Cronologia-de-una-implosi%C3%B3n-WEB

1993
1 El Nacional, 13/1/93. p. D/2
2 Ibídem. 14/1/93. p. D/1
3 Díaz Rangel, Eleazar. Los lunes de Díaz Rangel. El Mundo,
18/1/93. p. 5
4 El Globo, 4/1/93. p. 19
5 El Universal, 4/1/93. pp. 1/16
6 El Globo, 18/3/93. p. 48
7 Rosas, Alexis. La guía telefónica de la represión. 29/4/93.
p. 23-26
8 El Nacional, 27/6/93. p. C/2
9 Ibídem. 2/9/93. p. D/1
10 Guerra, Alexis J. y Ponce de Moreno, Beatriz. 1989-1999
¿La década ganada?
11 Otálvora, Edgar C. La paz Ramónica. Cap. 7 Editorial Pomaire,
Caracas, 1994.. http://www.geocities.com/lapazramonica/cap07pax.htm
12 El Nacional. 17/12/97. p. D/Última
13 El Universal. 17/2/98. p. 4/Última
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Cronología
de una implosión
ÍNDICE DE REFERENCIAS
14 Mostafá, Paolini. Magistrado Ponente. Exp. Nº 15336.
Tribunal Supremo de Justicia.
http://www.tsj.gov.ve/decisiones/spa/Octubre/02130-
091001-15336.htm
15 Ibídem
16 El Diario de Caracas. 13/8/93. p. 8
17 El Nacional. 14/8/93. p. D/1
18 El Nacional. 12/3/97. p. D/Última
19 Jatar, Braulio. “La comisión de contraloría del Congreso.
Las mafias de la corrupción I”. 23/2/06
http://www.aporrea.org/ddhh/a19765.html
20 El Diario de Caracas. 17/8/93 p. 8
21 El Nacional. Edición aniversaria. 2003
22 Telesur. Detenido en Venezuela narcotraficante Larry Tovar
Acuña.
http://www.telesurtv.net/noticias/secciones/nota/5648-
NN/detenido-en-venezuela-narcotraficante-larry-tovar-acuna/
23 El Nuevo País. Caracas, 18/11/94. p. 9
El segundo quinquenio Caldera (1994-1999):
Un gobierno “sin plan” quiebra al país
A pesar de los fuertes rumores de fraude que señalaban una supuesta victoria del candidato
Andrés Velásquez (Causa R), el llamado “chiripero”, aglomerado en torno a Rafael Caldera, fue proclamado
por el Consejo Supremo Electoral, vencedor en las elecciones del 4 de noviembre de 1993.
Más allá de una abstención que alcanzó 39,85 por ciento según cifras oficiales, el abanderado
del recién creado partido Convergencia e histórico fundador de Copei, logró romper, al menos
en la forma, la hegemonía que el bipartidismo adeco-copeyano había instaurado en el país durante
siete quinquenios consecutivos. Sin embargo Caldera sería fiel a sus orígenes y su gobierno enseguida
se perfilaría como uno de los más representativos del “Pacto de Punto Fijo”.
Tras el quinquenio de mayor ingobernabilidad de la historia democrática del país, Caldera recibe
su segundo mandato de manos del historiador Ramón J. Velásquez. El candidato había prometido
durante su campaña electoral combatir la corrupción, emplear una filosofía antipartidista y descartar
el paquete económico de Carlos Andrés Pérez. Inicia su mandato con un país estrangulado económicamente,
principalmente a causa de la mayor crisis financiera del siglo XX. Tan severa es la emergencia
bancaria que estalla en enero de 1994, que la potestad de la política cambiaria queda en manos del
Ejecutivo y no del Banco Central de Venezuela.
Al inicio de la crisis, el gobierno del presidente Velásquez ordenó la intervención del Banco
Latino, en virtud de que registraba pérdidas por más de Bs. 320 millones. A un mes de haber asumido
la presidencia, Caldera decreta la “Ley de Emergencia” para proteger los ahorros de los depositantes y
regular la emergencia de las instituciones financieras involucradas, lo que implicaría el desvío de cifras
multimillonarias destinadas a auxilios bancarios.
La crisis financiera brindó la excusa perfecta para establecer el control de cambio y suspender
las garantías constitucionales, sin embargo, tres catedráticos de la Universidad Católica Andrés
Bello (UCAB) introducen en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) un recurso de nulidad, mientras que
tres días después de la publicación del infame Decreto, el Congreso Nacional lo somete a consideración
y decide restituir las garantías, salvo el artículo 96. Tres horas después, Caldera insiste en
suspenderlas.
Durante la crisis financiera, la fuerte inflación se reflejó en incrementos del índice de precios.
Para enfrentarla, el gobierno lanzó la “Agenda Venezuela”, una serie de medidas económicas que retoman
el “paquete económico” impuesto por Pérez. La frase estelar del fracasado plan económico, fue
popularizada por el entonces ministro de Cordiplan, Teodoro Petkoff: “estamos mal pero vamos bien”.
Sin lugar a dudas, el gobierno de Rafael Caldera fue el de la acción contraria a la promesa.
La Agenda, su intención de acudir al FMI, el escandaloso proceso de privatizaciones, marcaron
sus pasos.
En 1999, Rafael Caldera pronuncia su último discurso ante el Congreso Nacional. Tras las
numerosas promesas de campaña cinco años atrás y un quinquenio que las contradijo casi todas,
asegura que “la más importante tarea que había que cumplir, la cumplimos: armar el rompecabezas
y entregar el país en paz y en democracia”. Finalmente sostiene que la Constitución de 1961 es “una
excelente Carta Fundamental”. Cuatro días después, el presidente electo Hugo Chávez, al juramentarse
ante la Constitución la califica de “moribunda” y se compromete a impulsar las transformaciones
democráticas necesarias para que el país tenga una Carta Magna ajustada a los nuevos tiempos. Las
cosas comienzan a cambiar.
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de una implosión