VIDA SANTO DOMINGO GUZMÁN
Vida_de_Santo_Domingo_de_Guzman,_Fray_Enrique_Domingo_Lacordaire_OP
Vida_de_Santo_Domingo_de_Guzman,_Fray_Enrique_Domingo_Lacordaire_OP
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
en virtud de las leyes y de los cánones.” (Mamachi: “Anales de la Orden de Predicadores”,<br />
vol. I, apéndice, pág. 70)<br />
Esta acta está fechada en Roma el 17 de abril de 1221. Lleva tres sellos: el de la<br />
catedral de San Esteban, el de Foulques y el de Domingo. El sello de Domingo le representa<br />
en pie, vistiendo el hábito de fraile predicador, con un bastón en la mano, y a su alrededor se<br />
ven grabadas las siguientes palabras: “Sello de Domingo, General de Predicaciones.” por ello<br />
se observa que el título magnífico de “General de la Predicación” que se le atribuye en el<br />
texto del acta no era de su elección, sino un homenaje de Foulques, que no pudo expresar con<br />
mayor grandeza lo que pensaba de su amigo. El soberano Pontífice, en sus bulas y cartas,<br />
nunca llamó a Domingo sino “Prior de San Román”, y más adelante, Prior de la Orden de<br />
Predicadores.<br />
Foulques sobrevivió diez años a Domingo. Murió el 25 de diciembre de 1231, y fue<br />
inhumado en una capilla de la abadía de Grand-Selve, no lejos de Tolosa. Su tumba ha<br />
desaparecido bajo las ruinas que pueden verse aún hoy; pero las revoluciones del tiempo y de<br />
los imperios nada pueden contra su memoria, estrechamente ligada a un hombre y a una obra<br />
cuyo nacimiento protegió y cuya inmortalidad protege a él ahora.<br />
Algunos días después del acta que acabamos de reproducir, Domingo se alejó de<br />
Roma, tomando el camino de Toscana. En Bolsena, situada al borde de este camino, había<br />
una casa cuyo dueño tenía la costumbre de darle hospitalidad, y fue recompensado antes de la<br />
muerte del santo de milagrosa manera. un día que el granizo caía sobre las viñas que rodean<br />
Bolsena, Domingo apareció en el cielo, y extendiendo su capa sobre la viña de su bienhechor<br />
la preservó de aquella plaga. Todo el pueblo fue testigo de esta aparición, y, según atestigua<br />
Teodorico de Apolda, A fines del siglo XIII se veía aún en la viña la casita en que Domingo<br />
había pasado la noche cuando iba de camino y se detenía en Bolsena. Dicha casa estaba<br />
cuidadosamente conservada por los descendientes de su antiguo dueño, los cuales, por<br />
recomendación expresa de su predecesor, acogían en ella bondadosamente a los Predicadores<br />
siempre que encontraban ocasión.<br />
Pentecostés se celebraba en el año 1221 el 30 de mayo. Era este día señalado para la<br />
celebración del segundo Capítulo General de la Orden en Bolonia. Domingo, al entrar en San<br />
Nicolás, observó que trabajaban para levantar el techo de uno de los brazos del convento para<br />
agrandar las celdas; Domingo, al ver estas obras, lloró mucho y dijo a fray Rodulfo,<br />
procurador del convento, y a los demás: “¡cómo! ¿Es que queréis abandonar la pobreza y<br />
edificaros palacios?” (“Actas de Bolonia”, declaración de Esteban de España, número 4.)<br />
inmediatamente ordenó cesasen las obras, que no continuaron hasta después de su muerte.<br />
143