You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
DIALOGAR CON ÉL
Quien insista en decir que no le
pide nada a Dios, porque él "ya sabe lo
que necesitamos”, que recuerde esta
dea: el pedir con sensatez lo que realmente
necesitamos nos exige analizarnos
y conocernos interiormente
Por lo tanto, no es solo un modo de rogar
para recibir. Es una introspección
nteligente, que pone al descubierto
cómo estamos por dentro, y que nos
leva a nuestro Padre celestial para recibir
la fortaleza divina.
Así que, no descuides la buena
costumbre de orar y dialogar con
Dios, pensando que él "ya sabe lo
que necesitamos" Te voy a confesar
cómo es mi manera más común de
orar Dondequiera que me encuentre,
siempre dispongo de momentos
para hablar en silencio con Dios. Si
no puede ser en un lugar de quietud
y soledad, igualmente puedo hacerlo
rodeado de gente, durante un viaje
cualquiera, o bien cuando salgo a
caminar. Aun en medio el bullicio
ciudadano es posible conservar
un rincón de pa¿ interior; para
dialogar en silencio con Dios.
Y, en esos diálogos con
Dios, le digo lo que siento
y lo que anhelo, le ruego su
ayuda y le expreso mi gratitud Y
todo eso me da paz, aviva mi creatividad,
aumenta mi seguridad y
renueva mi optimismo No podría
vivir sin hablar con Dios, como
no podría vivir sin respirar. Uno
siempre se siente mejor cuando
termina de dialogar con el Señor,
porque siempre es posible percibir
su delicada voz hablando a la
conciencia
A
Te recomiendo afectuosamente que cultives el magnifico hábito de
orar y hablar con Dios, con tus palabras cotidianas, y con la mucha o poca fe
que tengas en tu corazón Te hará tanto bien que luego no querrás dejar de
orar por ninguna razón. Orar no cuesta nada, pero asegura los mejores dividendos
Y nadie te lo podría impedir, porque se trata de una acción íntima
y privada, si bien sus resultados pueden ser visibles a los ojos de los demás
Multiplica tu optimismo orando a Dios. ¡Haz la prueba! Serás así más fuerte,
más realista, más humilde, más diligente y más feliz. ¿Harás la prueba?
Proporciona
VIVIR CON OPTIMISMO...
Que existe la voluntad de probar una y otra vez,
para avanzar en la cuesta de la vida.
pensar en el éxito, e insistir positivamente hasta
alcanzarlo. (Lee de nuevo la oración del que
quería ser optimista.)
el poder espiritual que procede de la oración.
La verdadera oración es siempre optimista.
u '
•$€ O p + * Vv» * ^ ‘
Te irá mucho mejor
si intentas una vez más.
¡Haz la prueba' 137