08.08.2015 Views

Rayuela: el París de Cortázar - El País

Rayuela: el París de Cortázar - El País

Rayuela: el París de Cortázar - El País

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

día me escapé. A tal punto que […] cuandoClau<strong>de</strong> Namer y Alain Carof quisieron hacer unap<strong>el</strong>ícula sobre mí, previeron una escena en <strong>el</strong>Jardin <strong>de</strong>s Plantes para mostrar a los axolotl.Pero no me pudieron convencer <strong>de</strong> que volviera.No. Me enfocaron saliendo <strong>de</strong> un pab<strong>el</strong>lón queno era ése, caminando, e hicieron un trucocinematográfico. Carof entendió perfectamente”.Colette Portal es autora <strong>de</strong> un retrato <strong>de</strong> Cortázaren ese escenario. Por lo <strong>de</strong>más, no he vistocitado nunca en <strong>el</strong> contexto cortazariano, unbreve y extrañísimo r<strong>el</strong>ato <strong>de</strong> Raphaël Pividal,“Les axolotls”, publicado en 1965 en <strong>el</strong> nº 24-25 <strong>de</strong> Réalités Secrètes, la revista <strong>de</strong> Marc<strong>el</strong>Béalu y René Rougerie, y con <strong>el</strong> cual me hetropezado por azar durante las semanas en queredactaba este diccionario, y en que Cortázar meperseguía por las calles <strong>de</strong> París.Jarry, Alfred. Hay una referencia explícita a Jarryen otro capítulo anterior <strong>de</strong> <strong>Rayu<strong>el</strong>a</strong>, pero la másdivertida figura en <strong>el</strong> capítulo <strong>de</strong> Berthe Trépat:“Berthe Trépat avanzaba lentamente, moviendola cabeza a un lado y otro. Con la caperuza d<strong>el</strong>impermeable tenía un aire entre guerrero y UbuRoi”. En La vu<strong>el</strong>ta al día en ochenta mundos,en “D<strong>el</strong> sentimiento <strong>de</strong> no estar d<strong>el</strong> todo” sereproduce un grabado ubuesco. Cortázar aLuis Harss: “Des<strong>de</strong> muy joven admiré la actitudpersonal y literaria <strong>de</strong> Alfred Jarry. Jarry se dioperfecta cuenta <strong>de</strong> que las cosas más gravespue<strong>de</strong>n ser exploradas mediante <strong>el</strong> humor; <strong>el</strong><strong>de</strong>scubrimiento y la utilización <strong>de</strong> la patafísicaes justamente tocar fondo por la vía d<strong>el</strong> humornegro. Pienso que eso <strong>de</strong>bió influir mucho en mimanera <strong>de</strong> ver <strong>el</strong> mundo, y siempre he creídoque <strong>el</strong> humor es una <strong>de</strong> las cosas más seriasque existen”. Y un poco más ad<strong>el</strong>ante: “Unabuena página <strong>de</strong> Jarry me incita mucho más qu<strong>el</strong>as obras completas <strong>de</strong> La Bruyère”. Y aña<strong>de</strong> queestá <strong>de</strong> acuerdo con “<strong>el</strong> gran principio patafísico<strong>de</strong> Jarry” <strong>de</strong> que “lo verda<strong>de</strong>ramente interesanteno son las leyes sino las excepciones”. Y <strong>de</strong> supropia cosecha: “<strong>El</strong> poeta <strong>de</strong>be <strong>de</strong>dicarse a lacaza <strong>de</strong> excepciones y <strong>de</strong>jarles las leyes a loshombres <strong>de</strong> ciencia y a los escritores serios”.A Sara Castro-Klaren, en su entrevista <strong>de</strong>Cua<strong>de</strong>rnos Hispanoamericanos: “La obra <strong>de</strong> unAlfred Jarry, con todo lo que tiene <strong>de</strong> mediocre enmuchos planos, alcanza en algunas instanciaslo que no consiguen las obras completas <strong>de</strong>François Mauriac”. Y a Omar Prego: figuras comoJarry, “más vivas quizá que un Maupassant oMérimée”. (Guy <strong>de</strong> Maupassant: su r<strong>el</strong>ato LeHorla es una <strong>de</strong> las fuentes <strong>de</strong> inspiración <strong>de</strong>“Distante espejo”, en La otra orilla).Jazz. Cortázar habla ya <strong>de</strong> jazz en sus cartasjuveniles. Su <strong>de</strong>scubrimiento <strong>de</strong> esa músicadata, como lo explicó en innumerablesocasiones, <strong>de</strong> 1933. En Presencia, un poematitulado “Jazz”. En <strong>El</strong> examen, esta divertidasilueta: “Afuera se encontraron con PinchoLópez Morales, técnico en hot jazz y poesía <strong>de</strong>Xavier Villaurrutia”. En <strong>Rayu<strong>el</strong>a</strong> <strong>el</strong> jazz, tanto susclásicos como sus renovadores d<strong>el</strong> “bebop”y más allá, es una presencia constante,especialmente en los primeros capítulos,en los cuales constituye <strong>el</strong> fondo sonorohabitual d<strong>el</strong> Club <strong>de</strong> la Serpiente, uno <strong>de</strong>97

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!