MINISTERIOS L ID ERA Z G O ESP IRITU A L Y ... - MINTS español
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11. ¿Es importante el juicio de la iglesia en el reconocimiento del llamamiento y<br />
vocación ministerial de un varón que diga ser llamado para ello?<br />
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Lo dicho hasta aquí podría bastaros, pero puedo presentar a vuestra consideración el<br />
mismo asunto si os pormenorizo algo de la experiencia que he adquirido en mi trato con<br />
los aspirantes al ministerio. Tengo que llenar constantemente el deber que caía en suerte a<br />
ciertos empleados de Cromwell llamados Triers o probadores. Tengo que formar una<br />
opinión en cuanto a la cordura de ayudar a ciertos hombres en sus tentativas para hacerse<br />
pastores. Este es un deber de suma responsabilidad, y el desempeño del cual requiere un<br />
cuidado nada común No me constituyo, por supuesto, en juez para fallar si un hombre<br />
debe ingresar o no al pastorado; sino que mi examen lleva meramente por mira contestar<br />
a la pregunta de si esta institución tiene que ayudarle o que abandonarle a sus propios<br />
esfuerzos.<br />
Algunos de nuestros caritativos vecinos nos acusan de tener aquí una fábrica de pastores,<br />
pero semejante cargo no es cierto absolutamente. Nunca hemos tratado de hacer un<br />
ministro, y fracasaríamos si tal pretendiéramos: no recibimos en el Colegio sino a los que<br />
profesan el ser ministros ya. Se acercarían más a la verdad los que me llamaran destructor<br />
de pastores, porque un buen número de principiantes han sido desahuciados por mí, y<br />
tengo enteramente tranquila la conciencia al reflexionar en lo que así he hecho. Ha sido<br />
siempre para mí una tarea penosa el desanimar a un hermano joven y lleno de esperanza<br />
que ha solicitado su admisión al Colegio. Mi corazón se ha inclinado siempre al lado de<br />
la condescendencia, pero mi deber para con las iglesias me ha obligado a juzgar con toda<br />
imparcialidad. Después de oír lo que el candidato ha tenido que decir, de leer sus excusas,<br />
y de hacerme cargo de sus respuestas a mis preguntas, si ha entrado en mi ánimo la<br />
convicción de que el Señor no lo había llamado, me he visto precisado a manifestárselo<br />
así. Algunos de esos casos pueden ser tipos de todos. Se presentan algunos jóvenes que<br />
ardientemente desean entrar al ministerio, pero con pena se ve trasparentárseles el motivo