12.07.2015 Views

Revista T21 Agosto 2009.pdf

Revista T21 Agosto 2009.pdf

Revista T21 Agosto 2009.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Marítimovieran para no ocasionar perjuicios a los usuarios, sin que se presentaraneventos de violencia o enfrentamientos.“Fue un parte aguas, al liquidar lo anterior del puerto de Veracruz ydar inicio a un nuevo modelo todavía imperfecto, puesto que no se contabaaún con una nueva Ley de Puertos, pero de alguna manera se permitióla entrada (por primera vez, puesto que no existía antes la posibilidad de lainversión privada) de tres empresas a operar”.Dichas compañías fueron Corporación Internacional de ComercioExterior (CICE, que mantiene el mismo nombre en nuestros días), CompañíaTerminal de Veracruz (CTV, hoy Corporación Portuaria de Veracruz- CPV) yOperadora Portuaria del Golfo (OPG, empresa filial de TMM que posteriormentepasó a manos de SSA México). El primer trío de empresas privadasinició operaciones en agosto de 1991, las cuales tuvieron la obligación detomar a los trabajadores como parte de su plantilla laboral, además de comprarel equipo portuario que ya existía en el puerto.“En esos dos meses de operación de la requisa se acabó con todolo anterior, se finiquitaron contratos colectivos, trabajadores, se hizo un trabajomuy intenso en ese periodo, prácticamente eran 24 horas diarias, teníasoportunidad de hacer una comida al día y de irte a tucasa a dormir dos horas, fue muy intenso”.Un día antes de la toma del puertollegaron aVeracruz un grupo de 114 personas, de las aproximadamente150 que realizarían la requisa (que estuvo comandadapor Roberto Ríos Ferrer, vocal ejecutivo de PuertosMexicanos), provenientes del sistema portuario Tampico-Altamira, cuyo director era Ángel González Rul.“Vinieron tres camiones con personal, se manejó deforma muy discreta y se les dijo que iban a un curso decapacitación a Coatzacoalcos, y ya estando en Veracruz lesdije la verdad, que en realidad al día siguiente íbamos aentrar al puerto con un plan de trabajo que se había armadocon semanas de anticipación, tocándonos la parte de recursos humanos,es decir, desde la contratación de los nuevos trabajadores hasta larepartición de los mismos a las tres empresas portuarias que se conformarían”,apunta González Rul, quien se convirtió en el primer director del puertodespués de la requisa (que en ese entonces el puesto era el de delegadode Puertos Mexicanos), y en el primer director de la AdministraciónPortuaria Integral (API) de ese mismo recinto.Como ya se dijo, se volvió a contratar al mismo personal que yalaboraba en el puerto, el cual fue evaluado y distribuido según sus cualidades.“La gente que siempre trabajó fue la que contrató la requisa yla dio de alta en los nuevos sindicatos; algunos de ellos son ahora hastaejecutivos de empresas maniobristas. La gente que no era operativa (losque subcontrataban gente en el esquema anterior) fue la que no se presentóa trabajar y no tuvo oportunidad de quedarse. Hubo personas deeste grupo que sí llegaron a ir, pero hubo cierto maltrato hacia ellos porparte de los trabajadores, eran vapuleados o empujados por los socios,fue una posición difícil para todos aquellos que habían hecho ese tipode prácticas”.De acuerdo con Jorge Lecona “el puerto en aquellos tiempos, sitenía como dos mil personas era mucho (realmente trabajando); ahoraestamos hablando de 10 a 15 mil personas, entonces, los que dicen queno se han generado fuentes de trabajo pues ahí están las cifras, lo que pasaes que actualmente se generan con volúmenes de carga, antes el puertoera súper ineficiente y metían la mano en una misma labor 15 personas,ahora lo optimizas todo pero con volúmenes de carga, como debe sucederen todas las actividades económicas”.Lo máximo quellegó a alcanzarel puerto de Veracruzfueron cuatromillones detoneladas,mientras el año pasadocerró en más de 15millonesDel dicho al hecho… se cubrió el trechoPara quienes les tocó vivir, de cerca o lejos, la requisa de Veracruz, los resultadosde lo que se buscaba están a la vista. Luego de ese acontecimiento, lagente involucrada se avocó a la preparación de un nuevo modelo portuarioque se concretó con la publicación de la Ley de Puertos de 1993, vigentehasta nuestros días, con la cual se dejó en manos del Estado la administraciónde los puertos bajo la figura de las APIs y se eliminaron las limitacionespara la inversión privada, para en adelante darles la operación y construcciónde terminales mediante concursos públicos, siendo la primera en ganar bajoese esquema, en 1995, Internacional de ContenedoresAsociados de Veracruz (ICAVE), que maneja la terminalespecializada para ese tipo de carga en el puerto.Con la requisa se “logró inversión, productividad,tomar un papel importante en el concierto internacional,que las grandes empresas, tanto navieras como operadorasportuarias, voltearan a México. En muelles de contenedorestenemos 400% más ahora, en muelles de granosdebemos tener 200% más y en muelles de cruceroshasta un 500% de incremento”, señala Ángel GonzálezRul, actualmente miembro de la consultora GEA-ISA ydirector general de Puertos de la SCT de 2003 a 2008.Asimismo, se estima que los salarios de los trabajadoresportuarios se elevaron entre 60 y 200% después de la requisa, al recibirde forma íntegra el pago por sus servicios y no sólo una parte como cuijes.En términos de volumen, antes de 1991, lo máximo que llegó aalcanzar el puerto de Veracruz fueron cuatro millones de toneladas, mientrasel año pasado cerró en más de 15 millones, lo que da cuenta del éxitode una transformación en donde no se ha tenido que recurrir a ningún rescatepor parte del gobierno federal, y por ende, del trabajo en que se vieroninmersas personas como las ya nombradas, a las que habría que agregarpor su participación en la requisa y por justicia a José Luis Murillo, enese momento Jefe de Puertos Mexicanos en Veracruz; a Jorge CruzBeauregard, director general de la Empresa de Servicios Portuarios existenteen esa época; a Juan José Sánchez Esqueda, que apoyó en esteevento desde la Ciudad de México y que después se convirtiera en directorde la API de Veracruz, y muchos otros más.“Hay que reconocer sobre todo –concluye Jorge Lecona- al trabajadorportuario, al de verdad, que está en los muelles y en los patios, puesse demostró que esa misma gente puede hacer cosas extraordinarias bajoun buen modelo de administración”.58 I <strong>T21</strong> <strong>Agosto</strong> 2009

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!