Socialismo%20y%20Estado.%20conferencia%20%281%29
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abandonar sus cuarteles, mientras 4 batallones de la Guardia Móvil se amotinaron,<br />
uniéndose al pueblo en armas.<br />
El 10 de marzo de 1871, la Asamblea nacional de mayoría monárquica transfiere<br />
su sede de París a Versalles, temerosa de una situación y una ciudad que ya no controla.<br />
El mismo día, adoptó una ley que instaba pequeños comerciantes y artesanos a pagar<br />
sus deudas, los inquilinos a pagar sus alquileres, y suprimía el sueldo de la Guardia<br />
Nacional. También el 10 de marzo, una asamblea general de los soldados federados de<br />
la Guardia Nacional decidió no obedecer más a la autoridad del General bonapartista<br />
que había nombrado el gobierno, proclamando el fin del ejército regular permanente, y<br />
que el poder recayese en un autogobierno de los ciudadanos libres.<br />
El 11 de marzo, el General Vinoy, comandante en jefe del Ejercito de Paris,<br />
suspendió la publicación los periódicos de izquierdas como La Caricature, Le Père<br />
Duchêne, o Le Cri de Peuple (el grito del Pueblo) de Jules Vallès. También condenó a<br />
muerte por contumacia a Blanqui y Flourens, lideres de izquierdas involucrados en la<br />
revuelta del 31 de octubre contra el Gobierno de Defensa Nacional.<br />
El 15 de marzo, 1325 delegados de 215 batallones de la Guardia Nacional<br />
votaron la creación de su Comité Central, compuesto de 33 miembros y a la cabeza del<br />
cual quieren nombrar a Garibaldi como General en Jefe. Pero éste rechazó la oferta. En<br />
esta asamblea ya no participaron los delegados de los distritos burgueses de París. La<br />
mayoría de los miembros del comité provenían de las capas populares de la sociedad,<br />
pero no eran todos proletarios: pequeños patronos y comerciantes, artesanos y<br />
autónomos superaron en número a los obreros. Lo que les unía era la defensa de una<br />
República amenazada por una Asamblea Nacional dominada desde el 8 de febrero por<br />
los monárquicos y, sobre todo, eran partidarios de la democracia directa y el control del<br />
pueblo sobre todos los asuntos de interés público.<br />
Desde Versalles donde ya estaba establecida la Asamblea Nacional de mayoría<br />
monárquica, los planes eran claros: para poder reprimirlos, hay que impedir que los<br />
revolucionarios parisinos se quedasen con los cañones de la ciudad. Los 8 y 16 de<br />
marzo, un primer intento para recuperar las baterías de Montmartre y de la Place des<br />
Vosges fracasó.<br />
REVOLUCIÓN Y COMUNA<br />
La jornada del 18 de marzo<br />
En la tarde del 17 de marzo, el Gobierno dirigido por el reaccionario Thiers,<br />
reunido todavía en el Ministerio de Asuntos Exteriores, en pleno París, volvió a ordenar<br />
la captura de los cañones custodiados por la Guardia Nacional, así como el arresto de<br />
los lideres revolucionarios.<br />
Thiers consiguió engañar al pueblo en armas difundiendo una orden falsa del<br />
alcalde del distrito XIII que le pidió abandonar las baterías y parques de artillería. Al<br />
mismo tiempo, ordenó al ejército, compuesto de regimientos de línea de provincia, de<br />
guardias republicanos, de policías y gendarmes armados para la ocasión, que se<br />
apoderasen de los puntos clave de la ciudad; infantería, caballería y artillería<br />
‘versalleses’ se quedasen en la retaguardia. Rápidamente, al favor de la noche y gracias<br />
al engaño, el ejercito se apoderó de Montmartre, las Buttes-Chaumont, Belleville,<br />
Ménilmontant, las estaciones del Norte y del Este, el Hôtel de Ville, la plaza de la<br />
Bastilla, la Isla de la Cité, los puentes de Austerlitz y del Arsenal, las Tullerías, la<br />
Concordía y los Campos Elíseos. A las 6 de la mañana del día 18, París parecía bajo<br />
control del Gobierno de Thiers. La tropa solo esperaba a que llegasen los caballos para