05.06.2013 Views

descargar PDF (7,89 Mb.) - Diverdi

descargar PDF (7,89 Mb.) - Diverdi

descargar PDF (7,89 Mb.) - Diverdi

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

“Mahler es mi<br />

compositor favorito.<br />

Comprende<br />

totalmente mi estado<br />

de ansiedad, mis<br />

sentimientos, mis<br />

temores...”<br />

Me alegra haber estado trabajando todo esto.<br />

Tengo una personalidad fuerte pero también soy<br />

disciplinada, y mi maestro sabe también que todas<br />

las notas a las que estoy llegando me las he ganado.<br />

El trabajo no ha concluido, desde luego, y sé que<br />

no soy perfecta, pero me gusta el camino que he<br />

escogido y espero que me abra otras puertas.<br />

D.: Entonces, ¿qué tipo de repertorio le interesará<br />

en el futuro?<br />

M-N. L.: Como le he dicho, mi sueño era Eboli. Ya<br />

veremos. Esperaré. Antes de eso está la Charlotte<br />

del Werther, que es mi ópera francesa preferida.<br />

Como sé que tengo que planificar con antelación<br />

esta línea de trabajo, además de Charlotte hay<br />

papeles, como Carmen o Dalila, que creo que seré<br />

capaz de cantar en unos pocos años. Y como mi<br />

voz se está volviendo un poco más libre, hay otros<br />

roles de Verdi y Rossini que se pueden añadir. El<br />

caso de Rossini resulta divertido porque con él<br />

descubrí el placer de tener tiempo para respirar<br />

antes de hacer coloratura, tiempo que no tenemos<br />

en la música barroca, porque en ella la voz recibe<br />

un tratamiento instrumental. Hay veces en Haendel<br />

que no tienes tiempo para respirar. Con Rossini,<br />

aunque has de trabajar el legato, dispones de margen<br />

para respirar, ¡y resulta maravilloso! Además<br />

puedes cantar más alto y más bajo porque te concede<br />

tiempo para cantar.<br />

D.: ¿Qué más le apetece dentro del Lied y la mélodie?<br />

M-N. L.: Pues Mahler, porque es mi compositor<br />

favorito. A mi parecer, Mahler comprende totalmente<br />

mi estado de ansiedad, mis sentimientos, mis<br />

temores... Cuando escucho Mahler percibo que,<br />

como persona, no estoy sola. Por otro lado, también<br />

me gustaría cantar Duparc y más mélodie,<br />

más Brahms..., ¡hay tantas cosas! Todo esto es bueno<br />

y positivo, pues el repertorio de contralto no es<br />

tan extenso como el de soprano. En cierto modo<br />

se me permite abordar todos esos estilos de los<br />

que he hablado, lo cual me abre muchas opciones.<br />

Tampoco diría que no a otro álbum de Vivaldi,<br />

pues es un autor al que siempre me gusta volver y<br />

hacer en escena, y estoy convencida de que puedo<br />

transmitirlo realmente bien.<br />

portada / ópera 218 / octubre 2012<br />

Traducción: José Velasco<br />

Toda la discografía<br />

de Marie-Nicole Lemieux en<br />

Una estrella en Canadá<br />

Un revelador recital de Marie-Nicole Lemieux<br />

con arias de Gluck, Graun, Haydn y Mozart<br />

La canadiense Marie-Nicole Lemieux (Dolbeau-<br />

Mistassini, 1975) saltó a la fama cuando se impuso<br />

en el año 2000 en el célebre concurso<br />

internacional Reina Isabel de Bruselas. Su debut<br />

operístico se retrasó aún hasta 2002: fue en un<br />

Julio César haendeliano protagonizado junto a Ewa<br />

Podles, Daniel Taylor y Brian Asawa, entre otros,<br />

que iba a ser indicativo del repertorio por el que<br />

más se ha significado en estos años, especialmente<br />

en el terreno discográfico: el mundo del Barroco,<br />

que ha compaginado con absoluta flexibilidad con<br />

la ópera belcantista (ha cantado bastante Rossini)<br />

y romántica (tiene incluso una Flosshilde en su<br />

haber), el lied (de Schumann a Mahler), la mélodie<br />

(de Berlioz a Hahn) o la canción del siglo XX<br />

(incluidos algunos compositores ingleses, el trío<br />

dodecafónico vienés y Falla). Los seguidores de la<br />

Vivaldi Edition de Naïve la conocen sin duda bien,<br />

pues ha protagonizado hasta la fecha las grabaciones<br />

de La fida ninfa, Griselda y Orlando furioso,<br />

cuyo registro en DVD puede contarse como uno<br />

de los mayores triunfos en materia vivaldiana de<br />

