11.04.2023 Views

Guerras de los Ángeles

Hay una contienda entre las fuerzas del bien y las del mal, entre los ángeles leales y los infieles. Cristo y Satanás no concuerdan y jamás podrán hacerlo. En cada época la verdadera iglesia de Dios ha librado una lucha contra las agencias del mal. Y esta pugna, entre los ángeles malignos y las personas malvadas, por un lado, contra los ángeles del cielo y los verdaderos creyentes, por el otro; ha de continuar hasta el fin del conflicto. Esta violenta batalla incrementará su fiereza a medida que se acerque el fin. A los que se han unido a los agentes satánicos, el Señor los ha designado como hijos de las tinieblas. No existe, ni podrá existir, enemistad natural entre los ángeles caídos y los seres humanos caídos. Ambos son malvados. Por causa de la apostasía ambos abrigan malos sentimientos. Los ángeles malvados y los impíos se han asociado en una confederación desesperada en contra del bien. Satanás sabía que si podía inducir a la raza humana a unirse con él y su rebelión, como lo había hecho con los ángeles, conformaría una poderosa fuerza con la cual podría llevar adelante su rebelión. En medio de las huestes del mal reina la irritación y las rencillas, sin embargo, todos están firmemente aliados en la lucha contra el Cielo.

Hay una contienda entre las fuerzas del bien y las del mal, entre los ángeles leales y los infieles. Cristo y Satanás no concuerdan y jamás podrán hacerlo. En cada época la verdadera iglesia de Dios ha librado una lucha contra las agencias del mal. Y esta pugna, entre los ángeles malignos y las personas malvadas, por un lado, contra los ángeles del cielo y los verdaderos creyentes, por el otro; ha de continuar hasta el fin del conflicto. Esta violenta batalla incrementará su fiereza a medida que se acerque el fin. A los que se han unido a los agentes satánicos, el Señor los ha designado como hijos de las tinieblas. No existe, ni podrá existir, enemistad natural entre los ángeles caídos y los seres humanos caídos. Ambos son malvados. Por causa de la apostasía ambos abrigan malos sentimientos. Los ángeles malvados y los impíos se han asociado en una confederación desesperada en contra del bien. Satanás sabía que si podía inducir a la raza humana a unirse con él y su rebelión, como lo había hecho con los ángeles, conformaría una poderosa fuerza con la cual podría llevar adelante su rebelión. En medio de las huestes del mal reina la irritación y las rencillas, sin embargo, todos están firmemente aliados en la lucha contra el Cielo.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Guerras</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>Ángeles</strong><br />

palabra: “Victoria”. Ceñía sus sienes una brillante guirnalda blanca con hojas, en el centro<br />

<strong>de</strong> cada una <strong>de</strong> las cuales se leía: “Pureza”. Alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> la guirnalda había piedras<br />

preciosas <strong>de</strong> diversos colores que resplan<strong>de</strong>cían más vivamente que las estrellas y,<br />

reflejando su fulgor en las letras, las magnificaban. En la parte posterior <strong>de</strong> la cabeza<br />

llevaba un moño que sujetaba la guirnalda, y en él estaba escrita la palabra: “Santidad”.<br />

Sobre la guirnalda ceñía Enoc una corona más brillante que el sol. Le pregunté si aquel<br />

era el lugar adon<strong>de</strong> lo habían transportado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la tierra. El me respondió: “No es éste.<br />

Mi morada es la ciudad, y he venido a visitar este sitio”.—Primeros Escritos, 39-40.<br />

{VAAn 72.2}<br />

Enoc representa a aquel<strong>los</strong> que permanecerán sobre la tierra y serán trasladados sin ver<br />

la muerte; representa a <strong>los</strong> que vivirán en medio <strong>de</strong> <strong>los</strong> peligros <strong>de</strong> <strong>los</strong> últimos días,<br />

aquel<strong>los</strong> que serán ro<strong>de</strong>ados <strong>de</strong> la corrupción, vileza, pecado e iniquidad, y sin embargo<br />

se mantendrán inmaculados. Po<strong>de</strong>mos hacerlo como lo hizo Enoc. Se ha hecho provisión<br />

para nosotros... Angeles <strong>de</strong> Dios que exce<strong>de</strong>n en fortaleza son enviados a ministrar en<br />

favor <strong>de</strong> aquel<strong>los</strong> que serán here<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> la salvación. Cuando estos ángeles ven que<br />

estamos haciendo todo lo que está <strong>de</strong> nuestra parte para ser vencedores, entonces hacen<br />

su parte, y su luz brilla a nuestro alre<strong>de</strong>dor disipando la influencia <strong>de</strong> <strong>los</strong> ma<strong>los</strong> ángeles<br />

que nos ro<strong>de</strong>an. Crean una muralla como <strong>de</strong> fuego alre<strong>de</strong>dor nuestro.—The Review and<br />

Herald, 19 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1870. {VAAn 73.1}<br />

Noé<br />

Aquel<strong>los</strong> que vivieron en <strong>los</strong> días <strong>de</strong> Noé y Abrahán fueron más parecidos a <strong>los</strong> ángeles<br />

en forma, gracia y fuerza. Des<strong>de</strong> entonces, cada generación se ha ido <strong>de</strong>bilitando.—<br />

Spiritual Gifts 1:69. {VAAn 73.2}<br />

Más <strong>de</strong> cien años antes <strong>de</strong>l diluvio el Señor envió un ángel al fiel Noé para hacerle<br />

saber que no tendría más misericordia <strong>de</strong> <strong>los</strong> miembros <strong>de</strong> la raza corrupta. Pero no quería<br />

que ignoraran su propósito. Instruiría a Noé y lo transformaría en un fiel predicador para<br />

advertir al mundo acerca <strong>de</strong> la <strong>de</strong>strucción que se avecinaba, a fin <strong>de</strong> que <strong>los</strong> habitantes <strong>de</strong><br />

la tierra no tuvieran excusa... {VAAn 73.3}<br />

Se enviaron ángeles para reunir en <strong>los</strong> bosques y <strong>los</strong> campos a <strong>los</strong> animales que Dios<br />

había creado.—La Historia <strong>de</strong> la Re<strong>de</strong>nción, 64-67. {VAAn 74.1}<br />

Los ángeles buscaron a <strong>los</strong> animales y éstos <strong>los</strong> siguieron <strong>de</strong> dos en dos, macho y<br />

hembra, y <strong>de</strong> siete en siete, <strong>los</strong> animales limpios.—Spiritual Gifts 3:67. {VAAn 74.2}<br />

Todo estaba listo entonces para cerrar el arca, cosa que Noé no podía hacer <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su<br />

interior. La mofadora multitud vio un ángel que <strong>de</strong>scendió <strong>de</strong>l cielo revestido <strong>de</strong> un<br />

resplandor semejante al <strong>de</strong> un relámpago. Cerró la maciza puerta exterior, y emprendió <strong>de</strong><br />

nuevo su viaje rumbo al cielo.—La Historia <strong>de</strong> la Re<strong>de</strong>nción, 68. {VAAn 74.3}<br />

Llega el diluvio<br />

38

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!