una aportación al estudio del cuento fang de ... - Nuestro Centro
una aportación al estudio del cuento fang de ... - Nuestro Centro
una aportación al estudio del cuento fang de ... - Nuestro Centro
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Tejuelo, Monográfico: Una <strong>aportación</strong> <strong>al</strong> <strong>estudio</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>cuento</strong> <strong>fang</strong> … ISSN: 1988-8430.<br />
pero, persiguiendo a un antílope, él y su perro habían caído en <strong>una</strong> profunda lag<strong>una</strong>,<br />
don<strong>de</strong> se ahogaron.<br />
Mangué nfan-mebo empezó a dar vueltas <strong>al</strong>re<strong>de</strong>dor <strong><strong>de</strong>l</strong> poblado, para ver por<br />
dón<strong>de</strong> había s<strong>al</strong>ido <strong>de</strong> caza. Encontró sus huellas y las fue siguiendo. Llegó a don<strong>de</strong><br />
había matado el puerco espín y, rastreando, rastreando se encontró frente a la tranquila<br />
lag<strong>una</strong>, en la que, <strong>de</strong> haber venido corriendo, también ella hubiese caído. Volvió<br />
corriendo y anunció a sus hermanas que había encontrado la lag<strong>una</strong> en que se había<br />
ahogado el <strong>de</strong>sdichado joven.<br />
Entonces, las cinco hermanas se encaminaron <strong>al</strong> lugar señ<strong>al</strong>ado. Llegadas a él,<br />
Mangué nsu mengueng se sumergió en la profunda lag<strong>una</strong> y, en un abrir y cerrar <strong>de</strong><br />
ojos, rescató los cadáveres <strong><strong>de</strong>l</strong> apuesto joven, <strong>de</strong> su perro, <strong><strong>de</strong>l</strong> puerco espín y <strong><strong>de</strong>l</strong><br />
antílope.<br />
Tocaba ahora el turno a Mangué nlat-bem que empezó a recomponer y coser los<br />
miembros <strong>de</strong>strozados <strong>de</strong> los cuatro cadáveres.<br />
Fin<strong>al</strong>mente, Mangué mwomo-bem coronó la obra, pues empezó por resucitar a<br />
los anim<strong>al</strong>es y por último resucitó <strong>al</strong> joven.<br />
Cuando éste volvió a la vida, dio un fuerte estornudo y se extrañó <strong>de</strong> la<br />
presencia <strong>de</strong> las cinco hermanas en el bosque; reconoció los anim<strong>al</strong>es, excepto el<br />
antílope. Le contaron que él y los anim<strong>al</strong>es habían caído en la profunda lag<strong>una</strong> hacía<br />
muchos años y que habían venido a rescatarlos y darles vida.<br />
Entre las cinco hermanas Mangué nació <strong>una</strong> fuerte discusión, porque cada <strong>una</strong><br />
<strong>de</strong>cía que había sido ella la que había rescatado <strong>al</strong> joven. Y que, por tanto, tenía que<br />
casarse con él...<br />
Acabamos aquí el <strong>cuento</strong> y te <strong>de</strong>jamos a ti, lector, que <strong>de</strong>cidas cuál <strong>de</strong> las cinco<br />
hermanas Mangué tenía más méritos para ser la esposa <strong><strong>de</strong>l</strong> joven rescatado.<br />
P á g i n a | 99<br />
(Rosendo Elá Nsué).