los que yo tenga memoria.<br />

Contralto en quien algunos quieren ver a la<br />

sucesora de su compatriota Maureen Forrester<br />

(aunque hay quien dice que en realidad es una mezzosoprano<br />

con sólidos graves, qué más da),<br />

Lemieux es una de esas cantantes que saben hacerse<br />

distinguir por un timbre particular, en el que se<br />

aúnan sin contradicción la perfecta homogeneidad<br />

con una notable riqueza de colores, que dosifica<br />

con inteligencia. El registro es ancho, con<br />

graves que no alcanzan la oscura penetración de<br />

las más grandes de su cuerda, pero poderosos y bien<br />

colocados, y agudos limpios y firmes, con apreciable<br />

facilidad para las agilidades. Su último disco<br />

para Naïve está dedicado al Clasicismo e incluye<br />

piezas de Mozart, Haydn, Gluck y Carl Heinrich<br />

Graun, de quien se ofrece una larguísima aria de<br />

Montezuma, donde la canadiense muestra una de<br />

sus grandes virtudes: la exquisita musicalidad, la<br />

tersura del fraseo, que, apoyado en un refinado<br />

legato, llena de detalles de articulación y de reguladores.<br />

Su voz desde luego se siente cómoda en<br />

la franja central del registro y en los requerimien-<br />

19<br />

Pablo J. Vayón<br />

tos de las piezas más expresivas, aunque hay quien<br />

pueda echar de menos algo más de calor en un<br />

fragmento que requiere tanto sentimiento como el<br />

“Che farò senza Euridice” de Gluck, que ornamenta<br />

con sutileza, o algo más de picardía en el<br />

“Voi, che sapete” mozartiano, cantado con una<br />

delicadeza extraordinaria, aunque quizás sin penetrar<br />

del todo la naturaleza adolescente del confuso<br />

Cherubino.<br />

En el aria de Sesto del segundo acto de La<br />

clemencia de Tito, Lemieux vuelve a mostrar sus<br />

dotes para el canto spianato: todo está dicho a flor<br />

de labios, con una asombrosa facilidad para matizar<br />

cada palabra en materia de volumen y de color.<br />

El contraste con el “Venga pur, minacci e frema”<br />

del juvenil Mitridate es notable: aunque sin llegar<br />

a la exuberancia extrema de una Bartoli, las articulaciones<br />

resultan mucho más marcadas y la ornamentación<br />

es mucho más profusa, lo que puede<br />

aplicarse también al aria de La Betulia liberada,<br />

cuyas exigencias virtuosísticas encuentran una respuesta<br />

de una apabullante seguridad y, como siempre,<br />

de gran diversidad en el tratamiento del color.<br />

Sin salir de Mozart, resultan impresionantes los<br />

graves del arranque del aria de concierto Ombra felice!<br />

Io ti lascio, que se hace verdaderamente intensa<br />

en su parte mas dramática, aunque en este<br />

terreno la palma se la lleva el “Jupiter, lance la foudre”<br />

que canta la Clitemnestra de la Ifigenia en<br />

Áulide de Gluck, con un recitativo cargado de fuerza<br />

y de mordiente y un canto declamado de eficaz<br />

y arrolladora fogosidad. La expresión se dulcifica<br />

en los dos fragmentos haydnianos, se hace melancólica<br />

en el aria de La isla deshabitada y marcial<br />

pero ligera en El regreso de Tobías.<br />

Bernard Labadie acompaña atentísimo a cada<br />

inflexión de la voz al frente de Les Violons du Roy,<br />

uno de esos pocos conjuntos que, con instrumentos<br />

modernos, se han ganado la confianza y el aprecio<br />

de hasta el más radical defensor del<br />

historicismo. Su estilo, afirmativo e intenso, es<br />

incluso más extremo en materia de fraseo, acentos<br />

y contrastes que el de muchos grupos que tocan<br />

con instrumentos de época. Un disco excepcional.<br />

Los escépticos de la eterna “crisis de voces” en<br />

que vive inmerso el mundo de la lírica tenemos<br />

nuevos argumentos para combatirla: lo de Lemieux<br />

aquí es confirmación de que una estrella ha nacido<br />

en el Canadá.<br />

MARIE-NICOLE LEMIEUX: Arias de ópera (Gluck, Haydn,<br />

Mozart)<br />

Marie-Nicole Lemieux, contralto. Les Violons du Roy.<br />

Bernard Labadie, director / NAIVE / Ref.: V 5264 (1 CD) D1

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!