Justicia, Justicia, - el caso saiegh

Cuando se privatizaron las empresas públicas, tuvimos a nuestro cargo
la venta de las acciones al personal de las PPP para Aerolíneas Argentinas y
Austral, -ironías de la vida-, Gas del Estado, Obras Sanitarias de la Nación,
ENTEL, Tandanor y varias compañías más.
También, en 1991, pusimos en práctica otro concepto desarrollado en
ese momento: el Índice de Bienestar Humano (IBH), conjuntamente con el
Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), como criterio
vinculante entre la arquitectura de sistemas y la arquitectura social. Así,
comenzamos una serie de seminarios con el Servicio Informativo y Cultural
de la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires (USIS), conjuntamente
con nuestro estudio de arquitectura y la Fundación para la Integración
Latinoamericana (FIL). Uno de los principales fue “Antidiscriminación,
Condición Necesaria para una Economía Democrática”, a lo largo de varios
encuentros anuales, en un ciclo que denominamos “Hacia una Economía
Democrática”.
En 1996, la Agregaduría Comercial de la Embajada de Estados Unidos
nos encomendó el proyecto, realización y organización del Pabellón de la
Tecnología Norteamericana para la Construcción en Fematec 96 en La Rural,
realizándolo junto a la FIL, y el desarrollo del seminario “Tecnología, Hábitat y
Bienestar”.
En los últimos años, prosiguiendo con el criterio de la Arquitectura de
Sistemas, comenzamos el desarrollo del Sistema Moebius, que integra el
proceso constructivo de la industrialización en acero, con la posibilidad de
movilizar módulos del espacio con contenidos físicos y/o humanos, dentro del
propio espacio, para poder ocuparlo casi en su totalidad. Su primer subsistema
operativo fue el “AutoPark”, para estacionamientos automatizados y
robotizados, eliminando pasillos, circulaciones y rampas.
Este desarrollo constituyó una innovación mundial en su tipo y, como tal,
fue patentada a escala internacional.
Complementé mi tarea profesional con la redacción de poemas prosados
sobre el proceso de “Autoconstrucción del Ser Humano”, donde la alquimia
-como metáfora de transformación- se emparenta con lo constructivo, y sobre
cómo esos criterios estructurantes de la arquitectura y la ingeniería permiten a
la persona “ser el arquitecto de su propio destino”. Esto se vincula con el
“sentido” y el fin de la vida, su travesía, itinerario y final, como un proceso que
se puede caracterizar metafóricamente con el concepto: “Del agujero vienes y
al agujero vuelves”.
El Sistema Moebius, con su concepción a partir de utilizar el espacio
libre o agujero, caracteriza y materializa su desarrollo, tal como se explicita en
su memoria.
Y así como di batalla reivindicatoria en el plano profesional, no abandoné
mi actividad política, como una manera de aportar a la mejora del país y a la
calidad de vida de la ciudadanía.
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