08.05.2013 Views

CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA - La Pastoral Familiar es

CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA - La Pastoral Familiar es

CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA - La Pastoral Familiar es

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

1483 En casos de nec<strong>es</strong>idad grave se puede recurrir a la celebración comunitaria de la<br />

reconciliación con conf<strong>es</strong>ión general y absolución general. Semejante nec<strong>es</strong>idad grave<br />

puede pr<strong>es</strong>entarse cuando hay un peligro inminente de muerte sin que el sacerdote o los<br />

sacerdot<strong>es</strong> tengan tiempo suficiente para oír la conf<strong>es</strong>ión de cada penitente. <strong>La</strong><br />

nec<strong>es</strong>idad grave puede existir también cuando, teniendo en cuenta el número de<br />

penitent<strong>es</strong>, no hay bastant<strong>es</strong> conf<strong>es</strong>or<strong>es</strong> para oír debidamente las conf<strong>es</strong>ion<strong>es</strong><br />

individual<strong>es</strong> en un tiempo razonable, de manera que los penitent<strong>es</strong>, sin culpa suya, se<br />

verían privados durante largo tiempo de la gracia sacramental o de la sagrada comunión.<br />

En <strong>es</strong>te caso, los fiel<strong>es</strong> deben tener, para la validez de la absolución, el propósito de<br />

conf<strong>es</strong>ar individualmente sus pecados grav<strong>es</strong> en su debido tiempo (CIC can. 962,1). Al<br />

obispo dioc<strong>es</strong>ano corr<strong>es</strong>ponde juzgar s i existen las condicion<strong>es</strong> requeridas para la<br />

absolución general (CIC can. 961,2). Una gran concurrencia de fiel<strong>es</strong> con ocasión de<br />

grand<strong>es</strong> fi<strong>es</strong>tas o de peregrinacion<strong>es</strong> no constituyen por su naturaleza ocasión de la<br />

referida nec<strong>es</strong>idad grave.<br />

1484 "<strong>La</strong> conf<strong>es</strong>ión individual e íntegra y la absolución continúan siendo el único modo<br />

ordinario para que los fiel<strong>es</strong> se reconcilien con Dios y la Igl<strong>es</strong>ia, a no ser que una<br />

imposibilidad física o moral excuse de <strong>es</strong>te modo de conf<strong>es</strong>ión" (OP 31). Y <strong>es</strong>to se<br />

<strong>es</strong>tablece así por razon<strong>es</strong> profundas. Cristo actúa en cada uno de los sacramentos. Se<br />

dirige personalmente a cada uno de los pecador<strong>es</strong>: "Hijo, tus pecados <strong>es</strong>tán perdonados"<br />

(Mc 2,5); <strong>es</strong> el médico que se inclina sobre cada uno de los enfermos que tienen<br />

nec<strong>es</strong>idad de él (cf Mc 2,17) para curarlos; los r<strong>es</strong>taura y los devuelve a la comunión<br />

fraterna. Por tanto, la conf<strong>es</strong>ión personal <strong>es</strong> la forma más significativa de la<br />

reconciliación con Dios y con la Igl<strong>es</strong>ia.<br />

R<strong>es</strong>umen<br />

1485 En la tarde de Pascua, el Señor J<strong>es</strong>ús se mostró a sus apóstol<strong>es</strong> y l<strong>es</strong> dijo:<br />

"Recibid el Espíritu Santo. A quien<strong>es</strong> perdonéis los pecados, l<strong>es</strong> quedan perdonados; a<br />

quien<strong>es</strong> se los retengáis, l<strong>es</strong> quedan retenidos" (Jn 20, 22-23).<br />

1486 El perdón de los pecados cometidos d<strong>es</strong>pués del Bautismo <strong>es</strong> concedido por un<br />

sacramento propio llamado sacramento de la conversión, de la conf<strong>es</strong>ión, de la<br />

penitencia o de la reconciliación.<br />

1487 Quien peca l<strong>es</strong>iona el honor de Dios y su amor, su propia dignidad de hombre<br />

llamado a ser hijo de Dios y el bien <strong>es</strong>piritual de la Igl<strong>es</strong>ia, de la que cada cristiano<br />

debe ser una piedra viva.<br />

1488 A los ojos de la fe, ningún mal <strong>es</strong> más grave que el pecado y nada tiene peor<strong>es</strong><br />

consecuencias para los pecador<strong>es</strong> mismos, para la Igl<strong>es</strong>ia y para el mundo entero.<br />

1489 Volver a la comunión con Dios, d<strong>es</strong>pués de haberla perdido por el pecado, <strong>es</strong> un<br />

movimiento que nace de la gracia de Dios, rico en misericordia y d<strong>es</strong>eoso de la<br />

salvación de los hombr<strong>es</strong>. Es preciso pedir <strong>es</strong>te don precioso para sí mismo y para los<br />

demás.<br />

1490 El movimiento de retorno a Dios, llamado conversión y arrepentimiento, implica<br />

un dolor y una aversión r<strong>es</strong>pecto a los pecados cometidos, y el propósito firme de no

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!