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Librodot La novia muerta R. L. Stine<br />
Jonathan me miró con ojos furiosos. Apoyó los puños en las caderas y me contempló<br />
amenazador.<br />
«¡La odiaba tanto que la maté!»<br />
Noté un sudor frío en la frente mientras me ponía en pie de un salto.<br />
Jonathan acababa de confesar, acababa de admitir que había matado a Louisa, y de<br />
repente fui consciente de que estaba completamente a solas con él. Yo era la única que<br />
compartía su horroroso secreto y él me estaba observando con una expresión peligrosa en el<br />
rostro, con una mirada enloquecida. Fijaba sus ojos en los míos con gran intensidad mientras<br />
decidía cuál iba a ser el siguiente paso a tomar. Era como si estuviera dudando en tirarme a mí<br />
también por la cascada.<br />
«¡La odiaba tanto que la maté!» Una y otra vez me preguntaba por qué lo había hecho.<br />
-Jonathan -dije retrocediendo un paso y alejándome del borde del precipicio-. Jonathan...<br />
¿tú empujaste a Louisa por la cascada? -pregunté con un hilo de voz.<br />
No estaba segura de que me hubiera oído a causa del constante estruendo, pero observé<br />
un cambio en la expresión de su cara. Frunció el ceño consternado y entrecerró los ojos.<br />
-No -dijo-. Yo no la empujé.<br />
Esperé a que continuara, pero se quedó en silencio. Me temblaba todo el cuerpo y estaba<br />
congelada a pesar del sol deslumbrante. Rodeé mi cuerpo con los brazos para entrar en calor,<br />
para sentirme protegida, aunque en realidad estaba completamente sola y a su merced.<br />
-Pero acabas de decir que la mataste -dije.<br />
Negó con la cabeza, tristemente.<br />
-Sí, al traerla aquí arriba. Si no la hubiera traído aquí, no habría muerto -gimió con<br />
angustia y dolor.<br />
-¿Pero tú no la empujaste? -Tenía que saber la verdad. Se acercó a mí, mirándome<br />
fijamente.<br />
-La empujó otra persona -dijo-. Fue otra persona. Escudriñé sus ojos para averiguar si me<br />
estaba diciendo la verdad.<br />
-Fue otra persona -repitió.<br />
-¿Te refieres a... Ruby? -le pregunté-. ¿Fue Ruby la que empujó a Louisa?<br />
Jonathan asintió.<br />
-Sí.<br />
22<br />
Una bandada de pájaros volaba silenciosamente en lo alto del cielo.<br />
Jonathan avanzó otro paso hacia mí. Respiraba con dificultad y tenía las mandíbulas<br />
apretadas.<br />
-¿La empujó Ruby? -repetí incrédula.<br />
-Sí -dijo él-. Yo traje a Louisa aquí arriba, pero fue Ruby quien la empujó.<br />
-¡Mentiroso! -dijo alguien desde las rocas, dándonos un gran susto-. ¡Maldito mentiroso!<br />
Nos dimos la vuelta y vimos a Ruby que salía corriendo de detrás de las rocas. Llevaba<br />
una camiseta azul y unos pantalones blancos de tenis. El pelo despeinado le caía por delante<br />
de la cara y tenía una expresión furiosa que asustaba.<br />
-Ruby, ¿todavía me persigues? -gritó Jonathan con rabia-. Ya te dije que...<br />
-¡Cierra el pico! -chilló ella, dándole un fuerte empujón. Jonathan retrocedió unos pasos<br />
dando traspiés, hacia el borde del precipicio-. ¡Cállate! ¡Cállate! ¡Cállate!<br />
Intentó empujar a Jonathan otra vez pero él la frenó con un golpe de hombro y la echó<br />
hacia atrás.<br />
Ruby miró furiosamente a Jonathan y soltó un grito desgarrador.<br />
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