30 Virgilio Díaz Grullón tidas riquezas de la realidad, percibidas con particular intensidad en virtud de una exaltación del espíritu que lo conduce a un modo de estado límite", la fe de Alberto, ilumina este símbolo y respuesta como una de las tantas posibilidades de América. (1) Véase el análisis de estas tres obras en: Héctor Incháustegui Cabral, De Literatura Dominicana. Siglo XX. 2da. ed. Santo Domingo, UCMM, 1973. (2) Para completar el panorama del cuento, véase: Sócrates Nolasco, El cuento en Santo Domingo. Selección Antológica. Santo Domingo, Librería Dominicana, 1957, v , 1-2. (Colección Pensamiento Dominicano). (3) Marcio Veloz Maggiolo, Cultura, teatro y relatos en Santo Domingo. Santo Domingo, UCMM, 1972. (Colección Contemporáneos). (4) Un panorama más actualizado se halla en: Aída Cartagena Portalatín, Narradores dominicanos. Caracas, Monte Avila, 1969. (5) Véase: Fausto Masó, "Literatura y Revolución en Cuba", Mundo Nuevo, Buenos Aires, No. 32, febrero 1969, con algunas precauciones acerca de sus juicios. En el mismo número: "Cuba: ¿Fin de una tregua?", firmado por I. S. Más objetivos e informados nos parecen los trabajos de Claude Fell aparecidos en Le Monde de París. (6) Véanse nuestros artículos acerca de José Soler Puig, Galeano, Otero Silva y Cortázar, en El Caribe, Suplemento Sabatino, Santo Domingo, 1975-1976. (7) Véase nuestro artículo sobre el autor, en El Caribe, Suplemento Sabatino. (8) Ariel Dorfman, Imaginación y violencia en América. Santiago de Chile, Edit. Universitaria, 1970. (9) Carlos Fuentes, La nueva novela hispanoamericana. México, Joaquín Mortiz, 1969. (Cuadernos de J. Mortiz). (lO) Alejo Carpentier, Guerra del tiempo. Santiago de Chile, Ed. Orbe, 1969, y Guerradel tiempo. Barcelona, Ed. Barral, 1970. (ll) Luis Harss, Los nuestros. 5ta. cd., Buenos Aires, Sudamericana, 1973. (12) Alejo Carpentier, El reino de este mundo. 2da. ed., Montevideo, Edic. Arca, 1966.
LOS ALGARROBOS TAMBlEN SUEÑAN Virgilio Díaz Grullón