Número 55 - Año XXIV - aespat
Número 55 - Año XXIV - aespat
Número 55 - Año XXIV - aespat
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
92 Mª Consuelo Llinares Pellicer<br />
cientes no consumistas, más frecuentes en<br />
los jóvenes. Los adictos aceptan más los<br />
valores consumistas y son más vulnerables<br />
psicológicamente a los mensajes que relacionan<br />
el consumo con la felicidad, el éxito<br />
social y el prestigio personal.<br />
Los estímulos del consumo son actividades<br />
que, aunque por sí mismas no pueden<br />
considerar consumo, en los jóvenes provocan<br />
un efecto muy intenso de incitación a la<br />
compra y predisponen a la adicción.<br />
Otra causa, según el estudio, es el bajo<br />
nivel de autoestima y la desconfianza hacia<br />
las propias aptitudes o habilidades. Al contrario<br />
que en los adultos, los jóvenes más<br />
Tabla 1.<br />
Nº <strong>55</strong> <strong>Año</strong> 2006<br />
CRITERIOS DE DIAGNÓSTICO DEL TRASTORNO<br />
DE ADQUISICIÓN ANORMAL DE COMPRAS<br />
Fuente: De la Gándara, J.J. 1999.<br />
adictos son aquellos que están más contentos<br />
con su aspecto físico.<br />
El grado de adicción al consumo entre los<br />
adultos es similar en las cuatro regiones estudiadas,<br />
no asi tanto entre los jovenes europeos.<br />
Los escoceses presentan mayor atracción<br />
y adicción por las compras y menor autocontrol<br />
económico. En el lado opuesto estarían<br />
los jóvenes italianos, y en una posición<br />
intermedia, los jóvenes españoles.. Los investigadores<br />
de este estudio han analizado<br />
1354 cuestionarios: 575 de adultos (con una<br />
edad media de 36 años) y 779 de jóvenes<br />
(con una edad media de 16 años); el 53%<br />
son mujeres y el 47% hombres.<br />
1. Adquisición de aditamentos, ornamentos, cosméticos, elementos electrónicos e informáticos<br />
en cantidad excesiva para las necesidades o posibilidades de la persona.<br />
2. Empleo en ello de tiempo, dinero o energía excesivos o preocupación exagerada por la<br />
compra o uso de elementos del atuendo.<br />
3. Repercusiones económicas, familiares o legales.<br />
4. Presentación del trastorno asociado o no a la depresión, bulimia o trastornos de la personalidad<br />
5. No deben incluirse las conductas semejantes presentes durante un episodio maníaco o<br />
psicótico, ni otras parecidas pero limitadas a épocas de rebajas, vacaciones, viajes, etc.<br />
7. CRITERIOS DIAGNÓSTICOS<br />
Los primeros criterios para el diagnóstico<br />
de esta patología son los siguientes:<br />
Esta propuesta pretende ser una descripción<br />
práctica del fenómeno, tratando de establecer<br />
los límites entre la normalidad y la<br />
anormalidad de la conducta de compra excesiva.<br />
Desde el punto de vista del diagnóstico<br />
psiquiátrico cabe señalar que un gran número<br />
de pacientes estudiados (de la Gándara<br />
1999) presentaban otra patología coincidente<br />
con la compra compulsiva. Dicha<br />
patología fue realmente la que motivó la<br />
consulta o tratamiento. Desde el punto de<br />
vista sindrómico lo más destacado fueron<br />
los trastornos depresivos y de la alimentación,<br />
seguidos por el abuso de alcohol, estimulantes,<br />
alteración del control de los impulsos<br />
y trastornos obsesivos-compulsivos.<br />
¿Qué decir del diagnóstico diferencial?<br />
Podríamos mencionar el trastorno obsesivocompulsivo<br />
propiamente dicho o la hipomanía<br />
( que en principio debería ser fácilmente<br />
reconocible).<br />
¿Cómo se diagnostica? ¿Cómo se sabe<br />
cuando es un comprador compulsivo?<br />
Se diagnostica a partir de la conducta, interrogando<br />
a quienes adquieren bienes com-