08.05.2013 Views

Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina

Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina

Ryke Geerd Hamer – El testamento de una Nueva Medicina

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

explicar bien (prescindiendo <strong>de</strong>l suceso cromosómico) todos los sucesos y los<br />

síntomas <strong>de</strong>l síndrome <strong>de</strong> Down <strong>de</strong> nuestra pequeña paciente. Naturalmente con la<br />

ayuda <strong>de</strong> la historia evolutiva, pero eso en la <strong>Nueva</strong> <strong>Medicina</strong> es tan obvio que no<br />

hace falta <strong>una</strong> mención particular. Esto significa que también tenemos que poner los<br />

síntomas en relación con el momento <strong>de</strong> los conflictos durante el embarazo.<br />

¿Hemos explicado así el síndrome <strong>de</strong> Down? Todavía no. Pero si se consigue<br />

explicar, por ejemplo 10 casos <strong>de</strong> mongolismo <strong>de</strong> este modo coherente y completo,<br />

ya no existirá un “síndrome <strong>de</strong> Down”, sino que encontraremos <strong>una</strong> cierta semejanza<br />

externa <strong>de</strong> la sintomatología cada 100 o 500 casos en el ámbito <strong>de</strong> la inci<strong>de</strong>ncia<br />

normal <strong>de</strong> diferentes conflictos y constelaciones conflictivas, <strong>de</strong> hecho también el<br />

<strong>de</strong>nominado “síndrome <strong>de</strong> Down” no afirma nada diferente.<br />

Entonces, ¿sería sólo <strong>una</strong> cuestión académica la que presentamos aquí, <strong>una</strong><br />

disputa sobre nomenclatura y <strong>de</strong>finición? No, esta nueva visión tendría realmente<br />

consecuencias enormes. De hecho sabemos como tenemos que tratar los conflictos<br />

biológicos.<br />

Yo no soy ni un presuntuoso ni un soñador <strong>de</strong> la medicina. En mis cuarenta<br />

años <strong>de</strong> actividad médica he visto cientos <strong>de</strong> estos pobres niños con síndrome <strong>de</strong><br />

Down y trisomia <strong>de</strong> todos los tipos como para sostener ahora que es fácil curar a un<br />

niño mongoloi<strong>de</strong> <strong>de</strong> tal manera que vuelva a ser prácticamente normal. Para esto es<br />

necesaria también la familia, en particular la madre. Obviamente no sabemos<br />

todavía lo que es reversible y lo que ya no lo es. Sin embargo ahora sabemos al<br />

menos don<strong>de</strong> tenemos que intervenir, aunque conlleve siempre un trabajo muy duro<br />

po<strong>de</strong>r llevar a <strong>una</strong> persona así, junto con la familia y los terapeutas implicados, en la<br />

dirección correcta. Por <strong>una</strong> parte esto no parece posible en muchos conflictos, por<br />

otra está la esperanza fundada <strong>de</strong> que ahora existe <strong>una</strong> verda<strong>de</strong>ra ayuda causal,<br />

con fuerzas insospechadas, disponibles en los parientes que antes no se habría<br />

consi<strong>de</strong>rado posible por cuando el pronóstico <strong>de</strong> “incurable” era <strong>de</strong>vastador. Una vez<br />

que los padres están bien informados, posiblemente bien aconsejados por un<br />

“maestro” <strong>de</strong> la <strong>Nueva</strong> <strong>Medicina</strong>, entonces probablemente será difícil parar su<br />

iniciativa positiva. Después es labor <strong>de</strong> los terapeutas dirigir todas estas buenas<br />

iniciativas por las vías correctas. En todos los casos se <strong>de</strong>stierra por primera vez la<br />

<strong>de</strong>sesperación.<br />

8.1.1. Consi<strong>de</strong>raciones teóricas sobre las alteraciones cromosómicas.<br />

Si en nuestra psique se produce un conflicto biológico e irrumpe un programa<br />

especial, biológico y sensato, también en el cerebro y en el órgano suce<strong>de</strong> en<br />

sincronía algo correspondiente. Estas cosas las sabemos ya con precisión. ¿Pero<br />

qué es lo que suce<strong>de</strong> realmente en el órgano? Un cáncer o <strong>una</strong> enfermedad<br />

oncoequivalente o <strong>una</strong> necrosis. Sabemos que existe un <strong>de</strong>nominado cerebro <strong>de</strong>l<br />

órgano en el que evi<strong>de</strong>ntemente oscilan las ondas circulares con la misma<br />

frecuencia que en el cerebro, <strong>de</strong> hecho vemos los Focos <strong>de</strong> <strong>Hamer</strong> también en el<br />

órgano si eso ha sucedido. Sería justo pensar que son los pequeños cerebros<br />

celulares con sus cromosomas y genes lo que hacen oscilar el cerebro <strong>de</strong>l órgano<br />

con la misma frecuencia que en los Focos <strong>de</strong> <strong>Hamer</strong> en el cerebro. De hecho los<br />

núcleos celulares constituyen el cerebro <strong>de</strong>l órgano.<br />

Ahora sabemos <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace tiempo que, por ejemplo, las células cancerosas<br />

a<strong>de</strong>noi<strong>de</strong>as <strong>de</strong> las glándulas mamarias, que están <strong>de</strong>stinadas a ser utilizadas <strong>una</strong><br />

sola vez, genéticamente son diferentes respecto a las <strong>de</strong>nominadas células<br />

autóctonas <strong>de</strong> las glándulas mamarias que subsisten tras la TBC <strong>de</strong> la fase PCL,<br />

299

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!