinvestav– coadyuvópara que los chicos visitaran Ciudad Universitariay el Centro de Investigación y de Estudios Avanzadosdel Politécnico, “lugares que hasta huelen a ciencia”,dice uno de los pequeños.Para Octavio Paredes, asesor y generador delproyecto, este tipo de iniciativas “cubre, hasta dondepuede, la falta de programas dirigidos a darseguimiento, orientar, estimular, inducir e inclusoapapachar a los niños sobresalientes. A pesar delas carencias, ASES ha sido muy exitoso en lo quea identificar y saber cómo estar cerca de estos talentosse refiere; ahora, el reto es llegar a esos niñosbrillantes que viven en lugares apartados, como lasierra, pero creemos que vamos a lograrlo”.Apoyar a quien lo necesitaASES nació en 2007 como una iniciativa paraalentar y promover el desarrollo intelectual de losniños más brillantes del estado. Rocío Labastidaexplica que este proyecto surgió tras detectar quepara este tipo de infantes había modalidades deayuda, aunque no un sistema que ofreciera soporteconcreto, inmediato y práctico.“Nosotros lo que hacemos es dar un apoyoextracurricular; el niño no deja de ir a su escuela,y el viernes en la tarde y el fin de semana tieneotras clases y cursos como el de técnicas deinvestigación, laboratorios, pláticas, conferencias,películas, acercamiento con científicos y excursiones,siempre de acuerdo con la edad e interesesdel pequeño”.A esta propuesta se han sumado institucionescomo el Centro de Ciencias de Sinaloa, donde loschicos toman clases, o El Colegio de Sinaloa, dondeconvergen los intelectuales y científicos másdestacados de esa entidad.Actualmente, ASES atiende a cien infantes deCuliacán y 25 de Mazatlán, sin embargo el objetivoes reclutar a todos los pequeños talentos repartidosa lo largo de los 18 municipios del estado. “No haynada similar en todo el país, de hecho hay entidadesque han tomado prestado parte del modelo, pero nolo han aplicado tan a fondo y forma como aquí”,señala Rocío Labastida.Hasta ahora, el programa ha llevado a decenasde chicos a lugares que conocían sólo en susfantasías, como a los laboratorios de la NASA o alset de filmación de una película, donde muchosdebutarán como actores.Universitarios precocesComo parte de su visita a la UNAM, los púberesrecibieron clases por parte de destacados científicoscomo Miguel Alcubierre, quien hace 15 añosdescubrió un modelo que permitiría viajar másrápido que la luz, y que ahora se dio el tiempo parahablar con los sinaloenses sobre la teoría de larelatividad de Einstein.También acompañaron a Rafael Navarro, quiencolabora con la NASA y que en esta ocasión charlósobre las atmósferas extraterrestres. Además, seintrodujeron al laboratorio de soplado de vidrio,donde aprendieron cómo se hacen las pipetas,tubos de ensayo, matraces y demás utensiliosusados por los científicos en sus experimentos.817 de agosto de 200946