REBELDIA 40.qxp - Indymedia Argentina

REBELDIA 40.qxp 21/04/2006 01:40 p.m. PÆgina 46
públicamente porque, aquí, eso es un
insulto; la homosexualidad es considerada
una enfermedad que se puede erradicar.
Inclusive, nos dice una
compañera, los funcionarios públicos
se atreven a decir que no hay homofobia
en Querétaro porque “afortunadamente,
el mal de la homosexualidad no
se da”. Por su parte, la Iglesia manifiesta
no tener problemas con la comunidad
gay “mientras no manifiesten públicamente
que lo son”. L@s compañer@s
han tenido que pelear contra la censura, el cierre de
sex shops, el ataque a condonerías, la represión y el
hostigamiento que ha llevado a la cancelación de
actividades públicas e, inclusive, a la muerte.
El compañero Octavio Acuña fue ejecutado
por portar con orgullo su diferencia. Él era activista
de la Asociación Queretana de Educación para las
Sexualidades y de la Red Democracia y Sexualidad
(Aquesex), que luchan por los derechos sexuales y
reproductivos de los jóvenes y por la prevención del
VIH-SIDA. En septiembre del 2005, mientras paseaba
por una plaza pública acompañado de su pareja,
fue hostigado por la Guardia Municipal de Querétaro
que les prohibió estar en la plaza. Octavio decidió
presentar una queja ante la Comisión Estatal de
Derechos Humanos (CEDH) —primera queja de
ésta índole en Querétaro—, pero su queja fue declarada
improcedente por falta de interés. Octavio volvió
a levantar su voz en una conferencia de prensa.
Una semana después fue ejecutado. Su muerte fue
catalogada por el gobierno como “crimen pasional”.
Ni las autoridades ni las comisiones de derechos
humanos han hecho nada por esclarecer el asesinato
y los perpetradores siguen impunes. Los compañeros
de Octavio, integrantes de Aquesex, continúan
su lucha contra la homofobia.
El Subdelegado Zero concluye: “Pero llega un
momento en que uno dice ‘esto soy yo’, que lo dice
delante de los demás, y los de arriba se sienten agredidos,
y eso fue lo que hizo Octavio (…) que empezó
a reivindicar sus derechos; y en el momento en
que alguien de abajo dice ‘esto soy yo’, el de arriba
se siente agredido, ofendido, y se da cuenta de que
el otro existe, y que el otro existe en su diferencia y
además le da orgullo ser diferente y demostrarlo; y
entonces opta por dos cosas: por buscar una ley que
elimine a ese otro, o usar un sicario —que fue lo que
hicieron con Octavio— para eliminarlo. No lo está
eliminando por ser diferente, lo está eliminando por
ser orgullosamente diferente”.
La Sierra Gorda nos entrega su palabra
La reunión con los compañeros de los cuatro municipios
que conforman la Sierra Gorda (Arroyo Seco,
Jalpan, Landa de Matamoros y Pinal de Amoles)
estuvo impregnada de dolor y angustia provocada
por la injusticia social. La pobreza, la marginación y
la necesidad los ha orillado a los campesinos a
pasarse al “otro lado” para tratar de mejorar sus condiciones
de vida, pero han sufrido de discriminación,
maltrato y abusos por parte de ambos
gobiernos. Los que logran llegar “dejan a sus familias
muchos años abandonadas” mientras que otros
regresan muertos. La migración ha provocado la
desintegración del tejido social y se han presentado
severos problemas de drogadicción y alcoholismo;
poco a poco se va perdiendo la identidad cultural,
porque quienes regresan quieren imponer las nuevas
ideas que a ellos les fueron impuestas en Estados
Unidos. Sin embargo, el problema de la
migración no es novedad por estas tierras.
De 1942 a 1964, jóvenes y adultos “fuimos a
dejar nuestras fuerzas a Estados Unidos en el cual
fuimos discriminados por nuestros gobiernos”. En
aquel entonces, se les quedó a deber un 10 por ciento
de su salario que no ha sido recuperado. Esto
generó la formación de la organización Braceroproa:
“tenemos siete años de lucha que empezamos
desde 1998 y todavía no se ha podido lograr nada. El
gobierno se niega rotundamente a reconocernos ese
derecho”. A los compañeros ex braceros se les
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