Nº 7, Junio 2007 - Universidad de Murcia
Nº 7, Junio 2007 - Universidad de Murcia
Nº 7, Junio 2007 - Universidad de Murcia
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
flamenco<br />
Los llamados “Palos” <strong>de</strong>l flamenco<br />
■ Andrés Salom<br />
José Gelardo<br />
Para el profesor amigo José Gelardo<br />
Navarro, por su empeño en rescatar la<br />
historia <strong>de</strong>l flamenco y airearla.<br />
Los “palos” <strong>de</strong>l flamenco (cada<br />
uno <strong>de</strong> los cantes en sí) son aproximadamente<br />
cuarenta, aunque pue<strong>de</strong>n<br />
ser menos (treinta y tres, dicen) y también<br />
muchísimos más. Todo <strong>de</strong>pen<strong>de</strong><br />
<strong>de</strong> que se consi<strong>de</strong>ren, o no, cantes<br />
flamencos algunas canciones aflamencadas<br />
con un pie todavía en lo folklórico<br />
en el buen sentido <strong>de</strong> la palabra.<br />
Por ejemplo garrotines, bamberas, guajiras,<br />
tanguillos <strong>de</strong> Cádiz y otras. Todo<br />
ello aparte <strong>de</strong> que algunos cantes están<br />
constituidos por toda una serie <strong>de</strong> modalida<strong>de</strong>s<br />
distintas, como es el caso <strong>de</strong><br />
malagueñas, soleares y tangos –tangos<br />
Carlos Piñana<br />
flamencos, se entien<strong>de</strong>– y siguiriyas.<br />
Para po<strong>de</strong>r más o menos enten<strong>de</strong>rnos<br />
en lo <strong>de</strong> los llamados palos<br />
<strong>de</strong>l flamenco, lo dividiremos un poco<br />
a la ligera, en dos gran<strong>de</strong>s bloques,<br />
que, arriesgando mucho, casi podría<br />
<strong>de</strong>cirse que se trata <strong>de</strong> dos manifestaciones<br />
músico-vocales distintas. Y en<br />
lo <strong>de</strong> arriesgar aludo a que nada hay<br />
en el flamenco que sea ciencia exacta<br />
y mucho menos pentagrama. Se canta<br />
y se toca <strong>de</strong> oído. Y si bien es cierto<br />
que algunos “tocaores” jóvenes actuales<br />
han aprendido música, entre otros<br />
mi entrañable Carlos Piñana, por ejemplo,<br />
a la hora <strong>de</strong> afrontar el flamenco,<br />
<strong>de</strong> poco les va a servir.<br />
Dichos bloques serían: cantes<br />
libres, o <strong>de</strong>l Levante andaluz (Málaga,<br />
Jaén, Granada y Almería), al que habría<br />
que añadir la cuenca minera <strong>de</strong> Cartagena-<br />
La Unión (extra andaluza)…, por<br />
una parte, y por otra, los que se consi<strong>de</strong>ran<br />
genuinos <strong>de</strong> la Baja Andalucía,<br />
o Andalucía Occi<strong>de</strong>ntal, con cierta inci<strong>de</strong>ncia,<br />
si bien <strong>de</strong> escasa importancia<br />
en Extremadura.<br />
Los cantes <strong>de</strong> Levante se caracterizan<br />
por ser libres (¿?) <strong>de</strong> compás;<br />
lo que no significa que el intérprete<br />
no tenga que atenerse a ciertas pautas,<br />
silencios, interludios, etc., a veces rigurosísimos.<br />
Sin entrar en matizaciones<br />
engorrosas que no harían más que<br />
hacer poco menos que ininteligible<br />
nuestra exposición, pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cirse que<br />
los cantes <strong>de</strong> Levante –o libres (¿?),<br />
digo – son: malagueñas, granaínas y el<br />
conjunto <strong>de</strong> los cantes proce<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong><br />
la música folklórica propia <strong>de</strong> los mineros<br />
<strong>de</strong> Linares- Andújar, Sierra <strong>de</strong> Almagreras<br />
y zona minera <strong>de</strong> la aludida<br />
Cartagena- La Unión.<br />
Así dicho, la cosa parece bastante<br />
sencilla. Pero no. La malagueña,<br />
por ejemplo, cuenta con una amplía<br />
gama <strong>de</strong> modalida<strong>de</strong>s, todas ellas <strong>de</strong><br />
entonaciones (componentes melódicos)<br />
distintas que no todas son precisamente<br />
<strong>de</strong> Málaga. La llamada malagueña <strong>de</strong>l<br />
Mellizo, por citar el caso más extremo,<br />
proce<strong>de</strong> <strong>de</strong> Cádiz y es, paradójicamente,<br />
la más rica en <strong>de</strong>licadas matizaciones.<br />
Y en la conocida como malagueña<br />
<strong>de</strong> la Peñaranda resuenan los ecos <strong>de</strong><br />
una canción folklórica <strong>de</strong>l Campo <strong>de</strong><br />
Cartagena que fue registrada en disco<br />
por Hispavox en la voz <strong>de</strong> Antonio<br />
Piñana Segado bajo el epígrafe <strong>de</strong><br />
“<strong>Murcia</strong>na <strong>de</strong> Baile”. Y hay malagueñas<br />
<strong>de</strong> El Canario, <strong>de</strong> La Trini (dos), <strong>de</strong><br />
Fosforito el Viejo, <strong>de</strong> Fernando el <strong>de</strong><br />
22