- Page 2 and 3:
CUENTOS DEL DINERO LA RIQUEZA Y EL
- Page 4 and 5:
Índice La guaca ..................
- Page 6 and 7:
Madre, yo al oro me humillo: él es
- Page 8 and 9:
HÉCTOR ABAD FACIOLINCE (1958). Est
- Page 10 and 11:
ían planeado que algún día se ir
- Page 12 and 13:
por el Estadio, y tuvimos mucha sue
- Page 14 and 15:
eran todos de mármol, de pared a p
- Page 16 and 17:
el 92, había sido asesinado por lo
- Page 18 and 19:
la escritura del apartamento. Lo ú
- Page 20 and 21:
persona mayor. Nos adaptamos muy bi
- Page 22 and 23:
minúsculo decía 24K, decía 101,3
- Page 24 and 25:
2 Nunca nadie entendió, en el peri
- Page 26 and 27:
tos de ella, en edad escolar, que a
- Page 28 and 29:
JORGE IBARGÜENGOITIA (1928-1983).
- Page 30 and 31:
Paletón se contestó: —Quiero co
- Page 32 and 33:
El camión de mudanzas que llegó e
- Page 34 and 35:
El rey Midas Geraldine McCaughrean
- Page 36 and 37:
Érase una vez un rey llamado Midas
- Page 38 and 39:
la toalla en la boca para no soltar
- Page 40 and 41:
Corrió hacia un árbol y lo tocó.
- Page 42 and 43:
—¡Quítame mi deseo! ¡Por favor
- Page 44 and 45:
JORGE LUIS BORGES (1899-1986) y ADO
- Page 46 and 47:
tar, encontró cuatro mil denarios
- Page 48 and 49:
la figura del obispo se derrumbó.
- Page 50 and 51:
Pronto entendí que no valía nada,
- Page 52 and 53:
ROALD DAHL (1916-1990). De origen n
- Page 54 and 55:
Tibbs ladeó la cabeza y miró al t
- Page 56 and 57:
—Damas y caballeros —anunciaba
- Page 58 and 59:
—¿Qué diablos quiere decir? —
- Page 60 and 61:
El zar y la camisa León Tolstoi 63
- Page 62 and 63:
Un zar, hallándose enfermo, dijo:
- Page 64 and 65:
Los de la tienda Ana María Matute
- Page 66 and 67:
El aire del mar levantaba un polvo
- Page 68 and 69: el borde de los labios. Y como él
- Page 70 and 71: —Un paquete de sal… —dijo Man
- Page 72 and 73: cayó del andamio, partiéndose tre
- Page 74 and 75: un vuelco a Dionisio, y sólo acert
- Page 76 and 77: El mensaje Luis Fernando Veríssimo
- Page 78 and 79: Fue meses después de la muerte del
- Page 80 and 81: tudes pastoriles. De algún modo, n
- Page 82 and 83: Una lagartija Juan Burghi 85
- Page 84 and 85: Mañana. Estío. Resol. El pedregal
- Page 86 and 87: der aliviarla; y así conmovido y a
- Page 88 and 89: La aventura del albañil Washington
- Page 90 and 91: Hubo un tiempo en Granada un pobre
- Page 92 and 93: Al pobre albañil se le erizaron lo
- Page 94 and 95: un patio interior, donde atrajo su
- Page 96 and 97: Los bandidos Villiers de L’Isle-A
- Page 98 and 99: Al señor Henri Roujon ¿Qué es el
- Page 100 and 101: casa con un aire más arrogante que
- Page 102 and 103: En avant, marchons Contre leurs can
- Page 104 and 105: No se oía una palabra. ¡Qué angu
- Page 106 and 107: sina: en una palabra, ¡aquella que
- Page 108 and 109: un dedo los cadáveres, añadiendo,
- Page 110 and 111: ANTONIO SUÁREZ MOLINA (1892-1967).
- Page 112 and 113: La primera partida, una Ruy López
- Page 114 and 115: Historia del hombre de Bagdad y el
- Page 116 and 117: Cuentan (pero Alá es el más sabio
- Page 120 and 121: El Monito Fleis Efe Gómez 125
- Page 122 and 123: —El éxito en la vida tiene un no
- Page 124 and 125: —Es cierto. Nada de raro tiene es
- Page 126 and 127: quejoyo no ha dado más que jumos d
- Page 128 and 129: —Soy bien animal, de veras —dij
- Page 130 and 131: El alcalde de Riolimpio —Primero
- Page 132 and 133: ma el alcalde el billete y continú