Crimen Pedido

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Crimen Pedido
Al día siguiente Gary dio un banquete en su mansión de Valencia.
Es costumbre en él después de cerrar un negocio. Los invitados fueron
vestidos de etiqueta, él les dio la bienvenida y la fiesta continuó.
—¡Honey te estaba buscando!
—No tenía ni la menor idea de que pudiera contemplarse un paisaje
similar en esta ciudad.
—Gary nos está esperando en su despacho.
—¡Ya era hora! La verdad estoy agotada y necesito dormir, ya son
casi las dos de la madrugada.
—No te preocupes, me he encargado de darle el mensaje y por eso
ha accedido a reunirnos más temprano.
—Bien, después de tanto trabajo y estrategias durante éstos meses
en Venezuela creo que nos merecemos un descanso.
—Que te puedo decir yo… ya estoy soñando con volver a mi cama,
despertarme y salir al balcón para disfrutar de la vista parisina.
Athina suelta una prudente carcajada- Liar a veces eres demasiado
poético para mi gusto, sin embargo tus palabras no me disgustan, al
contrario… ¡me hacen rejuvenecer! —culmina ella con una radiante sonrisa
abrazándolo para que la dirija hacia el despacho de Gary quien los espera
para proceder a hacer la transferencia del dinero. Snare les invita a entrar
y se queda afuera por órdenes de su jefe que saluda a Athina y a Liar y les
pregunta qué tal ha ido la velada, por lo que aprovecha para disculparse
por no haberse reunido hasta ahora, pero en fin, tenía cosas que resolver.
—Me ha dicho Snare que está todo listo y sólo hace falta llenar el
conteiner.
—Así es, yo misma supervisé el embalaje, por lo que ninguna de las
obras sufrirá daño alguno.
—Aquí tienes el justificante de la transferencia por el monto
acordado, el resto en Italia y espero entregártelo personalmente y así te