Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina
Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina
Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
A esto se aña<strong>de</strong> también la dificultad <strong>de</strong> tener que prestar atención a la larga<br />
duración <strong>de</strong> cada conflicto, don<strong>de</strong> y <strong>de</strong> que modo (si solo o en constelación), si está<br />
permitido buscar <strong>una</strong> solución y en caso positivo, si tiene que ser <strong>una</strong> solución total o<br />
sólo parcial, y así todo.<br />
La “solución” actualmente es, en términos biológicos, capturar al lobo alfa, que<br />
ha sido privado <strong>de</strong> su manada, se ha vuelto violento y se ha puesto a robar al no<br />
tener la posibilidad <strong>de</strong> cazar con la manada, y encerrarlo en un pequeño recinto en<br />
el “zoo” don<strong>de</strong> se le da el alimento. De verdad que esto no pue<strong>de</strong> ser sensato ni ser<br />
la solución <strong>de</strong>l problema.<br />
La otra gran dificultad, como ya se ha dicho, es tener que tratar con <strong>una</strong> justicia<br />
que hasta ahora es completamente ignorante <strong>de</strong> este modo biológico <strong>de</strong> pensar. En<br />
el futuro habrá que cambiar las cosas fundamentales.<br />
Otro problema es el hecho <strong>de</strong> que el criminal y el paciente es toxicómano, como<br />
lo son en prisión más o menos el 82% <strong>de</strong> los <strong>de</strong>tenidos. Esta es <strong>una</strong> horrorosa<br />
realidad que no se toma a la ligera. La situación global es tan complicada que no se<br />
pue<strong>de</strong> resolver tratando simplemente los síntomas. Hace falta un modo <strong>de</strong> pensar<br />
diferente e innovador que comience todo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el principio.<br />
Todos se lamentan y acusan al estado <strong>de</strong> la ineficacia <strong>de</strong> nuestra justicia y <strong>de</strong>l<br />
sistema penal. Los escándalos se siguen uno tras otro. Cada vez es más evi<strong>de</strong>nte<br />
que ni siquiera la psiquiatría legal tiene ning<strong>una</strong> base para expresar juicios o<br />
diagnósticos y pronósticos sobre los criminales y obviamente, tampoco pue<strong>de</strong><br />
ofrecer garantías <strong>de</strong> que estos se conviertan en reinci<strong>de</strong>ntes. Ahora po<strong>de</strong>mos meter<br />
mano a todas estas cosas con <strong>una</strong> base notablemente más eficiente (y sobretodo<br />
comprobable <strong>de</strong> un modo objetivo) con el conocimiento y la ayuda <strong>de</strong> las<br />
correlaciones y las leyes biológicas <strong>de</strong> la <strong>Nueva</strong> <strong>Medicina</strong>.<br />
Aquí se ofrece <strong>una</strong> vía <strong>de</strong> salida sin tener que seguir recurriendo a expedientes<br />
para intentar tapar los problemas en base a los síntomas.<br />
Necesitamos <strong>de</strong> un cambio radical <strong>de</strong> nuestra sociedad. Tenemos que apren<strong>de</strong>r<br />
a enten<strong>de</strong>r <strong>de</strong> nuevo las reglas <strong>de</strong> la naturaleza. Cualquier animalillo conoce el<br />
funcionamiento <strong>de</strong>l propio ser, ¿solo a nosotros, tontos hombres, no nos hace falta?<br />
En nuestro último caso el paciente sueña <strong>una</strong> solución: le apasiona conducir<br />
motos. En Portugal existe un club para motoristas que viven <strong>de</strong> “modo autónomo” y a<br />
él le gustaría irse allí. Actualmente eso podría ser <strong>una</strong> solución perfecta, pero no a la<br />
larga. También allí hay tomates, pepinos y “medios gitanos”. Inevitablemente en la<br />
primera ocasión recaería en sus vías, aunque pudiera alejarse <strong>de</strong> aquí legalmente.<br />
Antes que nada se <strong>de</strong>berían elaborar y resolver algunos conflictos.<br />
Conclusiones:<br />
Para mí ha vuelto a ser como cuando <strong>de</strong>scubrí el cáncer y las otras<br />
<strong>de</strong>nominadas “enfermeda<strong>de</strong>s” <strong>de</strong> la medicina.<br />
En 1981 creía haber <strong>de</strong>scubierto que la causa <strong>de</strong>l cáncer fuese un<br />
“cortocircuito” en el cerebro. Eso era mitad correcto, mitad erróneo. En verdad,<br />
incluso habiendo <strong>de</strong>scubierto <strong>una</strong> cosa correcta, me di cuenta <strong>de</strong> que no se trataba<br />
<strong>de</strong> un “cortocircuito”: era la activación <strong>de</strong> un programa especial, biológico y con<br />
sentido <strong>de</strong> la naturaleza lo que yo había encontrado. En 1981 sostenía que la madre<br />
naturaleza cometiese continuamente errores, al igual que todos nosotros, con<br />
nuestra loca arrogancia, hemos aprendido y enseñado en la universidad.<br />
También en este caso había intentado explorar la causa <strong>de</strong> los “<strong>de</strong>litos<br />
espontáneos” alejándome <strong>de</strong> todas las doctrinas corrientes.<br />
268