Por Harvey MackayEs el mundo de los negocios, como de costumbre.Lo que es rápido se hace más veloz.La competencia para obtener ganancias ytrabajos se hace más difícil. El mundo se hacemás pequeño cada día. Usted ha tenido que luchar contracientos de compañeros de trabajo, clientes, vendedoresy con el muchacho irritante que trabaja en la cafetería. Eshora de regresar a casa a descansar.El tráfico pesado le da una oportunidad para recrearalgunos de los encuentros del día. Desafortunadamente,desearía hacerle frente a algunas cosas de manera distinta.¿Puede hacer que el día de mañana resulte mejor?Mi madre siempre me decía: “No tienes que querer a todo elmundo, pero sí necesitas aprender a llevarte bien con ellos”.A través de los años, elaboré una lista de los “Diez Mandamientospara la Oficina”, que hace que mi viaje de retorno acasa esté menos lleno de culpas. Mejor aún, también ha mejoradomi viaje de ida al trabajo. Si sigo mi propio consejo,no tendré que pasar mi tiempo pidiendo disculpas por loque debí haber hecho en primer lugar. Inténtela.1262Sea respetuoso. Esto incluye el respeto a la propiedad,las ideas y el tiempo de las personas. Francamente, estemandamiento debería cubrirlo todo. Si usted respetaa otros, puede solucionar la mayoría de los problemas–aún si se acuerda disentir. Una experiencia de valorañadido es que, cuando usted trata a otros con respeto,ellos estarán inclinados a devolverle el favor.Cumpla su palabra. Si usted promete algo, cúmplalo,sin “quizáces ni talveces”. Sin excusas y sin llantos. Ustedes tan bueno como su palabra. Siempre habrá lugar eneste mundo para personas que digan: “yo me encargarédel asunto” y lo hacen.3.4.5.6.7.Piense antes de hablar. No diga lo que esté en sucabeza, a menos que desee que sus pensamientos sinsentido le persigan. Esos fantasmas pueden levantarseposteriormente, justo cuando la posibilidad deun ascenso está a punto de materializarse. Y mientrasestamos en este tema, recuerde que la manera comodice algo es tan importante como lo que dice.Ayude. Qué importa si no está en la descripción desu trabajo. Si tiene la oportunidad de ser útil, ¡séalo!Mas aún, si la recompensa no llega en forma de uncheque, sus compañeros recordarán quién les ayudócuando lo necesitaban. Tomar un poco de trabajoextra –o mucho-- demuestra que usted es un jugadorde equipo, un empleado digno de ser observado.Aprenda algo nuevo cada día. Bien puede ser unanueva destreza o quizás lo último de su industria, osólo el nombre de la persona que ve diariamente enla copiadora. ¡Usted tiene millones de células cerebralesque esperan trabajar para usted!Preste atención. Si va directamente a su cubículoy se encierra todo el día, se pierde de importantesacontecimientos en su lugar de trabajo. No hablamosdel chisme, por supuesto, sino de asuntos realmentebuenos, como nuevos procedimientos, ideas y cosassemejantes. Este mandamiento también cubre aquellasocasiones cuando el valor de su trabajo dependede su familiaridad con la situación a su alcance ¡Enresumidas cuentas, siempre mantenga sus antenasarriba!Ignore las pequeñeces. Manténgase sobre las pequeñeces,o será arrastrado con ellas. Siempre habrápersonas que conviertan un pequeño montículo enuna montaña. Esperamos que no sea usted.
8.9.10.Sea paciente. No confunda estocon tolerar la incompetencia, estemandamiento cubre una multitudde situaciones. Digamos quealguien le comprendió mal y untrabajo está tomando más tiempode lo debido. Se está perdiendotodos los semáforos ¿Qué ganarási pierde los estribos? No soy pornaturaleza un hombre paciente,así que he tenido que trabajarmucho en este mandamiento. Siyo pude hacerlo, ¡usted también!Una buena actitud depende deusted. Creo que todavía falta muchopara que el mundo se acabe,así que no actúe como si va a ocurrirtodos los días. Conviértase enuna persona alentadora y alegre.Rehúse deprimirse por problemasmenores o mayores. Las malas actitudesson contagiosas. La buenanoticia es que la actitud positivatambién lo es.Dé lo mejor de usted. Como elmandamiento número uno, estodebe cubrir prácticamente todo.Nadie puede pedirle más.Es importante que decida prontocómo se conducirá de ahora enadelante. Entonces, cuando estalleuna crisis o aparezca un reto, nopensará dos veces sobre el caminocorrecto a seguir. Siempre hedicho que la práctica perfecta noshace perfectos. Estas reglas noson la excepción. Y sólo para suinformación, estas reglas tambiénse aplican fuera de la oficina.ContactoHarvey Mc Kayharvey@mckay.comwww.mackay.comLa moraleja de Mackay: Algunas reglasno fueron hechas para romperse.Reproducido con permiso del columnistaHarvey Mackay, autor del bestseller No.1 del New York Times, “Swim With TheSharks Without Being Eaten Alive.”63