You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
72<br />
para tener hijos. Y el caso de Blanca creo que es más cercano<br />
a lo que las mujeres somos ahora. Hay hombres hasta en la<br />
sopa, lo que pasa es que nos empeñamos en uno que justo<br />
no está en la sopa y te jode la vida. Nos concentramos en uno<br />
que quizás tiene otras circunstancias y que no puede atendernos<br />
no porque no le gustemos, sino porque las personas, en<br />
general, tienen vidas muy complicadas.<br />
–Esa histeria que antes pensábamos que venía con el<br />
útero, ahora nos damos cuenta de que es una condición<br />
humana. Sí, claro. Y bueno, a mí me interesan los<br />
temas que son clásicamente femeninos pero que son cada<br />
vez más masculinos. A los hombres les ha gustado muchísimo<br />
este libro. Lo que pasa es que los hombres se acercan a mí de<br />
otra forma, en las firmas de libros o presentaciones me piden<br />
que se los firme para su novia o para su madre, porque les da<br />
vergüenza, pero después les encanta.<br />
–¿Por qué nunca se imaginó los 40? La mediana edad es<br />
como una edad gris. Cuando eres joven, el mundo es tuyo, te<br />
puedes emborrachar y al día siguiente estás perfecto, todo es<br />
mucho más fácil. Cuando eres vieja, ya te imaginas pues con<br />
el moño, bebiendo whisky. Cuando eres joven, a los 15 o a los<br />
18, piensas que a los 30 tendrás hijos o te habrás casado, pero<br />
los 40 es una década que no es nada sexy.<br />
–¿Y cómo los vive ahora que han llegado? Siendo igual<br />
de tonta que era a los 15. Creo que no cambiamos o que<br />
cambiamos muy poco. Aprendemos algunas cosas, pero, en<br />
el fondo, creo que veo muy claramente en mí a una niña de<br />
6 años. Vamos envejeciendo, pero a los 6 ya estaba decidido<br />
quién serías. La mirada sobre el mundo y la sensibilidad<br />
está completamente desarrollada a esa edad. De hecho, no<br />
me fío en la gente que ha perdido completamente al niño<br />
interior. Me gusta la gente a la que miro y soy capaz de ver<br />
al niño o a la niña pequeña. Los que han borrado del todo la<br />
infancia me dan un poco de miedo. Es mucho más fácil manejarse<br />
en el mundo como adulto que como niño, como niño<br />
vas siempre un poco cojo, pero mejor ir cojo que ir pisando<br />
fuerte, que es horrible.<br />
–¿Cómo recibió el público la novela? Bien, la gente que<br />
viene a verme es gente a la que le ha gustado, los que piensan<br />
que es una porquería se quedan en su casa escribiendo en el<br />
Twitter “esta tía es una imbécil” (risas). Me hace mucha ilusión,<br />
cuando voy en el metro en Barcelona y, de repente, veo<br />
a alguien leyendo el libro, me parece increíble. Recuerdo la<br />
primera vez que fui a una librería, después de que salió el libro<br />
en España, con mi hijo mayor y escuché a una chica que lo<br />
estaba pidiendo. Me quedé mirando hasta que no pude resistirme<br />
más y la asalté y le dije: “soy yo”. La chica me miró como<br />
diciendo: “está loca, tengo que llamar a la policía”, entonces le<br />
dije: “mira la foto, soy yo”. A todo esto mi hijo estaba en la otra<br />
punta de la librería, muerto de vergüenza por ver a su madre<br />
haciendo el ridículo una vez más, pero fue increíble. Desde<br />
entonces, he aprendido un poco a controlarme.<br />
–Muchos medios argentinos la han nombrado como una<br />
“estrella”, ¿qué es la fama? Eso es una tontería. Mis amigas<br />
desde Barcelona todavía se están riendo y me preguntan:<br />
“¿Cómo va el fenómeno?”. Lo tomo con mucha alegría y agradecimiento,<br />
pero después vuelvo a casa y tengo mis historias, a<br />
mi hijo no sé qué le pasa en la clase de piano y lo de siempre.<br />
Yo creo que esto es genial y necesitaré volver a Barcelona y<br />
estar unos días allí para darme cuenta de la generosidad de la<br />
gente de aquí, de lo maravilloso que ha sido todo. Pero como<br />
bien dice el título de mi novela, también esto pasará. Y eso es<br />
lo bueno, porque con un libro, por mucho que a la gente le<br />
guste, no es como salir en la tele o ser un actor o un músico,<br />
es mucho más controlable. En Barcelona, puede que se me<br />
acerque alguien, pero creo poder estar mirando, en un bar, a<br />
la gente, que es lo que me gusta y que constituye una parte<br />
importante de mi trabajo, sin que nadie me diga nada.<br />
–¿Cuáles son sus influencias? Muchos me preguntan<br />
qué leí antes de escribir esta novela. Pero, como no tenía<br />
planeado escribirla, no leí nada. No puedo recomendar una<br />
literatura ni del duelo ni de la relación madre e hija. Me<br />
gusta mucho leer y leo gran cantidad de libros. Me gusta<br />
Marguerite Duras, me gustan Shakespeare, Chéjov,<br />
Borges, pero no sé si son influencias. Son lecturas que me<br />
dan mucho placer. Cuando estoy escribiendo, no puedo leer<br />
otros autores, porque se me contagia un poco el estilo. Creo<br />
que, cuando se escribe, uno tiene que estar buscando su<br />
propia voz y su propio estilo. Es muy difícil mantener esto,<br />
porque en cuanto lees un poco, te dispersas. Hay que estar<br />
un poco ensimismado para escribir, que yo creo que es un<br />
defecto, pero es la forma de llegar a tu voz y a tu mundo. De<br />
todos modos, pienso que, si estás despierto y si estás atento,<br />
te nutres de todo. Hay muchísimo material de escritura en el<br />
mundo, en la realidad, no solo en el arte. Creo que escribimos<br />
con todo lo que somos. Escribimos con nuestro sexo<br />
de mujer, pero escribimos también con nuestras lecturas,<br />
con nuestras experiencias, nuestros amores, nuestros sueños<br />
fracasados y nuestros éxitos. Escribimos con todo.<br />
–¿Qué hay después de También esto pasará? Otro libro,<br />
espero, si me dejáis escribir (risas). Yo he calculado que, hacia<br />
finales de agosto, no aceptaré ningún viaje más y me concentraré<br />
para poder escribir la tercera, porque tengo bastantes<br />
apuntes y tengo la historia bastante clara. Es muy raro porque<br />
los viajes y la gente aportan muchísimo, pero también despistan.<br />
Para la gente que escribe, creo que es muy bueno aburrirse.<br />
Tienes que tener una vida, dejar a los chicos en el colegio,<br />
ir a comprar la cena, ir a tu casa y ponerte a escribir a las 10<br />
y no parar hasta que sientas que has cumplido el trabajo del<br />
día, como en una oficina. Me encanta lo que estoy viviendo,<br />
pero tengo sed de escritura. Tengo ganas de contar cosas. Han<br />
pasado cosas que hay que contar. Pero es necesario estar muy<br />
concentrado para escribir, es un trabajo muy duro. Hay que estar<br />
desnudo, abierto, con la mente muy clara y ser muy crítico<br />
con uno mismo. Cuando se escribe, como en mi caso, acerca<br />
de cosas muy próximas, se debe estar cercano y lejos a la vez,<br />
para no caer en la autocompasión, en la cursilería, cosas que<br />
me repugnan. Tienes que poder verte con un sentido crítico,<br />
pero también con un poco de cariño y emoción